-¿Porque estoy aquí?-
-JA! Nisiquiera necesito una razón, simplemente me encanta ver la desesperación de esta patética gente ¡es deliciosa!... Además, no me vendría mal una licencia que me facilite matar-
La de cabellos crema parecía no estar agotad...
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"la comida es un arte, un arte mortal" ° ° ° ° ° °
¡Esa mujer era hermosa! Cabellos Azules tan lindos y un cuerpo hermoso, definitivamente ella no era modelo porque no quería, o almenos eso pensaba Mich.
Esperaba atentamente las instrucciones de aquella mujer de cabellos azules mientras aún tenía al oso en sus delicadas manos.
—¿de que crees que trate esto Leorio? —empezó una conversación con el más alto del lugar.
—realmente no tengo idea, pero ambos se ven muy serios. — la mirada de ambos se dirigió a los nuevos instructores para escuchar sus palabras.
—Bienvenidos! Soy Meinchin y soy la examinadora de la segunda fase—dijo la de cabellos azules, la mirada azulada de Mich se movió hacia el hombre alado de Mein.
—me presento, soy Buhara—hablo ahora el gran hombre.
Un sonido resonó por todo el lugar, no podían negarlo, por más fuerte que fuera todos lo reconocían.
—me párese qué tienes hambre—la chica le leyó la mente a Mich, ambas rieron, la diferencia fue que Mich por gracia y Mei por costumbre.
—¡no es solo hambre parece que eh ayunando! —reprochó el hombre.
—Bien, ya es oficial, la segunda fase será cocinar—dijo la de cabellos azules.
—vaya, que sorpresa,no me lo esperaba—dijo Michiko sarcástica, pues todo el lugar estaba más que preparado para ser un digno programa de cocina.
Killua rio ante su obvio sarcasmo, haciendo que ambos se miraran de forma burlona hacia "la sorpresiva prueba".
Pro otro lado, el resto de participantes no parecían muy felices, de hecho, sus caras demostraban un gran desagrado, más uno de ellos cometió el gran error de demostrarlo.
—venimos a hacer el examen de cazador—musito molesto un hombre,Mich golpeó su frente con poca fuerza.
—hombre tenía que ser—dijo mirando a él qué había hablado.
—¡oye! —se quejaron Leorio Y Killua.
—¡No me refería a ustedes! —se defendió Michiko.
Mientras la pelea de el idiota que se quejo y la instructora seguía de fondo todos callaron al escuchar unas palabras bastante curiosas.
