"Izuku Ghoul: La historia de un corrompido"

Capítulo 14: Negación

El peliverde ahora se encontraba sentado en una silla mientras que al frente de él estaba discutiendo las posibilidades que tenían de hacer algo por esos Ghouls. El muchacho solo miraba las fotografías de sus padres como si eso fuera lo único que tuviera, haciendo que temblara mucho y su mente fuera al pasado...a ese callejón en esa noche...

En su mente era claro lo que veía...su padre peleando contra agentes de la CCG mientras que su madre lo escondía en una caja...con una sonrisa temblorosa, recordaba sus palabras. "Todo estará bien...Izuku...", le dijo mientras que escuchaba la carne siendo despedazada y no debió ni siquiera alzar la cabeza, ya que vería como estos les estaban sacando el kakuhou allí mismo...

La escena de ver su mamá en el suelo, lentamente volteando la mirada hacia él, lo había marcado de por vida...una imagen que nunca se pudo borrar. Pasaron varios años hasta que pudiera seguir su vida normal, sin pensar en aquel trauma que se le había dejado, pero ahora...cuando se sentía más en paz...descubre esto...

"P-Pero antes...no existía esto...", se dijo el chico mientras que veía la fotografía de su madre, sin embargo, en su vida pasada no había visto nada de esto al no involucrarse en asuntos de Ghoul. En cierto modo, él había adelantado mucho las cosas, tanto que ahora hicieron avances en la investigación infiltrada de la CCG, por lo que esto se reveló...y cierto modo, eso no dolía...

- Lo que sí...era que en su vida pasó lo mismo...pero él no hizo nada...

- Todo por involucrarse en asuntos de los humanos...

"Izuku...Izuku, ¿Qué piensas?", preguntó Kiyoshi al muchacho que solo seguía viendo las imágenes en su manos, como si se tratara de un cascarón vacío. El peliblanco se sintió mal por esto, sabía que ha de ser un duro golpe, pero tenía que decirle la verdad, no podía ocultarle algo tan serio por mucho tiempo, además, si tenía las oportunidad, irían a liberar a todos...

"Izuku...", dijo Izamu, tomando del hombro al chico, quien alzó la mirada, saliendo del trance en el que estaba, solo para asentir con la cabeza, como si hubiera escuchado todo. Con una seña pidió un momento y salió de la oficina de reuniones para ir a encerrarse en un baño, apoyándose en un lavamanos empezó a respirar agitadamente, sentía que se ahogaba...

"T-Tú...lo sabías, ¿No es así?", preguntó el chico a la nada, viendo con unos ojos un poco llorosos a la nada, pero la risa de aquel fantasma afloró en el lugar. Atrás de él, pudo ver esa sonrisa socarrona en el rostro de la mujer, haciendo que este se altere de sobremanera...sintiendo un odio inconmensurable por la que alguna vez fue su esposa...

"¡¿PORQUÉ NO DIJISTE NADA?!", preguntó este con mucha ira, volteándose para verla, pero no había nadie allí, solo en el espejo podía verla...ella  seguía burlándose de él. El muchacho estaba harto de esta vida, solo quería acabar con todo y vivir en paz para siempre, pero siempre había un secreto que revelar, una misión que cumplir...alguien que debía morir...

- No querían dejarlo descansar...

"¿Porqué lo hubiera hecho?, ¿Para que te embarcaras en una misión suicida y perdiera a mi lindo Izuku?, Ja...hazme el favor...", dijo ella entre risas, viendo al joven que empezaba a perder la paciencia por esos tonos de burla, sin saberlo, lentamente sus ojos empezaban a cubrirse de la esclerótica negra con las venas rojas...estaba fuera de sí en este momento...

"De todos modos, te lo hubiera dicho no...¿Qué hubieras hecho?, si tú no harías nada por matar humanos...solo te matarían y al ver los rostro de tus padres te dirían "cobarde"", dijo Himiko solo para ver como el joven la atacaba, estirando uno de sus brazos hizo que salieran 4 grandes tentáculos que se formaron en uno grande, yendo a atravesar a la chica...