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La pareja protagonista están en Mondstand, pues Xingqiu fue a hablar con su amigo Albeldo, por lo que el joven Cryo va a visitar a Diona a la taberna cola de gato.

— Que lindo son los gatitos — dice el albino, jugando con los animales.

— Son lindos pero son peligrosos, como príncipe — el mayor voltea con el gato mencionado, quien estaba limpiando sus patitas — Se cree muy bueno con las cartas, no entiendo como un gato puede jugar a las cartas para empezar — se cruza de brazos.

— Diona . . . ¿Tu que eres?

— Una bar-tender — el otro pensó que no tendrá una respuesta a menos que lo diga de manera directa.

— Hablo por tus orejas y cola.

— ¿Me andas viendo la cola? — dice enojada, el otro se defiende inmediato.

— No, no, osea, hablo de tu especie, por favor no te enojes.

— Soy una felineza, humanos con características diferentes a la de las personas — dice estirando su mano y mostrando sus almohadillas, el otro esta fascinado y toma las manos de la minina Cryo.

— Esta muy lindo — mira a la menor, quien le ve muy feo, así que la suelta — perdón.

— Esta bien, solo no estoy acostumbrada a comentarios de ese estilo — dice sirviéndole una copa a su compañero — ahora prueba esto y dime si no te mueres.

— Oky — toma la bebida de una y la saborea un poco.

— ¿Entonces?

— Esta picosito, pero mas como, picosito de ese que te gusta — sus ojos se ponen como estrellas — también sabe muy bien con todo lo demás — un rubor adorna su cara recibiendo otra copa — uff lo acuso del Slime le da otro nivel de sabor.

— Bueno, parece que la bendición sigue ahí — pensaba viendo a su compañero.

— ¿Has pensado en dejarlo fermentar?

— Uy no, parece vino de Mondstand, entre mas viejo mas bueno — el otro rie por lo dicho — ya parece tu relación con el chico de los garabatos ilegibles.

— No te entiendo.

— Digo, me parece muy curioso que ya llevan 3 años y yo no los veo con ganas de casarse.

— Eh, no gracias, tengo mucho que hacer antes de casarnos.

— ¿Ah si? ¿Que cosas? — le ofrece otra copa a su compañero.

— Controlar mi Yin por ejemplo, o mínimo recordar que hago en la mayoría de los casos.

— ¿Que no se supone que ya haces eso? — el otro se toma el trago.

— Bueno si, también aprenderme de memoria los talismanes.

— ¿Cuantos llevas y cuantos son?

— 125 y son 130.

— Pues estas muy cerca — el otro comienza a sentirse atrapado.

— Conseguir mi título de Exorcista fuera de Liyue.

— ¿No se supone que estás aquí por lo mismo?

— Si pero en mas lugares.

— ¿No habías ido a Sumeru recién?

— Cambien este . . . Amm — la Bar-tender sonríe satisfecha.

— Lo que tú tienes es miedo.

— ¿Miedo a que? — dice tomando otra copa empezando a embriagarse — ya he tenido sexo y no he muerto, tuve un aborto, arriesgue mi relación con mi padre por estar con ese hombre ¿A que le tengo miedo según tu?

¡Cuidado! (Xingqiu x Chongyun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora