Apocalipsis

CAPITULO 1

yo soy Bill Kautilz y Tenia solo 15 años cuando todo esto empezó.

Estaba en el patio de colegio, recostado abajo de un árbol, no me sentía muy bien así que decidí saltarme una clase. Estaba con los ojos cerrados, mis brazos estaban atrás de mi cabeza, el día estaba muy tranquilo, pero nunca pensé lo que pasaría después.

Estaba a punto de dormirme cuando escuche gritos, di un salto en mi lugar por el susto y abrí los ojos, me levante de mi lugar y mire a ambos lados de mi, tratando de descifrar de donde vino ese grito, cuando de la nada escuche otro grito, este se escucho mas fuerte que el otro, mire hacia delante y no avía nadie, así que pensé que lo estaba imaginando cuando estaba a punto de volver a recostarme como estaba antes, escuche un vidrio romperse rápidamente mire hacia arriba exactamente al 4to piso del edificio, y hay fue cuando lo vi y supe de donde provenían esos gritos, lo que llegue a ver me dejó paralizada.

La ventana avía sido rota por unos chicos, estaban forcejeando el que estaba de espaldas trataba de alejar al que estaba en frente, no podía ver bien sus caras, pero lo que si medí cuenta es que estaban cubiertos de lo que parecía ser sangre. De un momento a otro; A pareció otro chico y se abalanzó hacia el otro que estaba de espaldas, lo mordió del cuello y jaló hacia tras logrando así arrancarle un pedazo, y un grito desgarrador, el chico puso sus manos en su cuello tratando de parar el sangrado pero era inútil, se tambaleo hasta la ventana y se tiró hacia atrás. Se escucho un fuerte golpe contra el piso, mire nuevamente hacia arriba y hay fue cuando pude ver bien a los chicos que lo habían atacado. A uno de ellos le faltaba una parte de la mejilla y tenía un ojo semi arrancado, y al otro le faltaba la mitad del brazo y tenía una mordida en el cuello, ambos cubiertos de sangre. Luego de unos segundos los perdí de vista avían salido corriendo y empecé a escuchar gritos nuevamente solo que esta vez eran de varías personas provenían de varios lugares, después de salir del estado del shock en el que estaba, rápidamente agarre mi mochila, la colgué en mi brazo y me acerque lentamente al chico que hace unos momentos se había caído del 4to piso.
Para sorpresa mía, se empezó a mover así que no dude en acercarme, y llamar a una ambulancia, para que vengan ayudarlo.

-Hey no te muevas tanto, estoy llamando a una ambulancia resiste un poco más. 

Estaba tan aterrado y asustado que mis manos temblaban mucho, no contestaban el maldito teléfono, pero no me rendí y continúe llamando con la esperanza que me contestaran pero nada, empecé a entrar en pánico, cuando llegue a ver que el chico empezó a toser sangre. Trate de levantarlo, pero cuando intenté hacerlo se abalanzó hacia mi, empecé a forcejear con el, medí cuenta que trataba de morderme, le di una patada y logré apartarlo de mi, no perdí el tiempo y salí corriendo, entre al edificio y cerré la puerta, ni bien entre veo una escena aterradora, por todas partes había sangre esparcida y algunas extremidades como brazos o piernas tiradas, y algunos cuerpos tirados, casi vómito hay mismo pero no lo hice, sabía que algo estaba pasando, algo muy malo. A los pocos segundos veo como muchos alumnos bajaban corriendo las escaleras como tratando de escapar de algo. La mayoría estaban heridos y cubiertos de sangre. No lo pensé dos veces y también salí corriendo hacia la puerta principal cuando por fin estaba a fuera del edificio, medí cuenta que era peor avían muchas personas forcejeando con otras y algunas estaban siendo devoradas por otras.
Mi objetivo de ahora era ir a mi casa, no me importo ir corriendo con tal de saber que mi familia estuviera bien.

Fue muy difícil llegar hasta mi casa, en el camino me empezaron a seguir algunas de esas cosas, que tenían apariencia humana pero sabia que ya no lo eran, corrían muy rápido, uno casi me alcanza pero logre zafarme, gire rápidamente en una esquina y me escondí abajo de un auto, pasaron de recto por suerte.

-Al fin logre escabullirme-dije en un susurro, me quede un rato mas abajo del auto esperando que se alejaran lo suficiente, también aproveche para descansar un rato, no era muy bueno para correr me cansaba muy rápido. Cuando por fin descanse lo suficiente, me fije bien de que este todo despejado antes de poder salir, cuando vi que no avía nadie salí de bajo del auto, estaba por empezar a correr nuevamente cuando escuche un sollozo era de un niño, provenía de un callejón, me acerque lentamente con cuidado, estaba un poco oscuro pero pude ver al niño estaba en una esquina escondido detrás de unos botes de basura estaba sentado con su cabeza escondida entre sus piernas, me acerque a el, el niño pego un salto y me miro con cara de asustado, era normal ya no noto cuando me acerque, parecía un niño de entre 6 y 7 años.

-Hola no te asustes no voy hacerte daño ¿cuales tu nombre?- se me quedo mirando, sus ojitos estaban muy rojos de tanto llorar, me pregunto cuanto tiempo habrá estado aquí, estuvo unos segundos mirándome, como dudando en responderme. Hasta que al final se animo a responderme.  

-Ho-Hola mi nombre es Santi- su voz se escucha temblorosa.

-El mío es Bill, ¿que estas asiendo aquí solo? 

-Mi papá me vino a buscar del colegio cuando estábamos de camino a casa, un hombre se acerco corriendo hacia mi papá y se abalanzo hacia el, y lo mordió en el cuello, como pudo se libero de esa persona que lo ataco, se agarro del cuello ya que no paraba de sangrar, me alzo entre sus brazos y salió corriendo, entro a un callejón y me bajo al piso me dejo aquí, me dijo que no me moviera hasta que el volviera, ya que iba a pedir ayuda, pero ya paso mucho tiempo desde que se fue y no volvió todavía.-empezó a llorar nuevamente, trate de tranquilizarlo acariciándole su espaldita, saque un pañuelo de mi mochila, alce su carita y empecé a limpiar sus lagrimas. Una vez que logre calmarlo volví a hablar. 

 -¿y sabes donde se encuentra tu mamá?.

-Esta en mi casa.

- ¿sabes donde queda tu casa? 

- No- me lo suponía era muy chiquito para saber donde quedaba su casa. Pero-volvió hablar y lo escuche atentamente- queda a 2 calles de un parque, en la misma cuadra se encuentra una tienda de ropa, el color de la puerta de mi casa es blanca con un portón amarillo-Eso era mas que suficiente avía un parque justo a unas cudras de aquí, supuse que debe ser ese.

-Ven párate, yo te voy a llevar a tu casa-le sonreí y le extendí mi mano, el dudo un poco si tomarme de la mano pero al final lo hizo, al final se paro y salimos del callejón sin antes mirar la calle para ver que no avían esas cosas.

Después de caminar algunas calles, logramos llegar al parque, le pregunte si este era el parque a lo que el me hizo un asentamiento de cabeza, cuando estábamos a punto de pasar el parque, me percate que habían algunas de esas cosas, eran como 5 estaban agachados parece que estaban comiendo algo, cuando pude divisar bien que era me asuste, se estaban comiendo a una persona, estaba casi toda desmembrada, casi vomito a ver esa imagen, me tape la boca y me di la vuelta tratando de calmar mis ganas de vomitar, una vez que logre hacerlo, vi al pequeño Santi que me miraba con preocupación, le sonreí y le hice una seña para que no haga ningún ruido, lo tome entre mis brazos y le tape los ojos para que no pueda ver esa escena, pasamos cuidadosamente por el parque, pero tuve la mala suerte de que una de esas cosas se diera la vuelta y me viera se levanto rápidamente, se empezó a cercar a mi detrás de el venían los demás, salí corriendo lo mas rápido que pude, pero se me dificultaba correr mientras tenia entre mis brazos al pequeño Santi, que empezó a llorar, estaba tan asustado como yo lo estaba en estos momento. Cuando pasábamos algunas calles encontraba mas de esas cosas, trataba de esquivarlas pero era inútil, cada vez eran mas de esas cosas que nos estaban siguiendo. 

Cada vez estaban mas cerca de nosotros, estaba tan asustado y desesperado, no quería morir sin antes llevar a Santi con su mama y yo ver a mi familia, doble justo en una esquina, cuando de repente uno de mis pies se doblo y me caí, trate de levantarme lo mas rápido que pude, pero apenas lo intente, me caí nuevamente, me avía doblado el tobillo y dolía horrible. Santi se acerco a mi tratando de ayudarme a que me ponga de pie, pero no podía, Le dije a Santi que corriera pero el no quería hacerlo quería quedarse conmigo.

cada vez los escuchaba mas cerca a esas cosas, pude ver uno cuando dio la vuelta a la esquina donde estábamos nosotros, rápidamente se abalanzo, lo único que pude llegar a hacer, fue darme la vuelta y cubrir con mi cuerpo a Santi que se acurruco entre mis brazos, escuche que cada vez estaba mas cerca de nosotros esa cosa, cerré los ojos esperando mi final, cuando estaba a unos centímetros de nosotros. Escuche como un auto se freno de golpe....

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Hola es la primera vez que escribo una historia 🙃, así que perdonen si esta primera parte no es muy buena, iré mejorando poco a poco. y perdón por adelantado si tiene algunas faltas de ortografía 🥲