Yoongi estaba confundido, ¿adonde se lo llevaba su hyung? En la mañana había dicho que irían de compras, ¿de compras a donde y que cosas? Que el sepa las cosas de la casa se encarbaba una señora, ella le hacía las compras cada mes, ¿será que habrá renunciado? Uhmmm, no lo creía, tenía una excelente paga por trabajar unos días al mes.
Dinero, ahora que lo pensaba él no tenía dinero, bueno no mucho, solo unos cuantos wones que tenia ahorrado, que pasaría si Jimin se cansa de él y decide botarlo, ¿a donde iría? Con el dinero que tenía ahorrado no le alcanzaría para nada, quizás deba conseguir un trabajo.
— Señor Jimin, ¿a dónde vamos?
— de compras, ya te lo había dicho, ¿no?
— pero, aún no termina el mes, aun hay cosas en la casa.
— pero las cosas que vamos a comprar no son para la casa Yoongi.
De pronto el auto se detuvo frente a una tienda, Yoongi no pudo evitar poner una cara de sorpresa, ¿en serio entraría ahí? Al parecer si, ya que prácticamente estaba siendo guiado por Jimin hasta estar dentro de la tienda.
Christian Dior, técnicamente artículo de esa tienda costaría más que su corta vida. Es una exageración, pero de verdad hasta el objeto más pequeño valía muchos dólares.
— joven Park, que gusto tener su visita, ¿desea algo en especial?¿abrigos de invierno?¿zapatos?
— quiero toda su colección de verano
— ¿qué? — dijo sorprendido — pero joven Park, no creo que en esta época del año‐
— la tiene si o no, si su respuesta es negativa entonces no me haga perder el tiempo.
— claro que no joven, por supuesto que tenemos ropa de verano — hizo una seña a una empleada y ella rápidamente fue hasta los almacenes para traer toda la ropa.
Luego de unos minutos, frente a Jimin había una enorme colección que giraba entre playeras, shorts, sandalias, sombreros, lentes y muchas cosas veraniegas más.
— ten, pruebate esto — le entregó una bermuda y una camisa floreada junto a unos delicados zapatos que combinaban con la playera
Yoongi confundido acató la orden, fue hasta uno de los vestidores a cambiarse.
Mientras tanto Jimin veía los lentes de sol y algunos sombreros, tenía que elegir muy bien cuales llevar. Él no era de las personas que compraba por comprar, siempre elegía minuciosamente cuales llevar y más si se trataba de ropa.
— Señor Jimin, ¿me veo bien?
Jimin volteó y trato de disimular lo lindo que se veía Yoongi con aquellas prendas, esa camisa floreada le resaltaba muy bien y esas bermudas hacían que sus piernas reluzcan de maravilla.
— ¿te gusta? — desvío su mirada a los lentes
— si señor, me gusta los colores — giró en su propio eje
— entonces lo llevamos, ahora ven aquí, pruebate estos lentes
Le puso uno a uno los lentes y sombreros, ninguno le concencia, no porque le quedarán mal, sino porque cubrían esos lindos ojos marrones que tenía.
— ¿señor? — preguntó al ver a Jimin como hipnotizado
— ah, ehmmm... empaca todo y llévalos a mi auto — le dijo a uno de los encargados de la tienda — vamonos Yoongi
Yoongi fue a cambiarse antes de ir junto a su hyung, estaba confundido, ¿por qué había comprado todo eso? Estaban en invierno, si se ponía eso, se moriría de frío.
Subió al auto y decidió quedarse callado, quizás llegando a la casa le preguntaría porque compró todo eso.
Mientras veía por la ventana, se le ocurrió poner música, primero obvio le preguntó a su hyung si podía hacerlo y con una respuesta positiva buscó la música ideal y cuando la encontró pulsó play.
Jimin manejaba y escuchaba como Yoongi seguía la letra de la canción, no podía evitar sonreír, le gustaba verlo feliz.
— ¡es tu deber trabaja duro, te encontrarás!¡es tu deber trabaja duro de veras lo verás...! — bajó la ventanilla del auto — ¡... él príncipe fue un ricachón y más rico quiere ser...! — le cantó a Jimin, haciendo a este carcajear — ¡... es tu deber trabaja duro, yo se que rudo será, es tu deber trabaja duro, trabaja aun te falta más...! ¡cielos y nubes, para ti! ¡CIELOS Y NUUUUUBEEEEES! — gritó fuerte — ¡es para tiiiiiiii!
Jimin detuvo el auto justo cuando Yoongi dejó de cantar, el menor estaba desconcertado, ¿por qué estaban frente a un avión?
— que hacemos aquí señor Jimin
— vamos a darle uso a todo lo que compramos, no creerías que lo utilizaremos aquí, ¿verdad?
Yoongi negó y siguió a su hyung, subió al avión y quedó anonadado, el interior era impresionante, ese no era una avión comercial, era los de... ¿cómo se les dice? Aviones privados, todo ese avión solo para ellos.
— a donde vamos hyung — tenía miedo, pero estar junto a Jimin le daba tranquilidad
— vamos a cumplir uno de tus sueños — le apretó una sus pálidas mejillas, acto que hizo sonrojar a su menor
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— Señor, no me diga que irán a-
— si, a esa misma isla
— ay no puede ser — se emocionó — pero, no harán... bueno, usted sabe
— es normal la reproducción en los seres humanos, Kai — se alzó de hombros
— pero señor... — miró la fuente, la cual reflejaba a la pareja sentada juntos con una sonrisa en sus rostros.
