Amor en secreto (finchel) terminada<3

capítulo 7

Finn iba en su convertible, llevaba puestos sus lentes y el fuerte aire jugaba con su cabello. En el trayecto no pudo evitar recodar la bella sonrisa de Rachel... esa sonrisa formada por sus labios, los cuales él deseaba probar. Desde la primera vez que la vio añoro el día en que sus labios y los de ella estuvieran juntos...pero jamás imagino que le costaría tanto trabajo...el carecía de paciencia y no le daba pena admitirlo.
― Pronto sentiré tus labios― Dijo en voz alta seguido de una sonrisa.
Llego a la empresa, al entrar todos lo recibieron como lo que era... el dueño y jefe. La secretaria, de nombre Santana López, siempre había sentido cierta atracción hacia él, y en una ocasión el se había acercado a ella... pero después de haber conocido a Rachel Berry, nunca más le dio esperanzas a Santana.

― Finn, es agradable tenerte aquí― Le saludo Santana mientras sonreía de forma seductora.―
―Gracias Tana― Hudson pensó en levantar la mano y enseñarle su anillo de matrimonio, pero pensó que sería muy bajo de su parte― Puedes decirle a Sam que pase a mi oficina, ¿por favor?
― Por supuesto― Contesto ella mientras levantaba el teléfono.
― Te extrañaba― Se refirió Finn a su oficina mientras se sentaba en su silla de trabajo. ― Este escritorio necesita algo... necesita una foto de Rachel― Pensó en voz alta.

― Amigo― Dijo Sam mientras entraba― ¡Me alegro tanto de que estés aquí! ―
Finn se levanto y lo abrazó dándole unos golpecitos en la espalda.
― Espera un momento― Dijo Sam, mientras entrecerraba los ojos― Vuelve a levantar tu mano izquierda.
Finn la levanto mientras sonreía
― No lo puedo creer... Finn Christopher Hudson... ¡te has casado! ― Sam volvió a abrazarlo― Cuando me dijiste que estabas a punto de casarte con... esa chica ¡jamás pensé que hablaras en serio!
― Eso explica el porqué de tu ausencia en la ceremonia― Bromeo Finn
― Pensé que estabas jugando... no pensaba gastar dinero en un boleto de avión para que cuando llegara escuchara un: era broma. Debiste insistirme con que era cierto... así no me lo habría perdido. Aun así muchas felicidades― Sam tomó asiento― Y bien, ¿cuál es su nombre?
― Gracias por tu felicitación. Se llama Rachel Hudson― Una amplia sonrisa apareció en su rostro― Anteriormente Rachel Berry.
― No dejaste de hablarme de ella durante 3 meses... y mira finalmente te has casado con ella. Apuesto a que son muy felices.
― Algo así― Dijo Finn haciendo una mueca― Apenas nos casamos ayer y digamos que las cosas no han resultado tal como lo esperaba... bueno si, pero solo las cosas malas―
― No te preocupes... con el tiempo tendrán una relación llena de amor― Dijo Sam comprendiendo las palabras de su amigo.
Finn le había contado todo a Sam. Para él, Sam más allá de ser un amigo era un confidente, y por lo tanto sabía los sentimientos de Rachel hacia su mejor amigo Finn.
― La hubieras traído. Pasado mañana habrá una fiesta de etiqueta ― Dijo Sam
― ¿Qué celebramos? ― Preguntó Finn con entusiasmo
― En lo que va del año hemos duplicado las ganancias y además firmamos contrato con Épsilon, ya sabes, la empresa que tanto deseabas.
― Estoy impactado― Dijo Finn abriendo sus ojos como dos platos― Buen trabajo Samuel, y bueno para tu información, Rachel ha venido conmigo... solo que se ha quedado en casa.
― De veras que te gusta estar cerca de ella el mayor tiempo posible, no has aguantado dejarla en Nueva York por tres días― Negó con la cabeza a manera de burla.
― Ni tres, ni dos, ni siquiera un día podría estar sin ella― Admitió Finn― Es más, le he mentido diciéndole que tengo que estar aquí dos semanas
― Muy mal... apenas llevan un día de casados y ya has dicho una mentira Christopher― Su amigo soltó una carcajada. ― ¿Para qué le has dicho que son dos semanas?
― Porque en parte... quiero disfrutar de Hawái en compañía de ella... ya sabes como una luna de miel.

Sam levantó las cejas con picardía.

― ¿No te ha bastado con la noche de bodas? ― Pregunto él con voz ronca, siempre bromeaba así con Finn― Dale un respiro, hermano
Ambos rieron. Finn miro fijamente hacia unos papeles que tenía en su escritorio.
―Te vas a sorprender por lo que te voy a decir pero― Hizo una pausa para mirar a su amigo― No paso nada ayer, no la toque, ni siquiera dormimos en la misma cama.
― ¿Qué? ― Sam salto de su silla― Pero si la deseas desde que la conoces, como es que ahora que tienes derecho porque es tu esposa, no has aprovechado― Estaba sorprendido.
― Lo sé, se que yo mismo te decía que muchas veces tuve que controlar mis impulsos... pero la verdad es que quiero que cuando suceda sea porque ambos quisimos y no solo yo― Aclaro Finn mientras se servía un vaso con agua.
― En eso tienes razón― Coincidió su amigo―
― Tú sabes que quiero tener familia― Dijo Finn con media sonrisa
― Si, pero no tan pronto. También se que en este momento solo quieres demostrarle tu amor― Su amigo tenía una gran sonrisa.
― Así es― Contesto el antes de beber el agua de su vaso.
Ellos siguieron charlando mientras se ponían a trabajar. El tiempo voló, ya eran las 4:00 de la tarde y Finn no se percato de ello, hasta que Sam se lo dijo.
― Es muy tarde y Rachel esta sin comer, le prometí que comeríamos juntos. ― Dijo saliendo de la oficina― Nos vemos.

Finn condujo un poco rápido, anisaba llegar a casa y encontrarse con su esposa. Estacionó el coche y entro a paso rápido.
― Rachel― La llamo varias veces pero no obtuvo respuesta.
Camino hasta la habitación de su esposa y ahí la encontró dormida.
Es tan hermosa pensó Finn. Una vez más, pero sin que ella lo notará, la beso en la frente.