Los pulentos x T/N

Cupido está de vuelta

Se acercaba San Valentín y nadie parecía darse cuenta, obvio estando de vacaciones apenas sabemos que mes es, pero no podía dejar que ese día pasara desapercibido para el Ramón y la Nea, estaba pensando a full en el festival pensar en alguna otra cosa me distraería a mi y a ellos también.

-Tienes que invitarla a salir-

-Si no lo haces serías más idiota que yo- me apoyó el Walala

-¿Y si me dice que no?- Cuestionó el Ramón

-Que pregunta más ridícula, hazme caso te dirá que si

Entramos al ensayo aparentando normalidad y eso hicimos hasta que terminó. Benzo y Barry hablaban de sobre si la pizza con piña era una abominación o una delicia y en eso el Ramón nos miró a mi y al Walala y supimos que lo iba a hacer. Yo y el Walala estábamos expectantes a lo que le iba a decir.

-Oye Nea ¿Te tinca si mañana vamos a ver un película? 

-Si claro. Nos juntamos aquí a las 12.

Okey eso fue un poco más corto y menos emocionante de lo que esperaba hasta que la Nea paró en seco y se dio cuenta de la situación y se puso roja como tomate. Me agarró del brazo y me llevó a hablar a la cocina.

-¿Acaso el Ramón acaba de invitarme a salir? 

-Creo que si, si lo hizo.

Podía notar como mi amiga estaba tan feliz que verla así me contagiaba su alegría.

Nuestros chillidos de alegría hicieron que el Barry gritara "cállense" desde el otro lado de la puerta.

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Hoy era 14 de febrero y era perfecto ya que no había ensayo y podía tener la libertad de hacer lo que se me antojara y justo hoy se me antoja ir a espiar la cita de mis amigos, así que fui a levantar al Walala para que me acompañara.

-¿Me puedes recordar porque hacemos esto? 

- Primero porque soy fan de este ship, segundo por si algo empieza a salir mal podamos interferir de alguna manera y que no salga mal y tercero quiero fotos para mostrarle a sus futuros hijos. Por eso traje al perro con lentes y al ratón porque ellos pueden interceder por nosotros y que se vea "natural"

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Los seguimos durante todo el camino y ellos parecían hablar y reírse de lo más normal ignorando completamente el ambiente romántico que estaba en todas partes y que todas la personas parecían estar tan envueltas en el.

La película transcurrió con normalidad casi demasiada diría yo. Entonces envié al perro a que pusiera el brazo del Ramón por detrás de los hombros de la Nea, Ramón no se daría cuenta porque ya se estaba quedando dormido. 

Cuando el Ramón se empezó a despertar y se dio cuenta fue un momento muy tierno ya que la acercó un poco más hacia el y no pude evitar tomar una foto esta vez no cometí el error de dejar la cámara con el flash así que pasó desapercibida.

Luego de la película los seguimos mientras ellos tomaban un helado y paseaban. Era como ver un película romántica, no esas que son lentas y profundas sino esas que son chistosas y que en verdad llegas hasta el final sin quedarte dormido pero dándote cuenta que los personajes en verdad se aman.

Estábamos camino de vuelta siguiéndolos desde una distancia relativamente corta como para escuchar pero lo suficiente para que no nos notaran.

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