alma dinamita.

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Soy un alma prisionera de mi pasado, buscando aquella libertad en mi tan esperando futuro.
Esa luz que tanto ilumina el cielo me reconforta, me hace pensar que todavía hay alguien que me atesora.

¿Existe el mañana o es una simplemente fantasía mía la que tengo ahora?

Ese polvo fugaz me llena la cara, trae un olor con ella. Huele a casa.

Quiero volver a mi casa, quiero ir a casa.

Del polvo fugaz que roza mi piel se acerca aquella despampanante luz, cada vez más cerca. La siento, te siento.

— "Puedo verte" -le susurré.

La luz se acercó cada vez más para darme un beso en la frente y decirme:

— "No esperes que alguien te venga a salvar, salvate vos que pocos se preocupan por el después".

Desperté.

El éxtasis del momento me hace sentir que soy eterna, el cuerpo vuela por las nubes y la mente se me vuelve una con el corazón.

Deberíamos ser un poco más nosotros y dejar que el resto sean ellos, vibrar a nuestro estilo y ser lo que tanto le pedimos al cielo, y ser lo que no pudimos en el pasado.

Démosle un abrazo a nuestra alma, mimemos nuestro cuerpo, besemos nuestra lógica y razonemos con el pecho.

Las copas de champagne están elevadas, hacen un sonido sutilmente cada vez que las chocó.

Celebremos la vida, que nacimos para vivirla.

Pensamientos transparentes de una mente complicada - poemarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora