Caldo de pollo en un día lluvioso (poema)

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No soy un hombre virtuoso
Soy mucho menos alguien talentoso
El talento es escaso
Pues ¿Qué mejor talento que el de apreciar la vida?
No me hagan caso
Si no quieren
Pues yo soy el que está en salón
Yo soy el que está a la deriva en el puerto sin ocaso.
Parece ser lejano ese momento de que acabe el día y duerma en tu regazo.
Y el cielo me lo recuerda cuando todo es radicalmente azul.
Me e esforzado tanto en ver la melancolía en mis noches que nunca use una sombrilla en los días de sol.
Ni nunca me cubrí en sábanas cuando hacía frío.
Quien soy yo para arruinar la vida de los demas? Soy un suspiro fugaz en cualquier tipo de recuerdo.
Ni el poeta de tus sueños ni el rey de ningún pueblo necesitado.
Viviré vaga o felizmente apartado.
Ante temores, remordimientos y arrepentimientos prefiero a mis malas decisiones estar esclavizado.
No soy el conjunto de mis partes como un rompecabezas.
Soy el rompecabezas jamás sin resolver.
Estaciones: esperamos todo tan impasibles como las estaciones del tren.
Mes tras mes, años tras año me quedo atrás en vagas ideas de una estrella que como bien se sabe; ya no está ahí.
No fingiré ser un romántico.
Pues sufro de ser apático ante un mundo absuelto de bondades o caritas.
Pero las coperitas de un corazón ya latiendo es al final darle un lugar en el basto mundo a un agujero con una imagen vaga en su arena.
Pero ese recoveco, ahora en mi persona, se llena de aguas de lluvia y poca pena.
Pues la melancolía de una enfermedad hace recordar que existe la muerte, así como la cura.



Notas de autor: Soy el contraste de partes irónicas y desiguales, juzguen; no me da pena...

Borrador: Entender El Arte De Lo No SatisfactorioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora