XXIV. That's when the lights turned on and you were just a lie.
Obi-Wan debió haber visto las cosas con claridad desde un principio.
Pero en realidad, no quiso hacerlo.
Y con aquella confesión, aquella amenaza evaporándose desde los labios de Anakin, supo que nunca volverían a ser lo mismo. Nunca. Ambos habían llegado muy lejos, él en concreto, permitiendo que su relación llegara a tal punto, dejándolos completamente a la deriva. Obi-Wan tragó saliva con lentitud, sintiendo dedos perniciosos alrededor de su nuca, acariciando el crecimiento de su cabellera. Los ojos de Anakin parecían más negros que nunca, con las pupilas dilatadas cual depredador saboreando a su presa antes de atacarla.
Si vislumbró un atisbo, un destello amarillo en las pupilas de Anakin, lo pasó por alto.
Los dedos de Anakin se apretaron dolorosamente alrededor del cuello de Obi-Wan, incrustando el metal contra la piel sensible, lechosa del Omega. Se sentía como si el metal pudiera fundirse contra su dermis, quemando toda la capa de piel para llegar hasta esta. De la misma manera que los amos marcan a su esclavo, de la misma manera en que el criancero quema a su ganado. Obi-Wan sentió cada vello de su cuerpo erizarse cuando Anakin apretó su cuello una vez más, haciéndolo alzar ligeramente su cabeza. Parecía haber olvidado como moverse y como respirar. El ambiente comenzaba a tornarse difuso ante sus ojos y, lamentablemente, la única ancla a la realidad era la sensación de dolor de su cuello y la negrura inhumana en la mirada de Anakin.
──No hablas en serio. ── dijo Obi-Wan, con la voz trémula y ahogada. Contra sus costillas palpitaba su corazón, atemorizado por aquellas palabras. Obi-Wan no podía creerlo. ¿No se suponía que ambos serían mejor que esto? ¿Qué un simple arrebato? Si tenía que ver con sus instintos, Anakin había prometido intentar... ser diferente. Lo había prometido y una parte de Obi-Wan, aquella profundamente apegada, que sentía y se aferraba, quiso haberle creído mientras lo consolaba entre sus brazos.
──¿Crees que estoy mintiendo?
──Por favor, no digas esas cosas, no digas...
Obi-Wan no podría soportarlo.
──Lo haría porque te amo, Obi-Wan. Es porque te amo que haría todo por ti. ── Anakin masculló, como si aquello le torturara. ──, tú me perteneces.
Obi-Wan se paralizó por unos momentos. Sin embargo, sus dedos se movieron temblorosos, sosteniéndose del brazo de Anakin. Hizo el amago de apartarlo, de generar distancia entre ambos, sacudiendo su cuerpo con vehemencia, pero él no se lo permitió.
──No Anakin, no aquí.
──Sí. ── insistió el Alfa, como si no estuvieran fuera de un recinto público, como si nadie pudiera verlos ahí. Obi-Wan contuvo su aliento. ──, ... aquí, Obi-Wan.
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Grab your wrist | Anaobi
RomanceLidiar con un alfa no es fácil. Especialmente cuando es tu padawan. Los últimos cien años los omegas se han vuelto una casta escasa, sobre todo los omegas varones, volviéndose aún más valiosos en un mundo plagado de Alfas y Betas. El tráfico de Omeg...