Las delgadas manos de Mina se encontraban colgando habilidosamente un cuadro en la pared de su hogar. De repente sintió un peso colgarse sobre sus hombros, acompañado de aquella risita que la tenía tan enamorada; Era Chaeyoung. No pudo evitar sonreír, dándose la vuelta para abrazarla una vez que acabó lo que estaba haciendo.
La nipona hundió su nariz en los ahora negros cabellos de su esposa, inhalando su dulce aroma frutal. Sí, así es. Esposa ¿Suena lindo, verdad?
─ ¿Se ve bonito? ─ Preguntó la mayor refiriéndose a la fotografía enmarcada que acababa de colgar en la pared. Era la foto de su boda en la que ambas se encontraban con hermosos vestidos blancos y sonrisas que fueron capturadas para la eternidad en aquella foto.
─ Muy bonito. ─ Respondió Chaeyoung, rozando su nariz con la de Mina de forma amorosa. ─ Tan bonito como mi esposa.
Una risa boba escapó de los delgados labios de Mina, dejando ver sus encías. Al haber contraído matrimonio hace tan solo una semana, aún no se acostumbraban a la idea de estar casadas, aunque se encontraban extremadamente enamoradas de la misma. Chaeyoung no dejaba de referirse a ella como su esposa en cada oportunidad que tenía.
Al cabo de unos minutos, luego de dedicarse unas cuantas palabras amorosas, deshicieron aquel abrazo. Mina se volvió hacia Chaeyoung con una sonrisa juguetona, apoyando una mano en su cintura.
─ Bien, señora esposa ¿Quė le apetece cenar esta noche? ─ Preguntó en un tono elegante, apretando un poquito el agarre en su cintura, causándole cosquillas a la menor.
─ Hmm... Algo delicioso. ─ Chaeyoung apoyó sus manos sobre los hombros de la nipona, parándose de puntitas para estar más cerca de su rostro.─ Me refiero a ti.
─ Oh, Chaeyoung. ─Mina pasó sus manos desde la cintura de Chaeyoung hasta su espalda, atrayendola para unir sus labios en un beso amoroso. Realmente estaba feliz de tenerla a su lado, de haberla permitido entrar a su mundo y reconstruirlo juntas. Mina amaba poder besar todos los dias los rellenitos labios de la persona que salvó su vida una y otra vez.
Aquel beso se alargó más de lo que hubieran deseado. Chaeyoung, a pesar de seguir viendose igual de brillante e inocente, en realidad solía ser quien tomaba la iniciativa en todo lo que respecta a su vida sexual.
Al principio, Mina tenía algo de miedo de forzar las cosas, de que tal vez Chaeyoung no quisiera o no se sintiera lista para hacerlo, pero grande fue su sorpresa cuando, a los pocos días de haber empezado a vivir juntas en casa de la madre de Chaeyoung, la menor le pidiera, en plena sesión de besos, llevarlo al siguiente paso.
Chaeyoung no perdía ninguna oportunidad, hoy tampoco fue el caso. Fue cuestión de minutos hasta que ambas se encontraron envueltas entre sí, siendo cubiertas solamente por las mantas y una fina capa de sudor sobre sus pieles. Siempre que lo hacían, parecian buscar fundirse una sobre la otra.
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ʟɪᴛᴛʟᴇ ꜱᴜɴꜱʜɪɴᴇ | ᴍɪᴄʜᴀᴇɴɢ
Fanfiction❝Son Chaeyoung, por favor quítese los audífonos, estamos en clase.❞ La chica nueva en el colegio era algo extraña y no obedecía ciertas reglas escolares. Además, solía tener problemas para hacer amigos, por lo que era un blanco para los bullies...