Capítulo XVIII

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Jorge:

Las 48hs habían pasado y ella seguía sin abrir los ojos, los doctores nos dijeron que ya no podían hacer nada que solo podíamos esperar un milagro y eso es lo que esperabamos.

Estabamos a viernes, a tres dias del accidente, el domingo Danilo tenia un partido pero no quería ir, no importaba que le dijeramos él estaba negado, se lo veia desanimado apenas salía y apenas comía.

Nosotros siendo los adultos responsables, tratabamos de no decaer de seguír adelante y ayudar a Danilo en lo que podiamos aunque muy pocas veces el nos daba lugar.

Luna lloraba todo el tiempo, yo no sabia como calmarla casi siempre Anabella o Danilo me ayudaban, me sentia mal padre se suponía que era yo quien tenia que darle paz y seguridad, pero no lo estaba haciendo.

Vivia con el miedo de que mi hija creciera sin una madre y de que el uruguayo se quedará sin nada, porque para ser sinceros aunque nos tuviera a nosotros, él necesitaba de la persona que lo cuido desde el momento que lo conocio, de la unica persona que lo comprendió, apoyo, dio amor y protección, necesitaba de su mamá.

Los dias pasaron y estabamos a domingo a la madrugada, me levante de la cama decidido a levantar al uruguayo y llevarlo a la cancha a jugar, anteriormente habia hablado con Carlos y dijo que él iba a intentar convencerlo, pero no pudo su amigo ni siquiera le contesto el teléfono.

Camine hasta la pieza del menor y entre, este se encontraba dormido boca arriba tapado hasta el cuello.

-Danilo levantate, dale- lo movi un poco ganandome un quejido de su parte- dale nene- volvi a decir.

-Que quere'?, dejame dormi'- hablo poniendose de costado.

-No dale, hay que ir a la cancha, yo te voy a llevar- dije tirando de las sabanas, este se aferro a ellas.

-Ya dije que no voy a ir- hablo de manera sería.

-No te pregunte uruguayo, te dije que te voy a llevar, levantate- hable firme ya perdiendo la paciencia, saque las sabanas que lo cubrian logrando que se siente en la cama.

-No entede' que no voy a ir a ningún lado- hablo tratando de agarrar las sabanas otra vez, pero las saque completamente de la cama.

-Te pensa' que a tu madre le gustaría que dejes todo a la mierda y que lo unico que hagas es estar acostado- dije mirandolo, este se paro enojado y acerco a mi.

-Y a vo' que te importa eh?- grito empujandome- no so' mi viejo Jorge, no me rompa la' pelotas- volvio a decir y a empujarme- Valkiria esta muerta, hasta lo doctores lo dijeron, te pensa que sabe que hago?- lo agarre de los brazos tratando de que deje de empujarme, pero eso lo enojo más, forcejeaba para que lo suelte- soltame la concha de tu hermana.

Lo agarre más fuerte de los brazos, dejo de forcejear y apoyo su frente en mi pecho sollozando, lo solte despacio para después abrazarlo, era la primera vez que lloraba desde que Valkiria estaba en el hospital.

-No está muerta uruguayo- hable tratando de calmarlo, abrieron la puerta y vi a Cochi mirandonos con lastima, nunca habia visto a Danilo llorar de esta forma y menos abrazado a mi.

Mi cuñado se acerco a nosotros y acaricio la cabeza del chico haciendo que este lo mirará.

-Dale uru, tene' que ir y ganar por tu mamá- trato de animarlo- o vo' la va a aguantar quejandose cuando se despierte?- pregunto sonriendo, eso nos saco una sonrisa a los dos.

-Bueno, pero después del partido vamo' al hospital- pidio separandose completamente de mi- me voy a bañar- dijo agarrando ropa y saliendo de la pieza.

Matar Para VivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora