Solo Nosotros Podemos Ser Infinitos.

Capítulo 29.

Recibió una lechuza bastante regordeta y de una raza algo sencilla para su gusto, desconocía a quien le podría pertenecer tal mensajero, la despidió con un pequeño premio de carne seca, al comprobar que el destinatario era el, decidió abrirla, para su disgusto se encontraba escrita en un papel muy sencillo y sospechaba muggle, sintiendo un desagrado por la persona que se tomaba la libertad de escribirle en esas condiciones, comenzó a leerla, grande fue la sorpresa que se llevó del remitente.

Prefecto Lucius Malfoy:

Mis cordiales saludos Lucius, me tome el atrevimiento de escribirte sin previa autorización por dos motivos, el primero y más importante, es para agradecerte nuevamente por la ayuda que me has brindado este año en Hogwarts y en el andén 9 3/4 junto con tu padre, agradecería le hicieras presente mi gratitud, el segundo es por sugerencia de Antonin, me comentó que se encontraron hace poco y preguntaste por mí, nuevamente agradezco tu preocupación, una disculpa nuevamente por el repentino mensaje, Antonin me proporcionó tu dirección, espero no te moleste y anexo una dirección a la cual puedes responder si gustas hacerlo. Disfruta tus vacaciones, nos vemos el primero de septiembre, mis cordiales saludos.

Severus Snape.

Con la carta en la mano se aproximó al despacho de su padre, donde este se encontraba, pensando él lo que había platicado con él cuando llegaron de la estación, si Severus era el heredero Prince podría ser de gran ayuda tenerlo como un aliado, llamo a la puerta con 3 ligeros golpes y después ingreso, frente la la puerta se encontraba un escritorio con algunos paparles desorganizados, una silla con forro de piel pigmentada en color violeta oscuro, asemejándose a un trono, las paredes estaban decoradas con estanterías de diferentes tamaños, en la esquina izquierda se hallaba un mini bar con copas y vasos de vidrio.

- Perdona que te moleste padre, pero Severus se acaba de comunicar conmigo tal y como lo dijiste.- Informó mientras se acariciaba con la carta en mano y se la entregaba al mayor.

- Perfecto, hace unos días me puse con contacto con los Prince.- Hablo mientras abría la carta.- Fue difícil debido a su confinamiento voluntario, parecen estar interesados en el muchacho.

- Son excelentes noticias, con esto no solo nos ayudamos nosotros.- Lucius sonreía con suficiencia, ayudar a Severus estaba siendo muy provechoso.- No me agrada que viva en condiciones tan asquerosas y mundanas, me da asco.

-Entiendo tu asco, yo mismo no entiendo como la misma Eileen Prince vive de esa manera, los Prince son una familia importante francesa, forman parte de una rama externa de la realeza, una ya olvidada.- Guardo la carta en el mismo sobre y posteriormente en un cajón, después de reescribir la dirección en un trozo de pergamino suelto.- Redacta la respuesta, si el muchacho acepta conocer a los Prince y el encuentro resulta exitoso, grandes cosas nos esperan Lucius, recuerda que debes asegurarte de que acepte la idea y esté dispuesto a todo Lucius, no podemos darles falsas esperanzas a los Prince.- Dijo mientras le entregaba el pergamino y retomaba el papel olvidado.

- Claro padre, te aseguro que ese encuentro se llevará en las vacaciones de navidad, con permiso.- Salió directamente a la biblioteca para buscar un libro sobre psicología, este encuentro no solo le convenía a el, también a Severus que sería el más beneficiado, pero tiene que ser prudente en sus palabras y acciones para ganarse su confianza y amistad.

Lord Malfoy estaba analizando la situación, le desagradó que su hijo tuviera una extraña relación con un mestizo pobre, pensó que era simple caridad por eso no se opuso, pero cuando encontró que la madre del infante era la misma Eileen Prince, desagradecida desde hace 12 años, buscada durante al menos 2 años después del abandono de su casa, no pudo evitar su sorpresa, más al notar la situación en la que vivía, nada quedaba de la costosa niña que conoció en Hogwarts,  salvo la belleza que siempre la caracterizó, que viendo al infante se notaba la herencia, ahora vestía casi como un elfo doméstico, solicitó hablar con ella más que nada por pura curiosidad e íntegra.

Después de la desastrosa plática que tuvieron, le contó a su hijo quien era ella y lo importante que era para su familia, fue ahí donde se les ocurrió una idea para aprovechar tal maravillosa curiosidad que la magia le había otorgado a su hijo, los dos estaban de acuerdo que la vida que llevaban era lamentable, Lucius le contó algunas observaciones que había tenido en todo el año escolar pasado. Durante unos días pensaron la manera más eficaz para reunir a la familia Prince y salir bien parados sin ser tan obvios.

El primer paso y más importante era hacer que el muchacho se interesara en su familia materna, de eso se encargaría Lucius, pero necesitaban avanzar rápido y discretos, fue cuando acudieron de visita con los Dolohov y Severus Snape fue parte de la conversación mientras el heredero estaba presente.

Los Prince ya eran una pareja mayor de sumo respeto, lo más complicado no fue ponerse en contacto con ellos, no, lo más complicado fue mantenerlo hasta el día de hoy, ya que ellos estaban aferrados a negar la noticia, lo hizo sentir indignado que pensaran que un Malfoy podía ser un simple interesado mentiroso, los Malfoy nunca mienten con algo tan delicado, después de un intercambio de cartas, habían acordado una reunión para hablar acerca de la información que les estaba proporcionado in "preocupado" Abraxas Malfoy, que a palabras de él, también es padre de familia y no se podría perdonar nunca perder a su primogénito y que él sin duda confiaría o tendría esperanza de que alguien le trajera noticias verídicas, tal y como lo estaba haciendo el.

Bueno, tal parece que todo estaba fluyendo una manera favorable hacia ellos y esperaba que continuara así, degusto de sus bebida y sonrió mientras esté le quemaba la garganta.