CAPITULO 34

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Las gotas de lluvia chocaban con la ventana del motel, las nubes grises junto a la lluvia tapaban todo a la vista. Allí estaba Kuro, con su bata puesta, viendo todo por la ventana, suspiro feliz y la tapo con la cortina, nunca se había sentido tan feliz de vivir un día así, ya había tomado su baño por lo que no tendría que preocuparse por posibles resfriados, tampoco tendría que preocuparse por Yashiro o su madre, pues tuvo que mentirles haciendo una jugada sucia con la ayuda de su tía, ahora Haru y Yashiro piensan que él está con ella pasando la noche. El joven al recordar todo esto sonrió satisfecho con una sonrisa de victoria en la cara

   —~Kohi ~— llamó la joven desde el baño— ¿Lograste hablar con tu madre?

   —Si— respondió dirigiéndose a la cama— fue un poco difícil convencer a mi tía, pero nada que un lienzo de su difunto perro no pueda arreglar

   —Entonces ya no hay de que preocuparnos...— dijo contenta

   —Así es, ¿Y tu hablaste con tus hermanas?

   —No, no importa después lo haré. . .—Respondió

Hubo un momento de silencio, Kuro sentándo en la cama, solo escuchaba el agua correr y chocar contra el suelo en el baño, se sonrojo al  imaginarse la silueta de la joven desnuda mientras el agua recorría cada centímetro de sí cuerpo. Sacudió su cabeza al instante borrando las imágenes  de su cabeza, suspiro, empezó a sentirse incómodo con lo que tenía puesto, acomodo un poco su bata pero no conseguía nada

   —¿Yotsuba, tu te sientes cómoda con una de estas cosas encima?—pregunto un poco fastidiado

   —Si, a mi parecer son cómodas—respondió— ¿A ti no te gusta?

   —Si, a mi parecer son cómodas—respondió— ¿A ti no te gusta?

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   —Yo...Yotsuba, ponte algo, estas mostrándome todo— dijo el chico sin dejarla de ver

   —Si, ¿Que hay de malo?— sacudió un poco sus caderas y manoseo suavemente sus pechos— Tu y yo no tenemos nada que ocultar, ya nos pertenecemos mutuamente, ~¿no quieres probarme un poco?~— con un tono seductor

   — No gracias, estoy bien como estoy ahora— respondió nervioso desviando la mirada

   —No me mientas, yo sé que si— la joven entusiasmada se lanzó a la cama para caer  encima de su amado, quien reacciono antes y logró levantarse

   —No me mientas, yo sé que si— la joven entusiasmada se lanzó a la cama para caer  encima de su amado, quien reacciono antes y logró levantarse

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