Inmarcesible (Emily Prentiss x Fem) PAUSADA

Capítulo 14

–¿Listos? A mi señal nos moveremos.– Ordenaba el Agente de Italia, habían llegado hace dos minutos al pequeño pueblo de Pienza donde se encontraba el ignoto escondido en una gran Finca desde hace días, sin moverse, sin pedir nada solo ahí escondido esperando a que fueran por él o al menos eso creían los Italianos.

El agente movió su mano en un gesto que les indicaba que arrancaran con la operación, varios grupos de Agentes se separan para cubrir todo el terreno sin darle oportunidad a que se les escapara, se podía ver a dos helicópteros rondando los cielos sobre la Finca para informar de cualquier situación que pudiera surgir.

–Se ven dos personas en el área de la sala.– Informaba un agente revisando en su aparato, se podían ver dos siluetas a través de las imágenes que mandaba la cámara termografica que proporcionaban los helicópteros.

Emily se acercó para verificar lo que decia el hombre, mirando la imagen con demasiada concentración.
–Se mueven demasiado, esto es sumamente extraño, debemos de estar atentos a cualquier cosa, no sabemos si la otra persona pueda ser un cómplice o un rehen, el ignoto es demasiado listo ya sabe que venimos por el, debemos de tener cuidado por donde caminamos también.–

Todos asintieron al terminar de escucharla y avanzaron más hacia la Finca, Emily iba acompañada de otros tres agentes tomando el terreno de la trasera.

Caminaban con demasiada preocupación sobre los terrenos, dando pequeños pasos silenciosos y con sus armas siempre con mano firme, demasiados concentrados en todo lo que pasaba a su alrededor, lo cual para su preocupación estaba demasiado tranquilo y eso nunca era algo bueno.

–Equipo uno en posición para entrar a la casa, tenemos al ignoto y la otra persona a la vista es una mujer caucásico joven, el ignoto lleva un arma y le apunta a su cabeza, ¿Alguien tiene vía libre para un tiró?.– Preguntó el agente esperando que acabaron con esto rápido.

–Negativo.–Se escucharon decir las voces de los francotiradores.

–Vamos a entrar.– Confirmó el agente abriendo la puerta trasera para poder acceder dentro de la casa. Emily sentía que algo iba mal, el estúpido del ignoto no quiera volteaba a verlos apesar de que ya sabía que ellos estaban ahí. Tenía un mal presentimiento.

–Emily, no es el ignoto.– La pelinegra escucho a su jefa decirle por el auricular en su oído, sintió un escalofrío que le erizaron la piel en todo su cuerpo, ahora ese mal presentimiento lo tenía más fuerte.

Emily corrió atravesando la cocina sin importarle las órdenes del Agente Italiano que decía que esperara, le importaba una mierda quería saber si realmente no era el ignoto, quería creer que su jefa se había equivocado, quería creerlo y necesitaba creerlo.

Cuando la chica vio que los agentes entraban a la sala, ella salió corriendo dejando al hombre solo parado en medio de esa habitación.
Vieron a los demás agentes entrar por el frente entre ellos la Agente Dixon con una cara de confusión apuntándolo con su arma.

–¡Suelta el arma o disparo!.– Emily gritó más fuerte de lo normal y vio el cuerpo del hombre que no dejaba de temblar.

–Perfavore non uccidermi. Mi ha detto che se non l'avessi fatto avrebbe ucciso il mio figlioletto (Por favor no me maten, el me ha dicho que hiciera esto o mataría a mi pequeño hijo).– La voz de la persona delante de ellos se escuchaba rota, el hombre soltó el arma de sus manos para despues caer de rodillas al piso sin dejar de llorar. Emily pudo entender cada palabra del hombre.

Varios agentes se acercaron a la persona restregándolo en el piso para poder colocar sus manos detrás d esu espalda y esposarlo, cuando lo levantaron del suelo y Emily llegó hasta él viendo que exactamente no era el ignoto.
Todo esto había sido una trampa bien elaborada.