⏰𝑳𝒊𝒌𝒆 𝒕𝒉𝒆 𝒇𝒊𝒓𝒔𝒕 𝒕𝒊𝒎𝒆✘

╰ XI ╯

Izuku ya había llegado a su casa, eran al rededor de las 10 de la noche, la pequeña Kazumi se encontraba dormida en sus brazos musculosos, realmente era una niña dormilona y no quería interrumpir su sueño pero debía darle su leche antes de que durmiera así que se dirigió hacia la cocina y dejó a la peliverde descansando en la sala, la acomodó de tal manera de que no se cayera y se dispuso a hacer su fórmula. Abrió la alacena de la cocina donde solían guardar los vasos y sacó un biberón de pequeño transparente con un conejito impreso a un lado de las medidas para el agua en el vaso.

Con la máquina donde servía el agua llenó el pequeño biberón hasta la mitad o bueno, un poco más de la mitad del vaso, dejó el biberón sobre el mueble de cocina y se dispuso a buscar en la alacena la fórmula de su bebé, una vez tuvo aquella lata color blanca con ligeras manchas color azul y un lindo oso decorando esta además de tener el nombre "Nutrileche" en grande quitó aquella tapa azul y sacó la mini cucharita que tenía en la fórmula, sacó 2 cucharadas de la fórmula y las echo dentro de el biberón para luego volver a meter la cucharita dentro de la fórmula, cerró esta y tapó el biberón, comenzó a agitar el biberón para que se mezclara bien la fórmula cuando escuchó que su bebé comenzó a llorar, se asomó por el marco de la cocina y pudo notar que esta aún seguía en el sofá, seguramente tendría hambre. Se acercó a ella aún agitando el biberón y besó su frente, la tomó en brazos y la acomodó en estos mismos para que estuviera más cómoda, una vez estuvo acomodada quitó uno de sus brazos y puso el biberón de la menor en la boca de Kazumi, esta comenzó a beber el biberón con la leche dentro gustosamente, Izuku miraba enternecido a la bebe quien disfrutaba gustosa de su leche, un impulso en Izuku hizo que comenzara a cantar cierta canción que Ochako le cantaba a Kazumi para dormir, era cierta estrofa pero... la amaba.

"Mi querida princesa, siempre estaré aquí
Tu sirviente fiel, yo soy, hermanos de corazón
Vine al mundo para darte total protección
Mi vida por ti daré
El tirano seré yo

Si pudiera lograr yo volver a nacer
Pediría jugar contigo otra vez..."

Para cuando termino de cantar pudo ver como la pequeña ya se encontraba dormida con su biberón aún en sus manitas, Izuku sonrió de forma sincera y se dirigió hacia su antigua habitación para poder recostar a Kazumi en su cuna, primero se dirigió al segundo piso donde estaba la habitación donde se estaba quedando últimamente, entró en esta para dirigirse a un mueble donde guardaba toda su ropa, abrió un cajón y de ahí sacó un lindo mameluco de conejito rosado, se lo puso con cuidado de no despertar a la pequeña y por último la recostó cuidadosamente sobre su cuna, le puso su chupete y la tapó con las cobijas y claro, no sin antes acomodar a su tierno acompañante de felpa a un lado de Kazumi.

Una vez todo esto estuvo listo Izuku se alejó observando a Kazumi con una sonrisa enternecido, amaba a esa pequeña con todo su corazón. Se aproximó a ese mismo mueble y sacó su pijama, se puso un conjunto de dos piezas, una era una playera blanca sin mangas y el otro un pantalón color verde Aqua, se recostó sobre su cama y sacó tu teléfono. Comenzó a buscar información sobre la enfermedad llamada "Hanaki"

Hanahaki Disease (花吐き病 (Japonés); 하나하키병 (Coreano); 花吐病 (Chino) ) es una enfermedad ficticia en donde la victima tose pétalos de flores cuando sufre de amor unilateral(Osea amor no correspondido). Se puede curar mediante la extirpación quirúrgica, pero cuando la infección es eliminada, los sentimientos de la víctima desaparecen para siempre. Pero en caso de que no se llegue a detectar a tiempo la victima que sufre de esta enfermedad tiene una muerte lenta y realmente dolorosa.

"Ficticia" esa enfermedad se supone que lo era pero si la adolescente del futuro le había dicho que esa enfermedad la había sufrido su Kacchan debía ser por algo, además cuando Eri vio a Bakugou también se había puesto emotiva... tal vez eso era real y Katsuki... Katsuki realmente moría de esa manera tan dolorosa pero ¿porqué no le había dicho a nadie? Claro, Katsuki es Katsuki siempre piensa que él puede solo con todo, con todos sus problemas. Eso era lo que hacía a Katsuki pues... Katsuki.