Maldiciones, Bromas y Bebés, ¡Dios mío!-Traducción

CAPÍTULO 14

Muchas Gracias a todas las personas que leyeron este libro conmigo 💖💖Aprecio con todo mi corazón el apoyo de ustedes y espero que les haya gustado tanto cómo a mí 🫂🥹💖

Si alguien tiene algun fic que quieran que traduzca, déjenme en los comentarios el nombre y haré lo posible para conseguir los permisos correspondientes y traducir.

Muchas gracias y nos vemos en otra traducción!!!💖

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Hermione se enderezó el peto y la malla antes de sentarse en el borde de la cama para atarse las botas. 
 
"¿Realmente no vas a disfrazarte?" preguntó, mirando a Malfoy mientras se ataba la pajarita en el espejo que llegaba hasta el suelo.
 
"¿Qué?" Se giró para mirarla antes de mirar su traje. "Estoy disfrazado". Se bajó los puños de las mangas para que apenas fueran visibles debajo de la chaqueta del esmoquin.
 
"Soy James Bond”, dijo con un ardor parecido al de Bond, haciéndola reír y poner los ojos en blanco.
 
El esmoquin fue un buen toque; normalmente, era un traje. Un bonito traje, ella se lo daría, pero cada año su “disfraz” consistía en lo que pudiera ser y aun así usar su ropa normal.
 
Sin embargo, rara vez lo veía con esmoquin, y mentiría si dijera que la vista no le hizo querer quitarse el disfraz de Juana de Arco a pesar de que le llevó unos buenos cinco minutos ponerse toda esa armadura.
 
Al mirar el reloj en la mesa de noche, se dio cuenta de que tal vez tuvieran suficiente tiempo antes de que aparecieran todos los demás.

Ella se levantó y se reunió con él junto al espejo, le aflojó la pajarita y observó cómo su rostro pasaba de la confusión al reconocimiento.

Antes de que la sonrisa se formara por completo en sus labios, ella ya lo estaba besando, desabotonando su chaqueta en el proceso.
 
"No es que me esté quejando", dijo, rompiendo el beso para desabrocharle la camisa y pasarle las manos por las costillas, "pero en algún momento te quedarás sin ideas para que todos tengan el mismo disfraz".

Estaba intentando desabrocharle las hombreras con cierta dificultad cuando dijo: “Oh, lo dudo. David Cameron, Clark Kent, Sherlock Holmes... No me faltan trajes”.

Una vez que trasladaron su televisor a una de las salas de estar, tanto Draco como su madre se obsesionaron con la cultura muggle y, sinceramente, no había nada más divertido y entrañable.

A Hermione le gustaba imaginar que Lucius se revolcaba en su tumba cada vez que veían televisión. 

Después de otro segundo de jugar con las correas, maldijo en voz baja y sacó su varita de su bolsillo para quitárselas por completo. 
 
"O el tipo Monopoly", dijo, alzando una ceja mientras le desabotonaba la camisa. “No estoy seguro de poder resistirme a ti con un esmoquin y un monóculo. O…”
 
“Si dices Jack Dawson, me volveré a poner la ropa”.
 
Como ella no dijo nada, él dejó de besarle el cuello y se echó hacia atrás para mirarla. "Sabía que eso era lo que estabas pensando", dijo, sacudiendo la cabeza y con una leve sonrisa en los labios.
 
"Puedes dibujarme como una de tus chicas francesas después". Ella levantó las cejas sugestivamente mientras pasaba la mano por la parte delantera de sus pantalones.
 
Presionó sus caderas contra su mano mientras ella se inclinaba lo suficiente como para morderle suavemente la garganta. "Probablemente podrías convencerme".
 
Acababa de alcanzar los botones de sus pantalones cuando unos pasos corriendo por el pasillo los hicieron detenerse segundos antes de que la puerta de su habitación se abriera y Cordelia entrara corriendo, su larga trenza volando detrás de ella mientras corría.
 
"¡Mamá, Pippy dijo que es hora!" las palabras salían en un borrón de emoción.
 
Draco y Hermione se habían separado un pie en el momento en que la puerta se abrió, y Hermione tuvo una fracción de segundo para agradecer a los dioses que no habían estado desnudos todavía y luego maldecirlos por no haber pensado en cerrar la maldita puerta.