»¿Atrapar o ser atrapada?

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El día para empezar la búsqueda de las arañas, comenzó. Kishumi tenía un pequeño papel, en dónde tenía anotado los nombres de las arañas buscadas y la imagen de cada uno de ellos para poder identificarlos en caso tal de encontrarse con ellos. Pero antes de iniciar con su ''misión'', ella debía investigar, y mucho.
"A todo esto, ¿Por qué las arañas son tan buscadas? si están ofreciendo tal recompensa es porque han hecho algo terrible... ¿No es así?" - Pensaba la pequeña chica con intriga y confusión. La verdad, es que sí. Esas "arañas" hicieron algo terrible e imperdonable.

En las investigaciones que realizó Kishumi, pudo encontrar que hace unos días, una subasta estaba siendo realizada en Yorknew city, en dónde estaban varios miembros de la mafia muy importantes y reconocidos, qué sin razón o motivo aparente, habían desaparecido sin dejar rastro alguno, además que todos los objetos que serían subastados aquella noche también habían sufrido aquel mismo misterioso destino.
Las únicas pistas que se rescataron, es que el salón estaba lleno de agujeros en las paredes, agujeros tan pequeños cómo si una bala pasara a través de ellas, pero lo raro viene aquí: No había sangre, no habían cadáveres, no había ningún rastro de las personas que fueron a la subasta, o, los responsables de aquella tragedia.

Kishumi había quedado impactada por aquella noticia, ¿cómo es posible que eso sucediera?... No, sí era posible. Esto sí era posible en un mundo dónde cualquier persona puede ser usuaria del nen y tener las habilidades que uno desee acorde a su categoría... No debería ser sorpresa de Kishumi qué algún usuario nen haya podido ocasionar esto. En eso, a Kishumi se le vino algo a la mente. - "¿Y si las arañas son usuarias del nen?, ¿Y si ellas resultan ser más fuertes qué yo?, ¿Y si no soy capaz de cumplir mi objetivo?... ¿Y si muero en el intento?..." - Una vez más, pensamientos inseguros y pesimistas atacaban a la mente de la pelirroja, haciéndola retroceder un poco en su determinación y ganas de seguir con su misión.

-"Debería... ¿rendirme?..." - Pensó Kishumi al verse envuelta en dudas y nervios al no saber la fuerza de sus oponentes. Pero después de unos minutos, Kishumi sacudió su cabeza e hizo cómo si nada hubiese pasado. Ya había tomado el exámen del cazador, ¿Por qué debería rendirse ahora?, seguro esto era mucho más fácil... ¿verdad?... Mejor dejemos que fluya un poco la positividad en el ambiente.

La pequeña pelirroja estaba preparada, ella tenía un pequeño plan por si encontraba a cualquiera de las arañas, no era mucho, pero era ingenioso. No todo tiene que ser peleas en este mundo... un poco de diálogo y saber aprovechar su imagen de "niña pequeña" (Qué tan pequeña no es a sus 15 años), serían la clave para poder capturar tan siquiera a uno de ellos, perfecto ¿no es así?... Bueno, sí y no... Solo faltaba encontrarse con las arañas...

Kishumi iba caminando por la ciudad de Yorknew, observando cuidadosamente a todos los ciudadanos para bajar la mirada y compararlos con su papel. Viendo cómo no tuvo éxito en encontrar a alguna persona parecida, vuelve a alzar la mirada y observar de nuevo a los ciudadanos. Por un momento, al alzar la mirada, vió una gran multitud alrededor de un pequeño espacio. ¿Qué estará pasando?

Kishumi pasa entre la gran ola de personas para encontrarse con que estaban haciendo un concurso de "pulso" . En aquel pequeño espacio estaba ubicada una pequeña mesa, donde estaba sentado un chico moreno de cabellos negros que tenía un aspecto cansado. A su lado izquierdo, estaba un chico albino, ojos de gato, que sostenía un caro diamante en sus manos; Y al lado derecho del moreno, había un joven alto, con lentes y cabellos también negros, que sostenía un micrófono.

"He trabajado muy duro por ahora... creo que tomaré un descanso para ver el concurso" - Piensa Kishumi mientras sonríe un poco y se acerca cada vez más a la mesa dónde se encuentran aquellos organizadores del concurso. Cuando de repente, el más alto de los 3 nota la presencia de Kishumi, y con gran entusiasmo le apunta con un dedo y procede a gritar en su micrófono.

Mi marioneta personal || Shalnark & OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora