Ｌｉａｒ － 𝐒𝐢𝐦𝐨𝐧 "𝙂𝙝𝙤𝙨𝙩" 𝐑𝐢𝐥𝐞𝐲

𝘼𝙜𝙖𝙞𝙣

𝙱𝚊𝚜𝚎 𝙼𝚒𝚕𝚒𝚝𝚊𝚛, 𝚁𝚎𝚒𝚗𝚘 𝚄𝚗𝚒𝚍𝚘.

Graves se enteró de esto y rápidamente fue en búsqueda de su amiga para que la pudiera consolar.

En ese momento a lo que el menos le importaba era el hecho de que empezando algo con Antuanette, ella le hiciera eso a él.

Si le gustaba y le gustaba mucho, la veía como una mujer bella, fuerte y carismática, realmente llegó a pensar que si podrían encajar juntos y ser una pareja.

Pero eso ahora ya no le importaba para nada, ahora lo único que estaba en su mente realmente como cosa primordial es el bienestar de su amiga. 

A la vez se sentía un poco culpable ya que hizo parte de las situaciones que hicieron que Ghost y _____ regresaran, no pensaba que esto pasaría, pero ya está hecho y no queda nada más que recoger los pedazos rotos de lo que se rompió. 

- Sé que estás mal pero no puedes encerrarte - decía Phillip, estaba sentado afuera, habían pasado ya dos horas y lo único que escucha desde dentro que sollozos. - Necesitas un abrazo y necesitas levantarte, no dejes que te vean mal. 

- Lo único que necesito es irme a casa y estar en la base contigo para dirigir a los Shadows.

- Pensaba que decías que esta era tu casa, es tu país...

- No, esta no es más mi casa, me siento como una extraña aquí, ya no pertenezco...

- Claro que perteneces, todos te quieren mucho, solo quedan 2 semanas más y volveremos, te prometo que haremos los circuitos que quieras pero ábreme. 

La puerta se abrió repentinamente y Phillip cayó para atrás, lo que hizo soltar una pequeña risita de _____.

- Lo siento. 

- Al menos te hice reír un poco - cerró la puerta y abrazó a su mejor amiga. 

Ya la había visto así antes, las veces en las que de la nada tenía mucha nostalgia y lloraba por horas, también cuando tenía pesadillas por las noches. 

Pero esto era distinto, no era un llanto de nostalgia o de miedo, era un llanto de dolor, pena y sufrimiento, sentía como la garganta de ____ se desgarraba al llorar, sus ojos estaban tan hinchado y apenas era capaz de articular palabras sin que lloro se interponga.

- No puedo creer como fue que lo hizo de nuevo, ¿Como es capaz de engañarme dos veces?. 

- No lo sé, a veces los hombres somos raros, no entiendo que pasó por su cabeza, pero debes saber que esto no es tu culpa, que tu no hiciste nada - besó su frente - eres tan perfecta, que no cualquiera puede con eso. 

- ¿Si soy perfecta por qué no me ama lo suficiente?. 

- Porque él es un idiota, porque tal vez se conforma con cosas que no valen la pena, es poco para ti... pronto llegará la persona correcta, te lo prometo.