Kim Taehyung es un pequeño Omega qué mide 1,55 cm.
Jeon Jungkook es un Alfa de 1,80 cm de alto. Se enamora de aquel tierno Omegita de bolsillo.
Solo hay un problema, aquel pequeño Omega no será fácil de conquistar. Porque lo que le falta de altura...
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Los guardias los guiaron al cuarto de visitas, ambos se sentaron frente al gran vidrio. Unos segundos después del otro lado del vidrio entró el padre de Jungkook, esposado de pies y manos, apenas vio a Taehyung corrió hacia el vidrio y golpeó con sus manos en este.
-Mi omega.- gritó con fuerza, asustando al menor, Jungkook lo abrazo de inmediato cubriendo con sus manos el rostro de este. - Mío, mi Omega. - volvió a gritar.
Jungkook estaba ahí por un motivo, su contacto le había informado que a su padre lo declararía imputable, por padecer "desequilibrios mentales". El hombre quedaría libre...
Jungkook se puso de pie sin dejar de abrazar a su novio. - Se que estás fingiendo demencia, maldito.- murmuró acercando su rostro al vidrio con sus ojos rojos.
-¡Oh!, mi pequeño cachorro ahora se cree un hombre. - le dijo en tono sarcástico, se sentó en su silla cruzando sus brazos, y con una sonrisa de satisfacción en sus labios. - Pronto saldré de aquí, y te arrebatare de las manos a mi Omega, a mi chocolatito.
El castaño giró su rostro entre los brazos de su Alfa y miro al mayor.- ¡Ash!, chicolatito sus bolas, que horrible apodo. - murmuró con fastidió.
Jungkook no pudo evitar soltar una pequeña risa nasal, pero de inmediato volvió a cambiar su semblante para mirar a su progenitor. - No saldrás de aquí, jamás. - le advirtió en tono amenazante.
-Si saldré hijo, tengo a varios jueces y abogados comprados, en pocos días estaré afuera de esta pocilga. - le dió una sonrisa ladina, y macabra. - Y saldré con una sola meta, llevarme lejos a mi pequeño...
-¿¡Pequeño!?.- exclamó molestó el Omega. - Yo no soy pequeño viejo decrépito.
-No me digas así bebito. - le respondió el mayor.
-¡Cierra la boca!.- el azabache alzó su voz molestó.
Taehyung levantó su rostro, miro a su amado con una sonrisa traviesa, re lamió sus labios y susurró. -¿Puedo Kook?. - el Alfa asintió levemente con una sonrisa cómplice.
Jungkook soltó un poco su agarré, y lo abrazo por la cintura, apoyó su mentón en el hombro del menor para observar el espectáculo.
-Eres tan lindo.- le dijo el Alfa mayor al ver el rostro del Omega.
-¡Alfa, cierra la boca!.- le ordeno con voz firme al padre de su futuro esposo.
Este intento hablar pero no lo logro, comenzó a mover las manos para todos lados, su sonrisa irónica había desaparecido, una expresión de preocupación apareció en su rostro.
-Ahora muerde tu lengua muy fuerte hasta que salga sangre .- le ordenó con una sonrisa de satisfacción. Jungkook observaba a su novio con ojitos de cachorro enamorado, porque su tigre hasta para ser malvado se veía muy tierno.
