Neko-Boy [Terminado] EDITANDO

Capítulo 19: El juicio, la verdad y el hasta pronto.

-Por favor no me hagas nada.- susurre asustada.

-No te preocupes, no te haré nada... aún.- dijo con voz amenazante. Siento que escuche esta voz en algún lado ahora que la escucho de cerca, pero mi mente en estos momentos esta bloqueada por el miedo y me prohíbe recordar.

Ese hombre me dijo que caminara despacio y me llevo hacia unas avenidas de mala muerte. Era un lugar repugnante y muy sucio, cajas tiradas por doquier, basura acumulada, vagabundos, borrachos y quién sabe que otras cosas más.

Soy una tonta, hubiera salido corriendo en cuanto me ataco, nunca debí de haber esperado a que me trajera hasta aquí.

Sentí un golpe en la cabeza y caí al frío asfalto lleno de barro y mugre. Me voltee y mire hacia arriba asustada. Ese hombre sostenía la daga en su puño.

-Es hora de que termine con esto, aquí... y ahora.- dijo acercándose para clavar la daga en mi cuerpo.

Cerré mis ojos con fuerza y lágrimas comenzaron a parecer. Mi cuerpo tembló.

-No te dejare que le hagas daño.- dijo una voz muy conocida por mí.

Abrí mis ojos sorprendida. Miré hacia arriba topándome con la espalda de alguien, alguien con una cola muy peluda.

-¿Shima?- me pregunte a mi misma.

-Kiara, levántate y aléjate, yo me encargare de él.- dijo sacando dos dagas sosteniendo cada una en una mano sin dejar de mirar a ese tipo.

-¿Qué haces aquí?¿Por qué estas así?.- pregunte al darme cuenta de que no tenia ni la gorra y su cola se veía desde cualquier punto.

-Solo hazme caso.- dijo sin dejar de mirar al hombre.

-¿Qué piensas hacer Shima?- dijo ese hombre sosteniendo con más fuerza la daga.- No sabes lo que haces.

-Ya basta. No permitiré que le hagas daño. Nunca pensé que fueras tú.- dijo acercándose a él.

-No quiero pelear contigo Shima.- dijo ese hombre retrocediendo unos pasos.

-Ya es muy tarde para eso... William.- dijo serio.

Me quedé en shock, no puedo creer lo que dijo, creo que de tanto estar en shock terminare en coma. No es posible, nunca creí... mejor dicho, jamás lo hubiera siquiera imaginado. William es mi asesino, la persona que siempre me a estado persiguiendo, la persona que me mando esa carta de amenaza y la que hace poco interrumpió mi sueño para matarme hay mismo.

-Mm... veo que te diste cuenta.- dijo él sacándose la capucha. En efecto, la persona debajo de ella era William, no puedo creerlo. Sus orejas se podían ver desde mi campo de visión.

-Por eso la vez que yo y tú perseguimos a Kiara el asesino no apareció, por que tú eras el asesino.- dijo mirandolo serio, molesto.

-Todo esto lo hice por tu bien, Shima.- dijo acercándose a él.

-No. Lo hiciste por tu beneficio.- dijo apuntando a William con una daga.- ¡Kiara vete de aquí! Yo me encargare de él.

Me di la vuelta y corrí, no quería dejar a Shima solo, pero si él me decía que me fuera de seguro era por mi bien.

-Ya es demasiado tarde Shima. Ya lo sabe.- escuche lo que William dijo mientras me alejaba.

No paso ni siquiera un minuto cuando mi cuerpo se sintió cansado, mi mente confundida y mi vista borrosa. Mi cuerpo pesaba demasiado y sentí que caía al suelo otra vez. Las nubes tapaban el sol dándole un aspecto nublado al día. Siento que la obscuridad me atrapa poco a poco.