Ivette no sabía a cuánto podía llegar con solo saber maquillar, en este trabajo habrá algunos obstáculos que no se sabe si podrá evitar...
Dejando un poquito eso de lado, esto va a ser como un detrás de escenas de la película La Sociedad de la Nieve...
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Ivette Jimenez
ESTÁBAMOS mirándonos fijamente.
—¿Te puedo preguntar algo, Ivette? — Dije pensando en lo que le iba a decir después de hacer esa pregunta—
—Claro, lanzá la pregunta —preparada—
—Me gustas —dijo muy rápido—
—Perdona, ¿qué? —si había escuchado bien—
—Ivette, me gustas —repitió-
—Pero Pipe... —interrumpida por un beso que calló mi boca—
Me quedé muy quieta, no sabía cómo reaccionar ante ese beso tan tímido y callado desde hace mucho tiempo. Este posó sus manos sobre mis mejillas acercando sus labios más a los suyos. Dio el primer paso y yo estaba tan tensa, hasta que me relajé por completo ya que el beso iba a ser muy largo.
Pipe Otaño
—¿Te puedo preguntar algo, Ivette? — Dije pensando en lo que le iba a decir después de hacer esa pregunta—
—Claro, lanzá la pregunta —respondió—
—Me gustas —dije muy rápido por nervios—
—Perdona, ¿qué? —preguntó algo confusa—
—Ivette, me gustas —repití más lento-
—Pero Pipe... —interrumpida por un beso que calló su boca—
Ya puedo decir al Pipe del pasado que por fin probó sus labios, por fin pude hacerlo. Pero para profundizarlo más, puse mis manos en sus mejillas para que sus labios pudieran recorrer cada rincón de los míos. Me parece increíble lo que acabo de hacer, es como un: "Wow, estoy besando a una chica a la cual su novio le mintió durante 7 meses". Pero si dejamos eso de lado, sería un: "Besé a la chica con la que soñé y desvelé por ella", así suena mucho mejor (creo yo).
Me separé por falta de aire y la miré por un momento.
—Pipe... —pronunció dejando que sus palabras se aflojaran poco a poco mientras sus labios se entristecían poco a poco—
La vi de esa manera y lo único que pasó por mi mente es abrazarla fuertemente, porque soy, fui, y he sido un inútil dándole ese beso, pensando en que acaba de tener una ruptura con su pareja. Parezco la guinda del pastel, acabo de arruinar mi amistad con ella, más bien, todo.
En el abrazo ella sollozaba, mientras temblaba. Estaba inmuta, no correspondía a mi abrazo, nada.
—Ivette, perdón, he sido un inútil robándote un beso, sabiendo que acabas de tener una ruptura con tu pareja, he sido un sinvergüenza. Respeto si no quieres seguir hablándome o llevándote conmigo después de lo que acaba de pasar, es tu decisión —dije mientras apoyaba mi cabeza en un hueco de su hombro—
