BORUTO THE LAST 『EN EMISIÓN』

Capítulo 16

Boruto rodó sobre la cama con molestia, era lamentable que Mitsuki durmiera con las ventanas abiertas, pero aún más que haya elegido ese lado, justamente.

—Ya amaneció —la voz de Mitsuki se escuchó desde su balcón, donde regaba sus plantitas.

—Lo sé —murmuró con ironía intentando cubrirse la cara.

—¿Irás a ver a Sarada?

—Son las seis con quince —respondió con un bostezo, acurrucándose en ese lado oscuro de la cama donde nada le molestaba—, y es lunes, los lunes despierta hasta tarde porque tiene guardia en la noche.

—¿Seguro? —dejó el rociador en la mesita de noche— Tu móvil no dejaba de sonar, tuve que silenciarlo.

Boruto abrió los ojos como si le acabaran de tirar un balde de agua fría encima, conectando todo de inmediato.

—Un momento... —se irguió, apoyándose con los brazos y observando su alrededor. Era la habitación de Mitsuki—¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué dormí contigo?

—¿Cómo? ¿ya lo olvidaste? —se acercó, entregándole el móvil— no quisiste regresar a casa por la noticia.

Boruto dudó un momento en prender la pantalla, tragó hondo y cuando lo hizo sus ojos se movieron con terror en cada texto, después cambió a pena y su cara se llenó de vergüenza al ver la foto. "No puede ser" se dejó caer en la cama de nuevo, con total negación.

"Es una broma, es una broma" con esperanza, volvió a encender la pantalla y cerró los ojos con un lamento al verlo de nuevo.

—Salen bien en la foto —le animó.

—Oh por favor, cállate.

Levantó el móvil con la mano, ahora para poder leer todo. Estaba seguro de que casi todos sus conocidos le habían mandado mensajes como "Que lindo" "Se miran bien" hasta que llegaba a sus amigos y se encontraba con miles de burlas, empezando por su adorado cuñado. No. No podía regresar a su casa, se negaba a poner un pie encima.

—Me puedo acostumbrar a este lado de la cama —volvió abrazar la almohada.

—Está bien, pero creo que hoy...

—¡Llegue! —la puerta se azotó contra la pared.

Por suerte no en pedazos, pensó Boruto. Pero después asimiló bien las cosas. ¿Qué? ¿Qué hacia ella ahí?

—¿Boruto? —preguntó ChouChou entre confusión e indignación— ¿Qué haces aquí? Deberías estar en la cama de Sarada, no en la de Mitsuki.

Boruto se volvió a cubrir la cara.

—¿Qué trae este? —le preguntó a Mitsuki.

—Una reportera le tomó una foto y está enojado porque la transmitió por todo Konoha y ahora todos no solo saben que sale con Sarada, sino que también se dan besos y...

—¡Ya! —le cortó bajo las sábanas.

—¿Konoha? —se carcajeó ChouChou— Shikadai fue a visitar a su tío y dijo que también ahí se transmitió. Yo diría que TODOS.

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Aunque a Boruto le parecía una magnifica idea quedarse encerrado, tenia un compromiso... oh bueno, algo como una promesa que, sinceramente, no le pesaba. Al contrario, todo pintaba ser un día relajado y bueno, sino fuese porque se sentía observado a pesar de que corrió lo mas de prisa por los techos.