ᴛᴏᴄ ᴛᴏᴄ | ᴍɪᴄʜᴀᴇɴɢ

□ Extra. Inseguridades

Una de las partes más difíciles de vivir con el transtorno obsesivo compulsivo definitivamente deben ser las obsesiones y lo mal que pueden hacerte sentir. Al menos Mina lo piensa así.

Siempre se preguntó "¿Por qué mi cabeza le da tantas vueltas a todo? ¿Por qué pareciera que me esfuerzo por buscarle la quinta pata al gato?". Momo y Sana le han contado que, cuando era pequeña, ella decía que en su cabeza vivía un bully que disfrutaba de hacerle sentir mal, insegura, inútil, asustada.

─ Chaeyoung... ─ Murmuró Mina. Ambas se encontraban acurrucadas en la cama de la nipona, cubiertas bajo las mantas. Era un día fresco.

Al escuchar a su novia, Chaeyoung la miró y, con su brazo rodeándola, la acercó un poquito más a su cuerpo. Había algo en ella que, mientras más cerca estaba, más en casa la hacía sentir.

─ ¿Sí? ¿En qué piensas, Minari? ─ Preguntó la rubia, enredando sus delgados dedos por el oscuro cabello de la japonesa. Mina suspiró.

A veces, Mina creía ser muy intensa, molesta incluso, porque siempre le preguntaba a Chaeyoung lo mismo una y otra vez: ─ ¿Por qué te gusto? ─ Esa pregunta se repetía una y otra vez, todos los días que pasaban juntas, y había una razón.

En la cabeza de Mina había una voz que, cada vez que estaba tranquila con su novia, le decía "Lo está fingiendo", "¿Y si en realidad no te ama?", "La estás forzando para que diga que te ama", y cosas por el estilo. La atormentaban ¿Y si tenían razón?

─ Minari, mi linda Minari... ─ Chaeyoung se acomodó, acariciando sus mejillas y mirándola a los ojos, intentando transmitirle la sinceridad de sus sentimientos. ─ Me gustas porque eres una persona increíble. Me gustas porque, cuando te emocionas, pareces una niña toda tierna. Me gustas porque, cuando estás concentrada, te muerdes la lengua. Me gustas porque eres tú, con todas tus peculiaridades y singularidades. Eso es lo que hace que te ame más cada día.

Mina bajó la mirada, luchando contra las dudas que nublaban su mente. ─ Pero, Chaeyoung, a veces siento que... que mi cabeza no me deja disfrutar de esto. Siempre hay esta vocecita que me hace preguntarme si todo es real, si realmente merezco ser amada.

Chaeyoung acarició con suavidad el rostro de Mina, buscando conectar con ella de manera más profunda. ─ Mina, escucha con atención. Tú mereces todo el amor del mundo. Esas voces negativas en tu cabeza son tontas, solo mienten, y estoy aquí para recordarte lo increíble que eres. No tienes que ser perfecta para merecer amor, simplemente siendo tú ya eres suficiente.

Mina asintió, apreciando las palabras reconfortantes de Chaeyoung. La rubia continuó hablando con un tono tranquilizador. ─ Las obsesiones y las dudas son difíciles, lo entiendo. Pero estoy aquí para apoyarte en cada paso. Juntas podemos enfrentar esas voces y demostrarles que no tienen poder sobre nosotras, porque yo te amo y estoy dispuesta a hacer lo posible para hacerte sentir amada.

La japonesa miró a su novia con gratitud, sintiendo el cálido abrazo emocional que Chaeyoung le ofrecía. Era reconfortante saber que no estaba sola en esta lucha. ─ Gracias, Chaeyoungie. A veces siento que te abrumo con mis inseguridades.

─ Minari, nunca me abruman. Estoy aquí porque quiero estarlo, porque quiero compartir cada parte de ti, incluso las que consideras imperfectas. ─ Chaeyoung sonrió dulcemente. ─ Si hay algo que puedo hacer para ayudarte a sentirte más segura, solo dímelo.

Mina se acercó y abrazó a Chaeyoung con fuerza, sintiendo el amor y la comprensión que emanaban de ella. ─ Eres mi refugio, Chaeyoung. Gracias por estar a mi lado, incluso cuando mi mente se empeña en hacerme dudar de todo.

La pareja se quedó abrazada, compartiendo el calor y la seguridad que encontraban en la otra. A medida que pasaba el tiempo, Mina empezó a sentir cómo las garras de sus obsesiones se aflojaban, al menos por ese momento. Saber que tenía a Chaeyoung a su lado la llenaba de fortaleza y esperanza.

─ Minari, recuerda que no estás sola en esto. Somos el mejor equipo del mundo mundial, juntas superaremos cada obstáculo, incluso los que están en tu mente. ─ Chaeyoung le susurró al oído, dejando que sus palabras acunaran el corazón de Mina, quien sonrió y, sujetando las mejillas de su novia, le dió un dulce y duradero beso.

Ambas permanecieron allí, compartiendo mimos, besitos y palabras amorosas de vez en cuando. Estando juntas llegaban a un nivel de relajación al que jamás podrían llegar estando solas. Era perfecto, hasta que Mina frunció el ceño, arrugando la nariz.

─ Chaeyoung ¿Qué es ese olor? ─ Preguntó Mina, tapándose la nariz. La rubia soltó una risita, la misma que hacen los niños pequeños cuando hacen alguna travesura.

─ Perdona, Minari, es que me relajé de más...

─ ¡Chaeyoung! ─ Chilló la mayor, dándole un golpecito en el brazo y alejándose entre risas, mientras Chaeyoung tiraba de ella para que se mantuviera cerca.

─ ¡Oye! ¡Dijimos que superaríamos juntas los obstáculos! ─ Bromeó la menor cuando logró atrapar a Mina entre sus brazos, quien se retorcía entre risas.

─ Dijiste obstáculos, no tus pedos, Chaeyoung. ─ Ambas estallaron en risas. Al final del día, lo más importante es estar con quien haga feliz a tu niño interior ¿Verdad?

Todo parecía ir bien entre las dos enamoradas.

Este extra es solo un mini extra tipo slice of life JSKDKDK es que son tan tontas, las quiero.

Ya les daré un especial más elaborado kdkdkdk