Sᴡᴇᴇᴛ Lᴏᴏᴋs |
๋࣭ ⭑⚝ "Sólo son dulces miradas"
── .✦ Dónde Ryan y Walker deben superar un largo camino lleno de problemas antes de poder ser realmente felices, pero a veces no todos los finales son cómo en Disney.
⌗Walker...
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011 | Celos de adolescente
୨ৎ CADA AÑO, ALYVIA ORGANIZABA una fiesta de fin de año en el patio trasero de su casa, un evento que sus padres rara vez aprobaban sin alguna queja. Aunque preferían quedarse tranquilos en su habitación, sabían que la fiesta ya era una tradición. Este año no sería la excepción, pero algo sería diferente: su hermano menor, Ryan, había decidido que quería unirse.
—Vamos, todos los años haces lo mismo y jamás te pedí unirme —insistió mientras la seguía por la casa, su tono cada vez más persistente.
—¿Desde cuándo te interesan las fiestas? —preguntó levantando una ceja con escepticismo.
—Desde que tengo varios amigos para invitar —respondió él, como si fuera lo más obvio del mundo—. Te juro que estaremos de nuestro lado. Además, yo te dejé venir conmigo cuando fui a casa de Walker.
Ella suspiró dándose por vencida a pesar de no estar del todo convencida.
—Bien, pero mantente de tu lado, enano.
—Soy más alto que tú —replicó con una sonrisa triunfante.
—Solo por muy poco, y es muy injusto de hecho —se quejó mientras lo dejaba atrás.
—No, no lo es —dijo él en voz alta, siguiéndola con una carcajada. Luego, sin perder tiempo, se dirigió a la habitación de sus padres para informarles su plan de unirse a la fiesta—. ¿Saben que los quiero mucho, no? —se asomó por la puerta con una sonrisa.
—¿Qué quieres, Ryan? —respondió su madre, sin levantar la vista del libro que estaba leyendo.
—Nada —se sintió expuesto bajo la mirada inquisitiva de sus padres—. Quería preguntarles si podía invitar a algunos amigos mañana en la noche.
Su padre frunció el ceño con confusión.
—Pero es la fiesta de tu hermana, y tú odias a mucha gente en espacios cerrados.
—Sí, pero este año quiero hacerlo —insistió manteniendo su postura.
Barbara dejó el libro a un lado y lo miró seriamente.
—Bien, pero no invites a muchos. Con los amigos de Alyvia ya son como veinte personas y recuerda que esta vez no estaremos en casa, nos vamos con tu tía. Quiero la casa arreglada cuando volvamos —pidió.
