En la casa de Bluey, Mackenzie estaba preocupado, ya que su esposa aún no había vuelto.
Mackenzie: ¿Donde estás, Bluey? ¿Por qué no regresas?
Christine pasaba por allí y vio a su padre con cara preocupada.
Christine: Papi, ¿estás bien?
Mackenzie: Oh, sí, hija, ¿por qué?
Christine: Es que te veía preocupado.
Mackenzie: Solo estoy esperando a que vuelva tu madre, volverá pronto, ya verás.
En eso, suena el teléfono de Mackenzie. Mackenzie lo coge, un poco extrañado ya que era un número desconocido.
Mackenzie: ¿Dígame?
Voz: Hola, ¿es usted el señor Collie?
Mackenzie: Si, soy yo, ¿que pasa?
Voz: Necesitamos que venga al hospital. Su esposa está en urgencias.
Mackenzie se quedó helado al escuchar esa noticia. Christine también había escuchado la conversación y estaba preocupada.
Christine: *asustada* ¿Le ha pasado algo a mamá?
Mackenzie: *alterado* ¡Hija, tenemos que ir al hospital YA!
Los dos se pusieron sus abrigos y fueron corriendo al hospital donde estaba Bluey.
Al llegar allí, Mackenzie fue corriendo a recepción a preguntar por su esposa.
Mackenzie: *alterado* ¿Mi esposa está bien?
Señora: Ahora mismo le informamos, señor. Tome asiento.
Mackenzie se sentó junto a Christine en la sala de espera. Estaba muy nervioso. ¿Lograría sobrevivir Bluey al accidente?
Unas horas más tarde, un doctor anuncia su nombre con cara seria.
Doctor: ¿Es usted Mackenzie Collie, esposo de Bluey Christine Collie Heeler?
Mackenzie: Si, soy yo, ¿cómo está?
Preguntó, pero ni él ni su hija estaban preparados para lo que iban a oír.
Doctor: Señor Collie, lamento informarle que su esposa falleció.
Mackenzie se quedó paralizado. Sentía que sus piernas no le respondían.
Mackenzie: ¿Que... dijo?
Doctor: Su esposa murió, señor. Lo siento, pero se dio un golpe muy fuerte en la cabeza contra el parabrisas y no pudo soportarlo.
Mackenzie comenzó a sollozar. Abrazo a su hija, quien también lloraba desconsolada. No podían creerlo, Bluey estaba muerta.
Christine: *con voz quebradiza* Papi, ¿ya no volveremos a ver a mamá?
Mackenzie: No, hija, no la volveremos a ver. *sollozando*
Los dos se fueron del hospital, recogieron el coche del taller (estaba un poco dañado) y se fueron a casa con lágrimas en los ojos. Los dos se fueron a dormir a la cama de Bluey y Mackenzie, ya que no querían estar solos. Al día siguiente tenían mucho que preparar.
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Ella no está en este mundo
FanfictionMackenzie pasará por una de las mayores tragedias de su vida. Tendrá que superar la muerte del amor de su vida mientras cuida de su hija solo. ¿Lo conseguirá?