Viviendo Juntos -stobotnik-

San Valentín 1❤️

El moreno se propuso a sí mismo a ayudar al doctor a empacar los badnik's en el baúl del gran auto color negro, pero antes de irse ambos, robotnik, el dueño del gran lugar, cerró el laboratorio dejando todo el lugar a oscuras sin nada más que máquinas apagadas aseguradas en su estante perteneciente y uno que otro plano sin terminar que no eran de importancia.

Cuando se montó al coche donde lo esperaba su agente, este como siempre pudo notarlo aún más enojado de lo normal mirándolo por unos segundos antes de volver su vista al frente, obviamente robotnik no quería dejar su laboratorio pero de igual forma no podría hacer nada al ser órdenes de parte del comandante quien se encargaba de su financiación para sus preciados invento, no porque temiera de él ,eso nunca.

-¿listo doctor?- preguntó dando un muy mal intento de aligerar el ambiente que se acababa de formar, mientras tanto solo recibió un gruñido como respuesta de parte del contrario, el agente sabía de antemano que durante todo el viaje su jefe estaría enojado, por lo que soltó un suspiro cansado y puso en marcha el auto...
talvez en casa podría preparar un café con una pizca de canela, entregarselo y así talvez su enojo se disuelva, al menos un poco.

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Al doctor robotnik le molestaba dejar su laboratorio atrás para tomarse un "descanso", eso es lo más estúpido del mundo, él NUNCA tomaba descansos, excepto para dormir por qué puede que sea un lunático y amante por el trabajo, sus máquinas, entre otras cosas, pero logra entender perfectamente que si su cuerpo no descansa el suficiente tiempo requerido puede llegar a obtener graves consecuencias y eso no le permitiría hacer su trabajo y tendría que ser cuidadoso por su agente que se preocupa, demasiado para su gusto.

Ahora que le da vueltas al asunto a notado que desde hace unos meses...
o más exactamente años, aquel lacayo no lo irrita como las demás personas que llegan hasta tal punto en que le ocasionan no querer ver ni una mosca pasar frente a él y solo quedarse en su laboratorio a hacer trabajo de verdad.

Debe de admitir que a llegado a tal punto que no le desagrada verlo llegar al laboratorio con esa maldita sonrisa brillante de oreja a oreja alrededor de aquella barba, áspera y recortada a la perfección.

Con tan solo verlo a ocasionado que en muchos momentos su corazón comenzará a palpitar de una manera impresionante, él nunca entendió bien el tema relacionado a los sentimientos y las emociones, nunca fue su fuerte como la ciencia o los inventos...

Pero el simple hecho de saber que ver a su agente muchas de las veces aceleraba el ritmo en el que palpitaba su corazón simplemente le dio aún más razones para esconder sus emociones y no tomarse el tiempo suficiente de descubrirlas, pero bueno, debería dejar de pensar en eso después de todo ya llegaron a "hogar dulce hogar"una frase un poco idiota en su opinión.

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Aban estacionó el auto cerca del garaje ya que tomaron la decisión de dejar los badnik's o sus "bebés" como los nombró el médico, en ese lugar espaciado en vez de un lugar sin mucho espacio como sería dentro de la casa.

Terminando de bajar el último de los badnik's, los cuáles solo eran dos por lo que no fue problema para el agente, tomándose un momento para observar su alrededor, el doctor ¿No estaba?, raro...
capaz y se fue al interior de la casa.

El menor se dirigió a la puerta de la entrada principal, luego de revisar que el garaje estuviera bien cerrado para evitar las miradas de sus vecinos curiosos o la entrada de animales.

Al entrar esperó encontrar a robotnik pero fue lo contrario, no se encontró con el doctor, la casa estaba tranquila...

Teniendo en cuenta y sabiendo perfectamente que ahora vive con un hombre muy imperactivo, amante de trabajar con maquinas ruidosas, o simplemente escuchar música a todo volúmen esto era preocupante, por lo que decidió subir arriba por si de casualidad estuviera en su propia habitación o en el baño, solo para sacarse la duda.