Capítulo 13.

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Estaba despidiendo a los Gryffindor, en la entrada del colegio, antes de llegar a Hogwarts su mamá le dijo que se quedara cuánto tiempo pudiera en el castillo para evitar a Tobías.

-¿Seguro que te quedas Sev?- Su amiga había estado muy insistente para que la acompañará, pero el no quería estar cerca de Petunia y tampoco causar molestias a los papás de la pelirroja- Todavía podemos hablar con la profesora Mcgonagall, y...

-Lili, tranquila, gracias pero no es necesario.- Habló lo más serio que pudo para que ella no se preocupara de mas- Estaré con Antonin, también se queda para las vacaciones, no estoy solo.

A Sirius no le daba confianza Dolohov, se junta con las bestias que molestaban a Severus, ¿Cómo confiar en alguien que se junta con el enemigo?, las groserías habían parado desde hace ya un tiempo, estaba feliz por el, pero... Pasaba más tiempo con el que con ellos, sabía que era por la casa, pero incluso en los ratos libres lo llevaba a su árbol, el que solo habían pisado ellos.

-¿Por qué vas a pasar las vacaciones aquí?- El simple hecho de hablar sobre el lo molestaba mucho, pero decidió cambiar de tema no quería volver a pelear con el.

- Mis papás van a salir para cuidar un familiar enfermo.- Hace una semana que había planeado su mentira, la convivencia le había enseñado que no eran despistados cómo aparentaban.- Van a estar muy ocupados y no van a poder atenderme.

Lili tenía la mirada baja y se acercó a abrazar a su amigo, estubieron abrazados un rato... Hasta que los otros pensaron que era buena idea un abrazo grupal, solo lo soporto 3 cortos segundos antes de gritar.

- ¡SE ALEJAN!- Mientras abría los brazos para hacer espacio.- Eso fue demaciado cursi, no se van a ir para siempre, comportense.

- ¡Claro!, A Lili no le dices nada y a nosotros si.- Para estos momentos, ellos ya estaban acostumbrados a la actitud del pelinegro.- Amigos hay un favorito con nosotros.

-Si, Remis tiene razón, comprendemos eso de "La confianza de años" pero nos sentimos abandonados.- Ahí estaba James haciendo drama de nuevo, cuando se dieron cuenta de ese trato tan diferente se molestaron, pero Remus, siendo el más sensato los convenció de preguntar antes de que hicieran algo que no.

- Está bien...- Decidió ceder para que por fin cerrarán el picó.- Yo los voy a extrañar.

-Ay, ya podemos morir en paz, Severus dijo que nos iba a extrañar, Peter abrázame que lloró.- Sirius estaba realmente feliz, Severus había mostrado ser un buen amigo y sentía que ya lo quería.

- Bien, hora caminen que los deja el tren. Cuando les dió un último adiós a todos y prometió escribir una carta como mínimo cada tres días, empezaron el camino a la estación. El entró y dió caminó a las mazmorras, cuando escucho que Antonin gritaba desde lejos, empezó a ir más lento.

-Gracias por espérame.- Dijo sarcástico mientras recuperaba el aire de la carrera.

-Camine más lento, ya es algo viniendo de mi.- Para su sorpresa, la amistad con Antonin estaba yendo demaciado bien, ya no estaba solo en las clases que no tenía con Gryffindor, durante el almuerzo estaba acompañando y antes de dormir tenía una agradable charla, algo todavía más impactante, estaba empezando a relacionarse más con los de su casa, gracias a Antonin y Lucius.

-¿Qué planeas hacer estás semana, aparte de estudiar?- El tono sarcástico lo ánimo a fastidiar un poco

-Si, bueno, es que tengo que regresar a Slytherin los puntos perdidos por OTROS.- Se encargó se resaltar la palabra otros para que se entendiera su punto.

-¡Estamos en Hogwarts, el lugar más mágico en todo el mundo!- dijo con un tono místico de sorpresa, para pasar a uno plano y aburrido.-Y lo que quieres hacer es estudiar

-¿Qué sugieres?- Ignoraba muchas cosas por su origen mestizo, no estaría mal aprender un poco de sus raíces.

-Hacer una explicación por su puesto.- Lo dijo como si fuera la idea más brillante y obvia.- Apuesto a qué no conoces la sala de menesteres o conoces todos los pasillos o... O... O... Conoces a todos los cuadros, o...

-Ya entendí.- Le corto de golpe.- No los conozco, está bien, exploremos, pero si me aburro o no tienes nada interesante que mostrar me largó.

-Perfecto.- Sonrió de oreja a oreja, era una sonrisa tan sincera que casi hace sonreír a Severus por inercia, tomando su mano dijo.- Vamos de una vez, todavía quedan 3 horas para la comida.

Así el joven Antonin Dolohov empezó a correr por todo el castillo hasta que llegó a el recuadro de un veterano de guerra en la época de Grindelwald, ya había platicado con el y tenía un don para hacerte escuchar esos relatos que eran tan importantes para el futuro de la comunidad mágica. No dudaba que alguien tan culto eh inteligente como Severus, supiera aprovechar y valorar lo que alguien como Sr. Jefferson tenía para contar atreves de sus experiencias.

-Buenas tardes Sr. Jefferson, el es el amigo del que le hablé.- Dijo mientras lo señalaba con la cabeza y hacia una leve inclinación. Solamente pudo imitar las acciones de Antonin y medio sonreír incómodo.- Le presentó a Severus Snape.

-Es un placer conocerle joven Snape, el joven Dolohov me ha hablado sobre su interés a conocer sobre historia de la magia.- Su hablar delataba la época en la que vivió y su edad.- Estube presente durante la caída del mago tenebroso Gellert Grindelwald, a demás de dedicar mi vida al estudio de la historia, puedo ayudar el agua tema que se le dificulte, no serían los primeros, parece que ese fantasma es un incompetente tanto en vida como en muerte.- Tenía mucha razón, el Sr. Binns tenía un don para hacer dormir a todos.

Agradecieron la oferta y se quedaron charlando con el retrato, era increíble su manera de explicar y contar las cosas, lejos de parecer un libro aburrido, lo hacia ver como una historia ficticia.

Solo Nosotros Podemos Ser Infinitos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora