Capítulo 25: Abismo Sin Fin

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—¡Shizun!

Al ver de repente a Shen Qingqiu, Luo Binghe estaba mucho más feliz que impactado.

Después de todo, desde que comenzó el caos, había anticipado que Shen Qingqiu definitivamente se preocuparía y entraría personalmente en la garganta para rescatarlos.

Shen Qingqiu se enderezó con rapidez. Al ver a muchos discípulos yendo a rodearlo, preguntó: —¿Hay alguien herido?

—Aparte de la ribera... esas shimeis y los shidi que murieron tras ser drenados, en este momento no hemos sufrido ningún otro daño —dijo Luo Binghe.

—Has pasado por muchos problemas —dijo Shen Qingqiu.

Luo Binghe sonrió, sus ojos brillando intensamente. —Este discípulo solo estaba cumpliendo con mi deber.

Shen Qingqiu le dio un vistazo a la Qin Wanyue con ojos rojos, y pensó: Todavía puedes sonreír, sonreír, ¡¿no sabes acaso que una de tus esposas está muerta?!

Al ver que un poderoso sénior había aparecido para rescatarlos, el grupo de discípulos actuó como si vieran a su madre, deteniéndose a punto de aferrarse a sus muslos y lloriquear.

—No es necesario entrar en pánico o tener miedo —dijo Shen Qingqiu—. Los líderes de secta en el exterior están al tanto de la situación en el interior, y un gran número de séniores ya ha entrado en la barrera para ayudar. Protéjanse bien, pronto podremos salir.

Estas palabras suyas fueron como un agente calmante. Los jóvenes asustados a muerte las absorbieron y se tranquilizaron. —Shizun, recién, ¿qué era eso exactamente? —dijo Luo Binghe.

Cuando se trataba de las bestias demoníacas de Camino del orgulloso demonio inmortal, realmente le había preguntado a la persona correcta. Shen Qingqiu habló con gran confianza, —No es sorprendente que nunca hayas visto una. Esta es una araña de cabeza fantasmal. De mal genio y con una apariencia aterradora, puede imitar el sonido de infantes llorando, y usa eso para atraer a sus presas. Una vez que la presa se acerca, las ventosas debajo de su cabeza agarran firmemente la coronilla de la cabeza de la presa. Sus ocho patas son increíblemente afiladas y pueden perforar directamente los cráneos para drenar los sesos de las criaturas vivientes.

Luo Binghe escuchó su explicación increíblemente detallada, y quedó lleno de admiración y pasmo. —Pensar que una criatura tan malvada existe en este mundo. Este discípulo es en verdad demasiado ignorante.

Desde que Luo Binghe comenzó a ser aprendiz de Meng Mo, la guía que Shen Qingqiu podía darle sobre técnicas marciales y de espada se hizo cada vez menos. Ahora que se presentó una rara oportunidad de presumir como maestro ante su discípulo, Shen Qingqiu estaba secreta e increíblemente gratificado, sintiendo que al fin había encontrado su halo de maestro perdido hace mucho tiempo. —Las arañas de cabeza fantasmal son una especialidad demoníaca, inadecuadas para los entornos del Reino Humano. Ya han pasado muchos años desde algún avistamiento, por lo que, desde luego, no aparecen en la mayoría de las compilaciones de referencia. La próxima vez que veas una, recuerda atacar directamente sus sienes. La de recién era solo un macho, afortunadamente no nos encontramos con una hembra, de lo contrario habría sido aún más aterrador...

Los dos todavía tenían mucho que decir, cuando ruidos crujientes llegaron desde las hojas que los rodeaban desde arriba.

De hilos de seda blanca, cabezas que estaban suspendidas boca abajo aparecieron una por una de los árboles.

La expresión de Shen Qingqiu cambió por completo.

¡Los gritos de las arañas de cabeza fantasmal atraen a un gran número de ellas para rodear y atacar!

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