El galán dominante de la escuela me ruega que vuelva

Capítulo 138. Guerra de palabras

—¿Qué crees que estamos tramando?

Aunque no sabía qué estaba tramando, definitivamente tenía que mostrar determinación. Lin Shuo levantó ligeramente la barbilla, adoptando una postura altiva con los brazos cruzados, apoyado en la pared, mirando a Lin Su de arriba abajo.

El nombre de la otra persona era similar al suyo, pero claramente no era alguien que pudiera pelear. Como dicen, era inútil, ni siquiera servía para soportar la salsa de soja. Si lo golpeaba, parecería mezquino, pero si no lo hacía, ¿para qué cerrar la puerta? Miró de reojo a Jiang Yi.

El tipo aún le hacía señas claramente visibles, moviendo la cabeza hacia Lin Su. Su mirada decía claramente: ¡Vamos, laozi cerró la puerta para ti y tú sigues ahí parado!

—Es demasiado débil, no vale la pena golpearlo—dijo Lin Shuo sin rodeos.

Hizo un gesto a Jiang Yi para que abriera la puerta.

Sin embargo, resultó que Lin Su fue el primero en provocar. Hizo un ruido de desdén sin ton ni son:—Ustedes dos son conocidos por pelear, ¿todavía tienen que elegir quién es más fuerte? ¿Ahora no me golpean porque están enamorados y eres menos valiento, miedo de que Yun Yaoze no le gustes de esta manera?

—Si no le gusta, ¿significa que le gustas a él? —sarcásticamente comentó Jiang Yi.

—No sé si le gusto o no. En el futuro, podría gustarle a otra persona. Las relaciones que comienzan desde la escuela, ¿cuántas llegan hasta el final? Les deseo toda la felicidad. —Sonrió Lin Su, una sonrisa que no llegaba a sus ojos, cargada de ironía.

—¡Oye, con mi temperamento explosivo, no entiendo por qué no me gusta escucharte hablar!—amenazó Jiang Yi con los ojos muy abiertos..

Se enteró del hecho por Xu Xian Bagua sobre cómo alguien casi arrinconó a su hermano (Yun Yaoze), y lo había visto venir al gimnasio varias veces para ver partidos.

¿No es intencional querer seducir a Yun Yaoze?

—Si no quieres escuchar lo que digo, puedes ignorarlo, nadie te está obligando a escuchar —Lin Su parecía amable pero sus palabras eran sarcásticas y directas—. He oído que te llevas bastante bien con Xu Xian, ¿ves cómo Lin Shuo tuvo éxito en seducir a Yun Yaoze, y tú no puedes resistirte a entregarte también? ¿Te estás apresurando a ofrecerte para que te usen?

La cara de Jiang Yi se puso pálida.

Lin Shuo parecía estar metido en problemas. Aunque Jiang Yi había aceptado la situación con Xu Xian y lo que había sucedido, todavía era muy sensible, especialmente cuando se trataba de escuchar rumores de otras personas.

¡Lin Su estaba claramente provocando!

—¡Hijo de puta, quién te crees para hablar tonterías sobre mí! —Jiang Yi estaba enfadado, levantó el puño y estaba a punto de golpear a Lin Su—. ¡Tu boca está tan sucia, ¿crees que no romperé tus dientes?!

Lin Shuo se acercó y lo detuvo.

—¿Qué estás haciendo?—Jiang Yi gritó, frustrado.

—No sientes que está provocando? Si lo golpeas, se quejará con el profesor y te pondrá en una situación difícil. ¿Por qué debemos ser los que salgamos perdiendo agregándole aceite y vinagre?

Lin Su les lanzó una mirada de desprecio.

No esperaba que Lin Shuo fuera un poco listo.

Pero no creía que la gente que disfrutaba peleando tuviera mucha inteligencia, después de todo, sus calificaciones académicas lo decían todo: uno estaba en último lugar y el otro en penúltimo. Si tenían alguna inteligencia, era limitada. Por mucho que Lin Su los provocara, sabía que Lin Shuo terminaría peleando, y entonces los denunciaría a ambos.