• La Lluvia De Nuestro Amor • |Hyunlix|

Capítulo 9

Narra Hwang Hyunjin...

Parecía que todo estaba en mi contra... Félix no despertaba, ya habían pasado dos días, ya que para calmarlo los malditos doctores le inyectaron más de 5 calmantes y sueros, entre esos sedantes... 

Estaba con mi chico de pecas, él recostado en aquella camilla y yo en un sofá al costado de él... Esperando a que despierte...

Sentía que mi corazón latía lento, porque no quería perder a la única razón por la que era feliz... Estaba preocupado, fue la primera vez Félix acababa en el hospital por un ataque de pánico... ¿algo le ocurrió? Solo él podría responder a esa pregunta... 

En ese momento sentí que mis lágrimas bajaban, otra vez.. Me dolía ver a mi chico en aquella camilla y sin despertar...

— ¿Q-qué me pasó? — dijo Félix, en un susurro...

Al oír su voz levanté la vista, encontrándome con el chico de pecas, quien despertaba y se sentaba en la camilla, yo me acerqué a él para poder abrazarlo...

— Lixie, despertaste al fin... — dije sonriendo...

— Jinnie... Creí que no volvería a verte jamás, era un miedo enorme, sobretodo cuando... Mi padre me dijo que tú me veías como una carga... — dijo Félix, con la voz quebrada...

En ese instante no supe si sentir tristeza por mi chico, o sentir un enfado que nublaba mis sentidos en contra de ese hombre que decía ser su padre.. ¿acaso había tanta maldad en contra de un chico tan tiernoy lindo como Félix? Yo digo que merece una paliza ese hombre...

— Lixie... Yo nunca te consideraría una carga, porque solo quiero sanarte, quiero que olvides todo el daño que alguna vez te hicieron, solo deseo eso, porque por todo lo que me has contado... Sé que tu vida no ha sido sencilla, aún así desearía sanarte, darte esa alegría que mereces, quiero ver tu linda sonrisa día a día, y no vernesas lágrimas que inundan tus ojos... Solo quiero verte feliz, y yo prometo cuidarte y darte esa felicidad... Sin ti es como si el aire faltara... Estos dos días que no despertarse conocí en sentimiento de angustia, s extraño, porque nunca me preocupé por alguien que no fuese yo, porque siempre fue así, pero apareciste tú, Lixie, tú te volviste mi mundo, el chico que día a dia me hacía sonreír, que me hace reír, y que le roba latidos a mi corazón, sin ti, no queda nada porque te volviste mi vida, ese chico que ahora en clases en la academia va a verme, vamos a pasear juntos, eso es lo que yo realmente amo, el tiempo y cada cosa que me enamoró de ti, porque desde el primer día en que te vi, en aquella cafetería... Me pareciere un chico realmente encantador, pero tu mirada me contaba una historia triste, ahora de eso solo queda un recuerdo lejano... — dije, sin dejar de verlo, sonriendo y tomando su delicada mano entre las mías...

— Jinnie, es que... Yo siempre consideré gracias a mi padre que todos me veían como una carga, hasta mis amigos, decía que nunca nadie querría estar conmigo, y noche tras noche sus palabras llegaban como látigos que me martirizaban, por lo que jamás me vi fuera de esa casa... Empecé a trabajar con el fin de pasar menos tiempo en casa, hasta que tiempo después noté que era un fantasma, salía o llegaba a la casa y nadie se daba cuenta de ello, eso me dolía, duele... Y yo solo me encerraba en mi habitación a llorar, era mi único escape, hasta que empecé a automutilarme... Era algo que simplemente ocurría y solo reaccionaba al sentir el ardor en mi brazo y al ver sangre en el suelo o en mi ropa... Un día antes de conocerte lo hice, por eso llegué a trabajar con una venda en el brazo, a nadie le importaba según yo... Pero te conocí, esa noche que me llevaste a tu departamento cuando estaba en el parque... Fue lo mejor, porque me dolía estar en mi casa, y quedarme contigo fue lo mejor, sin contar ese primer beso que me transmitió todo lo que sentías, no servían las palabras, solo quería sentir lo que tú sentías, lo que te motivaba a besarme... Y yo cuando te conocí sentí simplemente amor... Era lo que sentía, pero lo guardaba, gracias a ti sonreía, gracias a ti sonrío.. Y gracias a ti conocí la felicidad — dijo Félix, sonriendo...

Yo en ese momento decidí acercarme a su labios, aún sin besarlo y sonriendo...

— Te amo, Lixie — dije, sonriendo, antes de besar sus labios con extrema delicadeza...

La única forma de lenguaje directo que yo tenía con Félix eran los besos, con ellos solo buscaba manifestar lo mucho que lo amaba, toda la felicidad que provocaba en mí... Me sentía completo gracias a él...

Narra Lee Félix...

Aquel beso estaba lleno de sinceridad, sintiendo simplemente como nuestros labios iban al compás, como si bailaran una canción que únicamente nuestros labios sabían, una canción que manifestaba lo mucho que nos amábamos... 

Sus besos me hacían sentir vivo, me hacían querer dejar todo y estar solo con él y para él, quizá eso era lo que más amaba... Que gracias a él, conocí un mundo en el que solo nosotros vivíamos, uno en el que nadie podía interrumpir ni dasu opinión...

Eso lo entendí por él, por Hyunjin, por años consideré que el error era yo y cada cosa que hacía, porque así me lo hicieron ver, hasta que lo conocí... Hasta que conocí a quien llenó todos mis días de felicidad, y que yo igual le daría esa felicidad... Porque Hyunjin es mi felicidad y mi razón para aferrarme a la vida...