𝙀𝙨𝙥𝙤𝙨𝙤𝙨

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𝙱𝚊𝚜𝚎 𝙼𝚒𝚕𝚒𝚝𝚊𝚛, 𝚁𝚎𝚒𝚗𝚘 𝚄𝚗𝚒𝚍𝚘.


Al menos por el día de hoy Ghost debía de dejar de lado sus pensamientos sobre ____, se encontraría con su esposa luego de casi un mes, ella podría ser realmente insoportable si lo quisiera, o al menos eso era lo que él decía. 

Él tenía la oportunidad de ir cada fin de semana si quisiera pero no lo hacía, prefería quedarse en la base antes de regresar a "la casa" que él tiene. 

Se siente aprisionado, nunca pensó en tener una esposa, pero ahí está con una con la que va a cumplir 8 años de casado, ¿por qué había hecho eso? debió ser más inteligente y solucionar el problema de raíz. 

Se vistió con ropa casual, salió con uno de Jeeps a encontrarse con ella en uno de los restaurantes que siempre frecuentaban. 

Cuando él llegó no la vio y eso le irritaba, no le gustaban las tardanzas y ella iba 30 minutos tarde.

Amanda pensaba que si lo hacía esperar más eso generaría un deseo en su esposo para que pudiera verla y abrazarla, pero no, al contrario, él estaba a punto de estallar. 

Él la vio llegar, llevaba un vestido sobrio, casi nunca usaba algo alegre y si quiera algo elegante pero bonito, siempre usaba un traje como si fuera ir a un velorio, con una coleta de cabello limpia. 

- Hola cariño - ella se acercó y le dio un beso. 

- ¿Por qué no llegaste más temprano? Sabes que odio esperar, odio estar en un lugar mucho tiempo - tiró las flores que trajo para ella encima de la mesa. 

- Lo siento mucho cariño - ella bajó la cabeza y se sintió mal por haber hecho eso. 

Ghost cuando estaba con ella en persona era más suave con ella, a pesar de todo creía que por lo menos el día que pasara con ella no debía tratarla tan mal, al fin y al cabo era su esposa y debía mantenerla. 

Tenía un miedo de manera interiorizado, el mío de quedarse solo, por eso también hacía lo de comportarse lindo, así siempre tendría una garantía de nunca quedarse solo. 

- No importa, solo siéntate, almorcemos juntos - ella se sentó frente a él y empezaron a ver el menú. 

- Yo pediré solo espárragos en salsa de ostiones - ella sonríe al camarero. 

- Yo pediré pollo a la parrilla con papas fritas.

El camarero se fue y nos dejó, la verdad él no sabía de que hablarle a su esposa, ella siempre tenía que se la que sacara un tema de conversación. 

- ¿Cómo te va en tu trabajo, cariño? 

- Bien, todo normal con los reclutas... 

- Yo por mi lado también estoy bien, me gusta trabajar desde casa. 

Liar - 𝐒𝐢𝐦𝐨𝐧 "𝙂𝙝𝙤𝙨𝙩" 𝐑𝐢𝐥𝐞𝐲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora