14

422 41 6
                                    

Después de los recientes eventos, Nikolai reunió a sus amigos para confesarles su intención de declararse a Fyodor, aunque estaba plagado de temores sobre el posible rechazo. —  ¿Y si me dice que no? —  murmuró, mirando ansiosamente a sus amigos en busca de consuelo.

Atsushi, con una sonrisa tranquilizadora, colocó una mano en su hombro. — No se  preocupe, Nikolai-san, Fyodor-san seguramente apreciará tu valentía y sinceridad. No creo que te rechace.

Akutagawa, con su habitual tono serio, intervino después. — Estoy seguro de que Fyodor-san te corresponderá. Has seguido todos los pasos correctos no como cierto idiota que aunque no espere mucho de él aun así logra decepcionarme—  agrego, lanzando una mirada afilada hacia Chuuya.

Chuuya, al escuchar el comentario de Akutagawa, frunció el ceño y sus ojos destellaron de indignación. — ¿Qué quieres decir con eso, Akutagawa? ¿Acaso insinúas que soy un fracaso? — espetó, cruzando los brazos sobre el pecho.

Akutagawa sin inmutarse por el contrario respondio— No estoy insinuando nada tu solo te delatas — la ira de Chuuya se encendió ante la respuesta de Akutagawa. — ¡Tú y tus aires de grandeza! Solo diste un par de ideas y te crees el mejor —  exclamó, apretando los puños con furia.

Atsushi intervino rápidamente, tratando de calmar los ánimos antes de que la discusión se intensificara. — ¡Chicos, tranquilícense! No ganaremos nada peleando entre nosotros. Nikolai-san necesita nuestro apoyo ahora más que nunca — dijo, levantando las manos en un gesto conciliador.

Chuuya y Akutagawa solo se dedicaban miradas de odio. Despues de esto Nikolai menciono — Siento vergüenza al tener que decirle mis sentimientos

Chuuya soltó una carcajada traviesa — ¿Para eso sí tienes vergüenza, pero cuando metías tu lengua hasta el fondo en su boca, no verdad? — bromeó, con una sonrisa juguetona en su rostro.

Nikolai se ruborizó intensamente ante el comentario de Chuuya, sintiéndose un poco avergonzado por el recuerdo.  — ¡Chuuya! ¡No es lo que parece! — exclamó, tratando de defenderse entre risas nerviosas.

Chuuya continuó riendo, disfrutando del momento. —  Oh, vamos, Nikolai. No te pongas tan rojo. Todos ya sabemos de eso — dijo con complicidad, intentando calmar a su amigo.

Nikolai miró a Chuuya con una sonrisa burlona. — Bueno, no eres precisamente un santo, ¿Verdad? También te he visto en los baños con Dazai como te manosea como si fueses fruta de mercado — dijo, desafiante, mientras levantaba una ceja.

Chuuya frunció el ceño, sorprendido por la respuesta de Nikolai. —  ¿Qué estás insinuando, Nikolai?— preguntó, sus ojos centelleando con una mezcla de curiosidad y molestia.

Nikolai se encogió de hombros, jugando con sus palabras. — Solo digo la verdad. No te hagas el inocente — respondió con una sonrisa traviesa.

Atsushi, con el rostro ardiente por la vergüenza, se esforzaba por ignorar los comentarios de sus superiores. Sin embargo, la intervención de Akutagawa detuvo la pelea de inmediato.

— ¡Ambos son unos indecentes, sinvergüenzas! ¡No es manera de expresarse de ese modo frente a unos seres inocentes como nosotros! — exclamó Akutagawa, intentando poner fin a la discusión.

Nikolai y Chuuya, sorprendidos por la intervención de Akutagawa, se volvieron hacia él con expresiones de incredulidad. — ¡Cállate, idiota! —  gritó Chuuya, frustrado por la intromisión.

— ¡Es incluso peor viniendo de ti! ¡Vimos las marcas en el cuello de Atsushi! — agregó Nikolai, señalando acusadoramente a Akutagawa.

Akutagawa se quedó momentáneamente en silencio, sorprendido por la acusación. Su rostro palideció mientras intentaba procesar lo que acababa de escuchar. Sin embargo, antes de que pudiera responder, Atsushi se adelantó, con el rostro aún más enrojecido por la vergüenza.

— ¡Chuuya-san! ¡Nikolai-san!  — exclamó Atsushi, tratando de defenderse.— No es lo que piensan, lo juro — agregó, mirando a Akutagawa molesto ya que le dijo que no le dejara marcas pero el pelinegro solo lo ignoro.— ¡ Ryunosuke Akutagawa  quedas en abstinencia por un mes!

Cuando Akutagawa escucho eso quedo  visiblemente afectado ¿Abstinencia? Después de que el peliblanco lo dijera, se quedo calladito y Chuuya le dedico una sonrisa burlona a Akutagawa a lo que el pelinegro solo le saco el dedo del corazón.

El grupo continuó hablando mientras discutían sobre cómo Nikolai planeaba confesar sus sentimientos a Fyodor. Entre las sugerencias, Nikolai mencionó una idea que había estado considerando en los últimos días: confesarse en el parque cercano al instituto.

— El parque al que me llevo sería un lugar perfecto — explicó Nikolai, con una chispa de emoción en sus ojos. — Es tranquilo y hermoso, y nos daría un poco de privacidad para hablar.

Atsushi asintió con entusiasmo. — ¡Esa es una idea maravillosa! — exclamó. — El parque es un lugar romántico, y estoy seguro de que Fyodor-san apreciará el gesto.

Chuuya, aunque seguía mostrando su actitud sarcástica, parecía intrigado por la idea de Nikolai. — Supongo que podría funcionar.

A medida que se acercaba el día de la confesión de Nikolai, Chuuya y Atsushi se ofrecieron a ayudarlo a practicar. Juntos, crearon escenarios simulados para que Nikolai pudiera ensayar lo que quería decirle a Fyodor en el parque. Chuuya, imitaba a Fyodor.

En medio de las prácticas, Akutagawa no perdió la oportunidad de molestar a Chuuya, aprovechando cada oportunidad para interrumpir y distraer durante los ensayos. Chuuya, por supuesto, respondió con su típico ingenio y réplicas afiladas, manteniendo la atmósfera ligera a pesar de las interrupciones.

Entre risas y burlas, Nikolai practicó una y otra vez, puliendo sus palabras y asegurándose de transmitir sus sentimientos de la manera más clara posible. A pesar de los obstáculos, sus amigos estuvieron allí para apoyarlo, brindándole ánimo y aliento cuando lo necesitaba.

.

.

.

Nikolai al llegar a la salida, divisó a Fyodor y Dazai conversando animadamente cerca de la entrada. Su corazón latía con fuerza en su pecho mientras se acercaba con paso decidido hacia ellos. —  Fyodor — dijo Nikolai con voz suave, apenas logrando contener la emoción que sentía.

Fyodor se volvió hacia él, una sonrisa gentil iluminando su rostro lo saludo.

Y Dazai, como siempre efusivo, dejó escapar un grito de alegría al ver a Chuuya acercarse hacia ellos. — ¡Chuu Chuu! — exclamó, abriendo los brazos en un gesto acogedor.

Chuuya respondió al gesto de Dazai con una sonrisa juguetona, aceptando el abrazo con entusiasmo.—  Hey, Dazai  — saludó con jovialidad, disfrutando del momento.

Dazai se acercó a sus amigos y se despidió. — Nos vemos mañana, Chicos — dijo con una sonrisa.

Chuuya asintió con una sonrisa cómplice. — Adiós — respondió con confianza y antes de irse con Dazai, Chuuya se acercó a Nikolai y le dio un golpecito amistoso en el hombro. — Buena suerte — le deseó con una sonrisa sincera.

Nikolai sintió una oleada de gratitud hacia su amigo. — Gracias, Chuuya — respondió con una sonrisa agradecida.

Mientras Chuuya y Dazai se alejaban, Nikolai se quedó allí, observando cómo se perdían entre la multitud. Se volvió hacia Fyodor, quien lo miraba con una expresión cálida y comprensiva.

— Fyodor — comenzó , rompiendo el silencio que había caído entre ellos. — ¿Te gustaría salir  a caminar al parque?.

El corazón de Nikolai dio un vuelco ante la propuesta de Fyodor. — ¡Por supuesto! — respondió con entusiasmo, incapaz de contener la sonrisa que se dibujaba en su rostro.







Travesuras Amorosas (Soukoku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora