★La luna necesita que el sol brille★ (Salvis)

No hay una salida de ti mismo.

Tercera persona:

Travis se levantó a las 6:00 por un ruido, era su teléfono que estaba sonando por una llamada de su padre. Travis agarro su teléfono y solo le escribió a su padre.

Chat de Travis y Kenneth:

Donde estas, Travis?
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En casa de un amigo.
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No me pediste permiso.
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Pero te avise hace rato.
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No me importa, Phelps.
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Vienes a casa ahora.
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Travis suspiro, se sentó en la cama y vio como el peliazul bostezó. Travis decidió no molestarlo y levantarse sigilosamente con cuidado. Pero no valió la pena ya que el peliazul agarró su prótesis y se la colocó en el rostro.

"Travis?"- murmuró el peliazul, aún soñoliento.
Travis miró al peliazul con sorpresa y simplemente se quedó un rato en silencio.

"Sal? Que haces despierto tan temprano, hoy es sábado, vuelve a dormir."- dijo el rubio con un tono bajo. El peliazul solo bostezó de nuevo y negó lentamente.

"Dónde vas tan temprano?"- pregunto mientras inclinaba la cabeza hacia la izquierda, dejando saber que estaba confundido.

"A mí casa, mí padre me dijo que vaya."- respondió el rubio mientras se ponía las zapatillas.
"Se supone que viniste aquí para divertirte y para quedarte hasta mañana. Al diablo tu padre, quédate por fa"- dijo el peliazul tratando de sonar convincente
El rubio solo suspiro y asintió, no podía decirle así a ese chico, no ahora.
"Por qué siempre le digo que si?" Pensó el rubio.

Horas después, ya eran las 7:58 y Travis se había quedado en el departamento del peliazul, junto a el peliazul, Ash y Tobb. Travis estaba sentado en el sofa con Sal y eso lo ponía un poco feliz y nervioso. Travis se sentía seguro con Sal, cosa que nunca sintió con otras personas.
Pero algo en Travis lo preocupaba, el no podía y no quería ser el mismo, tenía miedo. El simplemente quería salir de su realidad, de la realidad de su padre y ser el mismo. Pero algo se lo impedía. Travis agachó la cabeza con tristeza al saber que no podía amar al peliazul o ser el mismo con el, y eso lo noto el mismo peliazul.

"Travis"- hablo el peliazul con preocupación. El rubio levantó la mirada y se giró hacia el.
"Si, Sally face?"- respondió el rubio.
"Sabes que puedes hablar conmigo, no?"- murmuró el peliazul mientras agarraba lentamente la mano del rubio y le daba un ligero apretón. Travis se sorprendió y se quedó en silencio por un rato.
"Por qué dices eso?"- pregunto el rubio mientras bajaba la mirada hacia el suelo. El peliazul lo miro fijamente y suspiro.
"Tu expresión, Travis. Tu expresión me dice que estás preocupado o nervioso de algo, estás pensando en algo?"- contesto el peliazul.
Travis tenía tantas ganas de decirle que todo estaba bien, pero su voz se quebró por completo al ver la preocupación de aquel chico. Travis suspiro profundamente para calmarse y contarle todo, absolutamente TODO.

"Estoy preocupado, Sal, realmente quiero ser yo mismo, pero no puedo serlo. No por ahora... Tengo un sentimiento tan extraño cada vez que estoy contigo, me siento de alguna forma amado y seguro contigo. Pero tengo miedo de que veas mí lado vulnerable y que te burles. Tengo miedo de decepcionar a mí padre y ser un pecador. Soy una horrible persona que no merece nada, NADA."- hablo rápidamente el rubio una vez que se calmo. El peliazul abrió los ojos con sorpresa; había dicho tantas cosas tan rápido que se mareó.

"Wow, wow, wow, espera, espera. Tómalo con calma, si habla rápido no entenderé y no podré ayudarte... Solo cálmate."- murmuró el peliazul mientras ponía ambas manos en los hombros del tubio.
Travis solo se quedó en silencio y abrazo al peliazul. Tenía tantas ganas de llorar. Este chico si que era un desastre.

"Travis, no está mal ser tu mismo, no es un pecado ser tu mismo. Tu no eres una decepción, al contrario, eres algo muy valioso, pero no lo vez."- hablo el peliazul con tranquilidad y amabilidad, seguro de sus palabras. A Travis se le llenaron los ojos de lágrimas y abrazo con fuerza al peliazul mientras hundía su rostro en su hombro. Se sentía como un desastre. Y lo era.

"Soy un desastre traumado..."- Murmuró el rubio entre sollozos.
"No eres un desastre, bueno, traumado si estás, pero un desastre? No lo eres."- respondió el peliazul mientras le devolvía el abrazo al rubio. El rubio estaba luchando internamente para ser el mismo y para aceptarse, pero el no podía. Su autodesprecio era tan grande que no podía permitirse ser el mismo. Odiaba ese sentimiento, se odiaba a si mismo. Pero se sentía muy seguro con Sal, tanto que mostró su lado vulnerable y eso no le importo para nada. El sabía que no había salida de si mismo. Todas las cosas que su padre había prohibido y dicho, afecto a Travis un 70% y el lo sabía. Había tanta gente que a el lo molestaba y no quería ni ver, como su padre. Pero buscará una salida de si mismo, si es que la hay.

HOLAA, ESPERO QUE LES GUSTE EL CAPÍTULO!💙
Hare otro enseguida. Este es un capítulo corto, perdón por eso. Pero me esforzaré en hacerlos más largos!!💙💙