wizengamot

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Una diminuta serpiente blanca había salido del huevo que había comprado el día anterior en el callejón Diagon, Harry hizo un terrario improvisado para que la cría descanse.

Durante el resto de la semana había estado estudiando derecho mágico, era algo que jamás le había gustado pero para su suerte Daphne le ayudó con la excusa de que su prometido no podía hacer el ridículo aunque Harry sabía que ella disfrutaba tanto como el de sus sesiones de estudio.

Así se convirtió en una constante ver a Harry en la casa Grengass, ambos decidieron usar la biblioteca de esta puesto a que la gran mayoría de libros de derecho en el castillo Pendragon estaban desactualizados.

Y ya que estaba ahí siempre jugaba al quidich con Astoria y tomaba el té con Tom y Ofelia, sin darse cuenta Harry había entrado completamente en su vida.

Sin embargo el momento que más disfrutaba Harry era estudiar con Daphne, aunque odiaba el derecho Daphne era muy buena profesora con ella todo resultaba sencillo a demás entre estudio y estudio se volvían más cercanos y Harry finalmente pudo comprender los motivos de Merlín, si no fuera por los Grengass sería un niño vagando solo por el mundo con título más grande lo que él mismo sería jamás y en esos momentos recordaba que estaría comprometido con ginebra Weasley de no ser por Daphne.

Antes de que se diera cuenta había llegado el día de la reunión, estaba listo aunque evidentemente una semana no era suficiente para ponerse al día con el derecho mágico estaba más que cualificado para la posición pasiva pero firme que iba a tomar a demás Tom estaría a su lado para guiarle si algo escapaba de sus conocimientos.

Harry bajo al comedor para desayunar algo aunque los nervios le habían quitado el apetito Dobby no permitiría que el maestro Harry salga de casa con el estómago vacío.

Después se lavo los dientes y se puso las mejores prendas que tenía, una túnica hecha de piel de dragón con costuras hechas de telaraña de Acromantula se peino bien y se puso un perfume bastante caro que había comprado el día anterior.

Con ayuda de Dobby se apareció delante de la casa de los Grengass y tocó la puerta, rápidamente Daphne apareció para dejarle pasar y al verlo puso una mirada de aprobación con lo que Harry juraría que era un pequeño sonrojo.

Tom y Ofelia también se habían puesto elegantes para la reunión y sonrieron al ver a Harry, el chico tenía un aspecto increíble pero sus nervios se veían a kilómetros.

-Harry calmate, estás más que preparado- dijo Tom y su esposa se mostró de acuerdo a lo que Harry respondió -Lo se pero no puedo evitar ponerme en la peor situación posible- Dijo Harry y entonces sintió algo alrededor de su mano, era la mano de Daphne, Harry se sorprendió por la iniciativa de la chica y le sorprendió aún más verse a el mismo reforzando el contacto.

-Confío en ti, Harry- Daphne no sabía cuánto estaban ayudando sus palabras al joven mago que solo pudo poner una sonrisa tonta para diversión de los adultos.

Cuando llegó la hora Harry y los señores Grengass tuvieron que ir al ministerio, Harry se despidió de Daphne y Astoria ambas le desearon suerte antes de que se alejara por la red Flú.

Cuando llegaron al ministerio fueron recibidos por un grupo de aurores encargados de custodiarlos a Harry le gustó ver ahí a Ojoloco Mody, el hombre había ido a la casa de los Potter para solucionar unos temas de trabajo y había reconocido delante de sus padres que Harry tenía talento aunque por supuesto esto no les importo a sus padres.

Cuando estaban llegando a la sala de reunión del wizengamot Harry oyó la voz de Lily Potter detrás de él -¡Harry!- la pelirroja se acercó a él casi corriendo por los pasillos del ministerio cuando fue detenida por Ofelia que dijo -Creo que Harry no disfruta tu presencia-.

El Heredero De Merlín (Remaster)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora