Qatar, Enzo, Lean y..

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¿Que había pasado? ¿Me dejé caer ante los brazos de Enzo?
Es.. inexplicable. Me tenía que alejar de él, y simplemente, lo besé.
¿Sentirá algo por mi? No lo creo..

Después de estar horas pensando mirando el techo, mis ojos se cerraron lentamente y caí en un sueño profundo..
A la mañana, despierto.. Obviamente no me desperté así sola, me estaban llenando de mensajes..

 Obviamente no me desperté así sola, me estaban llenando de mensajes

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- Moro
8;02 am ✓✓

- Morooo
8;12 am ✓✓

- Flacaa, estoy yendo a buscarte, estás dormida?
8;14 am ✓✓

- te moriste, te dió algo, dale boluda
8;20 am ✓✓

- Bueno, ya voy, banca, no te mueras
8;23 am ✓✓

  u lpm, me acabo de despertar -
8;30 am ✓✓

- alta dormilona, moro, en cinco estoy, dale, qatarrrrrrrrr
8;32 am ✓✓

- bueno, clavame el visto, total, ni quería un gracias o buenos días, forra
8;34 am ✓✓

- bueno, clavame el visto, total, ni quería un gracias o buenos días, forra8;34 am ✓✓

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..
Me reía por dentro, era un dulce.
¿¡En cinco está!?
Ni cambiada estoy, la puta madre, y Renata se desapareció, seguro anda con un pibe, guacha.

Fuí al armario rápido. Había una remera de Argentina, pero.. Tiene el dorsal de Enzo. Buee, a la mierda todo.
Me puse la remera de Argentina, era ligeramente pegada al cuerpo pero al mismo tiempo suelta. Y abajo tenía un short blanco, que básicamente, me marcaba todo, pero todo.
Apenas termine de cambiarme, Enzo toca la puerta, bueno, obviamente es Enzo.
Agarré un cepillo para peinar mi pelo, y dije mientras me peinaba.
"Pasá, está abierto."
Miraba la puerta mientras me cepillaba.
Después se abre la puerta desde afuera, y pasa a la habitación.. ¿¡Leandro!? ¿Que hacía acá? ¿Cómo sabía que era mi habitación? ¿Porqué no me dijo nada?

Lean pasa a la habitación y me mira, después dice.
— "Perdón, Moro, por pasar así sin más.."
Se acercaba de a pasos a mi, se le notaba, ebrio.. Estaba casi totalmente borracho. Lo noté por su manera de caminar, y el olor a cerveza que inundaba la habitación.
"¿Que haces acá? Borracho.."
Pregunté y lo mire de arriba a bajo, mostrándole una mirada en desacuerdo por su estado.
— "No sé.. Yo.. perdón. ¿No me podés dar un abracito? Después me voy.."
Lean se acercaba, ya estaba al frente mío, casi pegado.
Bueno, básicamente me estaba pidiendo un abrazo, ¿Cómo negarlo?
Asentí lentamente y me acerqué más a él, puse mis brazos detrás de su espalda y lo abracé, en un cálido abrazo.
Lean me devolvió el abrazo y puso su cabeza en mis hombros, casi al lado de mi cuello, parecía cómo si se estuviese refugiando ahí, un tierno..
..
En un momento sube la mirada, sin dejar de abrazarme, y me ve a los ojos, con esos ojos suyos que brillaban..
Pero de un momento a otro, me da un beso en la mejilla, pero uno largo.
Y así de repente, entra Enzo por la puerta que estaba medio abierta..
Enzo ve la escena. Su rostro antes parecía, feliz.. Y ahora se notaba, molesto, triste.. Y capaz que celoso.
Lean desp se aleja de mí, y ve a Enzo.. Enzo dice, evitando a Lean y mirándome a mí.
— "Eh.. Bueno, yo.. No quería interrumpir.. Yo.. Mejor espero afuera, si.."
Enzo antes de irse, deja un ramo de flores arriba de mi cama.. ¿¡Que entendió!? Dios.. Imagínate la ilusión de darle flores a alguien que querés, y ese alguien está con otra persona.. ¡Dios, que no lo haya entendido así!
Dejé a Lean, en mi habitación, y fui casi corriendo a seguir a Enzo.
Enzo seguramente escucho mis pasos y se freno en el medio del pasillo..
Le agarré su brazo sin tanta fuerza, pero la necesaria para que me mire. Enzo se da la vuelta y me mira, sus ojos estaban brillando, pero no por alegría.. Si no angustia, le noté la bajoneada apenas lo ví a los ojos..
"Enzo.. Seguramente lo que pensaste, no fue lo que pasó."
Le dije mientras lo miraba a los ojos, apenada.. Apenada por ese error, fue casi inevitable.

— "¿Y que pasó, Moro? ¿Te besaste con Leandro, antes de que yo vea? Bueno.. No es de mi importar.."
A lo último su voz sonó quebrada. Después miro hacía otro lado, aguantando las lágrimas.
"No.. Enzo, escúchame. Lean, está borracho, pensé que eras vos el que tocó la puerta.. Y Lean me pidió un abrazo, y después así de la nada, me da un beso en el cachete, boludo.."
Le digo con una voz suave, tratando de calmarlo, mi mano seguía en su brazo, casi rogándole para que no se vaya.
Enzo me mira a los ojos, y ese fue el momento dónde quiebra.. Me abrazo con fuerza y escondió su cabeza entre medio de mi cuello y pecho.. Sentía cómo lloraba en silencio. Es cómo un perrito, necesita amor todo el tiempo, y si se siente reemplazado.. Llora.
Me abrazo con más fuerza, como si ese abrazo estuviese ahí, para ocultarse de sus problemas.. Capaz lo del beso de Lean, fue lo que lo quebró, y ya venía mal desde antes.
Acaricié su pelo con una mano y con la otra lo abrazaba.
Escuché cómo hablo, aún que entre cortado por las lágrimas y el llanto.
— "Moro.. ¿No te besaste con Leandro?.. ¿Verdad?.. Es que no sé.. Yo.."
Sin terminar la frase rompe en llanto de vuelta, y se esconde en mi cuello.
Dios, es un sol.. Me dió cómo esa penita, esa penita fea, pero al mismo tiempo linda.
¿Y porqué estaba tan preocupado si yo me había besado con Leandro? No somos nada...
..
"No, Enzo, no me besé con Lean. ¿Porqué tan preocupado por eso?"
Le seguía acariciando el pelo, y el se apretaba más a mi, y su cabeza seguía escondida ahí, entre medio de mi cuello y pecho, solo que cada vez se escondía más entre mi cuello, y pelo.
Habló de nuevo, un poco más tranquilo.
— "Ah.. Bueno, yo solo preguntaba.. No es que me importe.."
Seguía abrazado pero sin tanta fuerza.
"¿Seguro que no te importa? No sé, viste.. Me da una penita que llores así."
Lo abracé con más fuerza por la ternura que me causó él.
Me abrazó con más fuerza también. Después dijo con una voz más dura pero cálida, y al mismo tiempo, tierna.
— "Y si no querés que llore.. No te acerques a otros que no sea yo, solo digo."
Reí un poco, y después el añadió.
— "Solo digo, solo digo. Dale, vamos ya, que se nos va el vuelo y toda la bola. Que Leandro vaya solo, desde ya te lo digo, Morocha."
Decía que había que irnos pero no sé soltaba de mí. Ah, si es verdad.. De repente salgo de esa realidad tierna, había que irnos.
"Y el irnos, ¿incluye soltarme? O no."

Enzo río medio apenado pero después cambio su cara, así parecía más "Macho", es un personaje, a veces..
Se alejo de mi, pero me agarraba la mano, y después me miraba a los ojos. Parecía un nene chiquito.
— "Del abrazo, nomás, Moro.. Yo no te soltaría nunca. Solo digo, solo digo."
Río un poco y camino a la par conmigo hasta la salida del club, y de la salida al auto.
Cuándo decía "Solo digo", se me venía a la cabeza cómo si estuviese diciendo, "Viste, te convengo yo."
Seguramente, estupideces mías.
Enzo me abrió la puerta del auto para que pasase al asiento de acompañante, me senté y le sonreí agradeciendo por su gesto.
Después se sienta en el asiento de conductor, y arranca el auto, directo hacia el aeropuerto.
..
A la mitad de camino más o menos, Enzo pone su mano sobre mi pierna, y para después ponerla en mi muslo.
Lo miré y le pregunté.
"¿Que haces? Chanta."
Reí un poco.
Enzo chasqueo la lengua, y después sonrío.
— "Que te haces, si te encanta, Moro."
Reí nuevamente y le pegué sin fuerza en el hombro, el río.
Pero Enzo, estaba decidido a no sacar la mano de ahí, al menos que se lo pidiera, y eso no iba a pasar..
Cuándo llegamos al aeropuerto, Enzo estaba buscando donde estacionar, y cuándo encuentra lugar, pone el auto en marcha atrás. Para ver lo que pasaba atrás, Enzo necesitaba mirar para atrás, obviamente. Así que cuándo se da la vuelta, aprovecha para apretar mi muslo, sin tanta fuerza, pero realmente, la necesaria para que me dé un escalofrío, pero ese que te da placer. Su excusa fué que hizo fuerza "sin querer", porque se tuvo que dar la vuelta, aún que después río, demostrando que era mentira, pero bueno.. Reí.

Estacionó el auto, salió del auto, y fue para abrirme la puerta, para que saliera. A veces es un caballero, o un tierno, o un.. Calentón, pero no de enojado.. Si no, el otro sentido.
Salí del auto, y automáticamente Enzo me dió la mano.
Después caminamos hacia el aeropuerto, y ahí vimos a los demás..

𝐌𝐎𝐑𝐎𝐂𝐇𝐀 - 𝓔𝓷𝔃𝓸 𝓕𝓮𝓻𝓷𝓪𝓷𝓭𝓮𝔃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora