capitulo 31

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Me demoré bastante que papá soltara a Iguro, y mi novio tuvo demasiada paciencia ante los golpes, solo los trató de esquivar

-mi niña -me tenía abrazada, lloramos cerca de 5 minutos, Iguro ya había salido de la habitación- pensé que no te volvería a ver -me besó la frente por décima vez-

-yo también papá -lo miré- las chicas te tienen que revisar, para que…

-no, ni que revisar ni otra cosa, vámonos, debemos reconstruir nuestra casa

-ah -me puse demasiado nerviosa- hablando de eso…

-¿qué pasó?

-ya todos se enteraron de nuestro secreto -mi padre se puso serio- acabo de tener una reunión con el viejo techinn, me echaron de la villa, ya no puedo volver ahí cuando la reconstruyan

-¿Te dijo algo más? -me dijo demasiado calmado, pero yo ya conocía esa mirada-

-nada, Iguro no dejó que me insultara de ninguna forma

-¿y kagaya?

-pues…

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-te deberia pegar ahora -le dijo mi padre al señor Kagaya, cuando le conté que él dejó que me “castigaran” se levantó de un salto de la cama y se vistió, no hubo nadie que lo detuviera para venir a buscarlo- ¿como que castigo? ¿Como mierda es eso que la castigaste a mi niña?

-solo fue para dejar a Techinn tranquilo -dijo el señor kagaya con la misma serenidad de siempre- me alegro verte mejor

-¿mejor? -levantó una ceja- me duermo por un par de días y ya todo es un desmadre, la villa no existe, castigan a mi niña y encuentro a un muchacho manoseandola al frente de mi

-¡oh por dios! -solté molesta, en todo este momento me había quedado un paso atrás de papá muy avergonzada- no me estaba manoseando, fue solo un beso

-yo soy hombre t/n, sé lo que un beso significa -me apuntó con el dedo- y ese beso era de todo menos inocente

-eres… -lo empujé con un dedo, casi se cae- estas débil y lo único que haces apenas despiertas es enojarte conmigo

-¿cómo crees que estoy enojada contigo? -frunció el ceño- todo lo que pasó no es culpa tuya amor, de todo el mundo sí, pero nunca tuya

-eres increíble -rodé los ojos, miré a nuestro nuevo jefe- lo siento por todo

-no te preocupes -el Señor Kagaya sonrió- conozco a este cascarrabias de hace tanto tiempo que no me sorprende nada, ahora deben descansar, cuando están bien recuperados pueden empezar a trabajar en la academia

yo asentí con la cabeza, mi padre frunció el ceño

-ni que descanso ni que nada, yo estoy en perfectas condiciones para empezar el trabajo de inmediato, pero desde mi casa, no quiero ir a la academia todos los días, si no te sirve no hay trato.

-todo lo que tu quieras haganezuka -le dijo nuestro jefe y me miró- es mejor no discutir con él -asentí con la cabeza-

-si, si -dijo papá moviendo su mano en mi dirección- ahora déjanos solos amor, tengo que hablar aquí con don zen

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-¿Cómo está tu padre? -me dijo Iguro acercándose por el pasillo, detrás de él venían todos sus amigos

suspiré- parece que revivió con el doble de energía… y el triple de cascarrabias

-lo que te espera -le dijo Uzui a Iguro empujándolo por el hombro- te espera un arduo trabajo para ganarte a tu suegro

-yo no me tengo que ganar a nadie más que a t/n -dijo Iguro- y eso ya está listo

rodé los ojos

-me alegro mucho que tu padre esté mejor t/n -dijo Rengoku- lo vimos demasiado débil en un momento

-si le hubiera pasado algo, te juro que me muero -lo miré con una sonrisa- pero a ese viejo le queda mucha vida por delante y mucho tiempo para fastidiarte -le dije a Iguro- por es que lo más le gusta hacer

iguro hizo una mueca

-¿Cuándo entras a trabajar formalmente a la academia? -preguntó Kanae

-no lo sé, mi padre dijo que podíamos empezar de inmediato, pero desde nuestra casa

-pero… ¿qué casa? -dijo sanemi que se ganó un golpe en el brazo de su novia- ¿que? si no pueden volver a la villa y la casa en la que vivian está en el suelo

-tan sutil con las pérdidas Sanemi -le dijo Shinobu

-no se preocupen de eso -dijo Iguro pasando una mano por mi hombro- se pueden quedar en mi apartamento todo el tiempo que quieran -me miró- tú y tu padre

-te encantaría eso ¿no? -dijo papá acercándose a nosotros- sería como dejar al gato cuidando la carne -lo miró con una ceja alzada- y saca tus manos de mi hija

Iguro dejó su mano por unos segundos más antes de sacarla lentamente, yo suspiré y me giré al sentir algunos pasos, todos los demás pilares se habían ido

cobardes

-no seas pesado -miré a mi padre- primero que todo, Iguro está siendo amable al ofrecernos alojamiento, por lo menos le puedes decir gracias

-eso no va a ocurrir -dijo papá

-tampoco me lo esperaba -dijo Iguro

los dos se quedaron mirando en silencio

-por dios -pasé mis manos por mi rostro- Iguro, no le hables así a mi padre, y papá, respeta a Iguro es… mi novio

pude ver una pequeña sonrisa en los labios de iguro mientras una vena en la frente de papá amenazaba con estallar

-novio… -dijo papá- por dios hija, soy yo el que perdió un ojo

-¡papá! -le grité

-no te preocupes -me dijo Iguro- entonces… señor -hizo énfasis en la palabra señor- ¿va a aceptar quedarse en mi casa mientras encuentran…?

-yo ya tengo una casa niño -mi padre lo interrumpió y luego me miró- y nos vamos ahora, la tenemos que arreglar para empezar a trabajar mañana

-¿que casa? -dije con el ceño fruncido

-le acabo de comprar una de sus casas a Kagaya, la que queda más lejos de la ciudad, así que nos vamos, y mi niña -acomodó un cabello fuera de lugar- no te entregues así como así por un par de ojos lindos, por lo menos que primero te traiga flores o chocolates y te lleve a cenar a restaurantes caros, y después se entregan las cositas…

apreté la mandíbula y me puse roja mientras papá aguantaba la risa

iguro aclaró la garganta

-¿y tiene como irse a su nueva casa? -a mi padre se le borró la sonrisa- si me dice por favor lo puedo llevar yo

-ni muerto te diria por favor -le respondió mi padre

-Entonces tendrá que irse caminando -Iguro alzó una ceja- pero a mi novia la puedo llevar de nuevo a los restaurantes caros que la he llevado todo este tiempo y después me da otra vez… -me miró una sonrisa perversa le cruzó los labios- ya tenemos la autorización de tu padre.

-¡Iguro! -grité

-¿Y tú sabes que con un cuchillo bien caliente te puedo castrar?

-¡papá!

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la hija del herrero -Iguro X T/NDonde viven las historias. Descúbrelo ahora