El Otro ||Yoonmin||

14💕

-dumplins

-Dopi

Dos voces lejanas sonaron al unísono, una risa feliz y escandalosa se oyó causando un calorcito ameno en el pecho del omega

- Hobi Hyung...

No podía ver nada, su vista era opacada por la luz del sol

-Mi bebé rosa

La voz de una mujer sonó calida para él, seguido llegó un dulce beso en su mejilla

- Mami-murmuró mientras se retorcía sobre las sábanas

En sus sueños el lugar que era luminoso se tornó oscuro, con un estruendo se hizo nuevamente la luz pero esa vez no era el sol

Habían llamas

Las tres siluetas borrosas se fueron consumiendo por las lenguas de fuego, entre susurros inentendibles

-¡No, no!

Jimin se incorporó a la vez que un relámpago iluminaba el cuarto

Abrazo la sábana y llevo su muñeca a la nariz, estaba vendada, tal a como lo había hecho durante toda la semana, YoonGi había cambiado las vendas y había revisado su herida despues de la cena, las vendas tenían el olor de un ungüento y el de YoonGi, pero no era suficiente para calmar la ansiedad y el pavor que los truenos y relámpagos causaban en su lobo

-un, dos, tres -contó al tanto se tapaba los oidos

Un sollozo salió de sus labios, un ardor en su pecho le infundia ganas de llorar y gritar, angustiado por el sentir que se apoderó de él durante sus sueños.

Se precipitó sobre la mesita de noche donde había una jarra con agua, no se molestó en servirse en un vaso solo la empinó para hidratar su garganta seca y dolorida por el nudo que tenia atascado

El pelo castaño se pegaba a su frente, agitado destapó el frasco con sus medicamentos y lo tomó con la esperanza que lo adormeciera y poder así escapar del terror que causaba el siniestro clima y su pesadilla.

En los últimos días las pesadillas eran constantes. Todas ellas lo ubicaban en medio de un incendio donde se veia sin ninguna escapatoria. Pero en esta ocasión esas voces y el miedo de oirlas desaparecer y abandonarlo lo hicieron caer en desesperación.

Atrajo una almohada que estaba envuelta en el abrigo de YoonGi, se lo quitó para ponérselo él, era una forma de sentirse abrazado, siguió contando para distraerse, angustiado descubrió que el olor del alfa ya estaba desaparecido de la prenda

Dio un chillido cuando las lámparas y luces se apagaron, afuera un fuerte trueno alumbró la noche causando un apagón.

-No, no

Clamó con desespero subiendo y bajando el interruptor, tra lanzarse fuera de la cama, intentaba volver a traer luz a la habitación con sombras que consideraba macabras, eran como espectros acechandolo.

Al ver que no había electricidad se apegó a la pared y se quedó quieto en medio de las penumbras

La suave iluminación que venía del pasillo lo llevó a fijarse en la puerta abierta.

Con fuerza limpió las lágrimas

No veía la inteligencia en quedarse ahí temblando como una rata que cayó víctima de una ratonera, no señor, la fea tormenta no podría vencerlo

Decidido volvio a la cama y rebuscó a ciegas la manta de tejido gris y se envolvió en ella, descalzo salió de la habitación con pasos precavidos para no tropezar con algo en la oscuridad.