demasiado jóvenes para saberlo todo, para conocer el mundo, aunque ellos creían todo lo contrario.
se amaron, claro que lo hicieron, a veces en tiempos descoordinados, otras en sincronía.
a pesar de las peleas, mal entendidos, conflictos, siempre...
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finalmente llego el día en el que me tocara acompañar a matias en un momento importantisimo de su carrera, la cual tuvo en sus comienzos muchos altibajos pero luego de agarrar confianza se afianzó como uno de los mejores jugadores argentinos del momento. yo sabía que podía lograrlo si se lo proponía.
los nervios que estaba sintiendo eran los mismos que sentía cuando estaba a punto de descubrir si había ganado o no el premio al que estaba nominada, a veces no podía creer lo mucho que me importaba pero desde hace tiempo que sus sueños eran los mios y viceversa. para que nuestra relación funcione habíamos planteado un sistema inquebrantable.
— te juro por dios que si ganamos hoy me pongo en pedo apenas llegamos al hotel — dijo victoria a mi lado demostrando los mismos nervios que yo
tanto matias como luka habían progresado una locura en sus carreras, al punto de hoy en día estar jugando una final de copa america contra nada más ni nada menos brasil, como últimamente sucedia.
— ¿qué ponernos en pedo en el hotel? te juro que le caigo a matias a la concentración y lo pongo en pedo hasta a scaloni — respondi observando como a lo lejos comenzaban a ingresar los equipos, teniendo a la cabeza del nuestro al cuti romero
que hombre.
— con la cantidad de veces que le rompiste los huevos a scaloni yo creo que debe tener tu entrada prohibida al predio de afa — respondió sacando dos chupetines de su cartera para luego ofrecerme uno, la mejor manera para ambas de bajar la ansiedad era comer algo dulce por eso mismo siempre en partidos importantes teniamos algo para comer
— ese me ama, le alegro las tardes — respondí sonriendo mientras negaba, siempre que las visitas estaban permitidas yo charlaba con toda persona existente, hasta incluso los del cuerpo técnico, se me había hecho muy fácil ser amiga de todos
luego de aquello nos mantuvimos en silencio debido a que comenzó a sonar el himno de brasil y luego comenzó el nuestro, el cual me provocó electricidad por todo mi cuerpo, la gente argentina siempre estaba demente por el fútbol, agradecia a dios haber nacido en este increíble pais.
el partido comenzó demasiado tenso como todo encuentro entre argentina y brasil, demostrando que la pica entre ambos países iba a existir para siempre. ambos estaban hambrientos por volver a sumar una copa america a la fila de trofeos.
las patadas entre los jugadores eran constantes pero aquello no quitaba que cada vez que veía a matias tirado en el suelo con muecas de dolor no me asustara, él estaba siendo uno de los blancos favoritos de los defensores brasileros. juraba que en cualquier momento podría saltar al campo y matar a alguno.
los minutos pasaron y con ello finalizó el primer tiempo, tome la botella de agua que se encontraba a mi lado y le di un gran trago, no sabía que me estaba deshidratando hasta que el agua comenzó a bajar por mi garganta.
— si no ganamos me voy a tener que meter todas las puteadas a los brasileros que me bardean en el orto — dije rompiendo el silencio que se había formado entre nosotros, gracias a que ibamos a jugar con los brasileros muchos seguidores del fútbol me atacaron en redes sociales debido a que manifeste estar segura de que ibamos a ganar, tuvieron algunas respuestas de mi parte pero tampoco les di mucha entidad
— vamos a ganar, no podemos perder porque se mata luka y yo me voy con él — me respondió vic sentandose en los asientos que apenas habiamos usado debido a lo inquietas que eramos durante los partidos
para nuestras parejas era el primer torneo oficial con la selección mayor por lo que deseábamos de todo corazón que se les diera, lo que más nos aterraba era que en algun momento sufrieran lo que sufrieron jugadores pasados.
el tiempo pasó muy rápido logrando que la segunda parte del encuentro comenzara, poniendole aún más tensión al momento.
en un segundo para otro, tomandome un poco por sorpresa por lo rápido que sucedio la jugada, de un centro hacia atras por parte de nahuel molina llego el gol del seleccionado argentino de la mano de nada más ni nada menos que matias, quien literalmente se puso rojo por gritar tanto el gol junto a sus compañeros de selección.
una vez todos lo soltaron se quedó unos segundos en el corner mirando directamente hacia donde yo me encontraba y señalandome, me dedicó un gol importantisimo en su carrera y yo no podía evitar que mis lagrimas salieran, la alegría desbordaba por todo mi cuerpo.
los minutos siguientes los pase obviamente nerviosa, conociendo el mundo del fútbol cualquier cosa podía suceder en tan solo dos minutos por lo que no quería festejar antes de tiempo, pero cuando el juez dio el pitido final el alivio me invadió y me abracé fuerte con victoria, quien también tenía lágrimas en sus ojos.
esperamos pacientemente a que le entregan las medallas tanto a los brasileros como al seleccionado argentino para poder bajar al campo de juego y estar con ellos.
apenas lo vi a matias a lo lejos me acerqué prácticamente corriendo para abrazarlo colgando mis piernas de su cintura.
— como te amo dios, sos increíble amor — susurré en su oido sin querer soltarlo, matias estaba de la misma forma que yo, la emoción del momento iba a durar varios días más
— soy campeon de america amor — dijo mi novio sin poder creer lo que acababa de suceder, lo que había logrado, encima con un gol suyo
sin dudas estaba pasando a la historia de la selección argentina.
— sos el mejor campeon — respondi tomando su rostro entre mis manos para besarlo
esto fue lo que siempre quise, acompañarnos en las malas y en las buenas, los dos unidos a toda costa.
