enamorada de mí profe 2 temporada

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El grito de emoción que pegó Mía… hizo que Elena se cubriera los oídos con las manos y sonriera encantada de verla tan feliz…

Elena: Mía… tranquila… los vecinos pensarán que te estoy matando y seguro Mike querrá que le dé cuentas de ello… 

Mía: es que… no… no lo puedo creer… de verdad volverán?? Vol… volveré a ver a mi princesa?? (con lágrimas en los ojos)

En ese momento Elena se dio cuenta de quién le dolía más a Mía… y solo suspiró con una sonrisa en el rostro…

Elena: la quieres mucho, cierto??

Ella aún con la emoción no la había escuchado…

Mía: cómo?? 

Elena: jaja… te veo muy feliz…

Mía: cómo no estarlo?? No sabes… cuántos años he esperado esto Elena…

Elena: mmm… 7?? 

Mía: bueno… sí… era un decir…

Elena: jaja… sí, estás muy emocionada, verdad??

Mía: no te imaginas cuánto… es que… ne… necesito volver a verlos, a los dos… explicarle a Miguel tantas cosas y que… si Pao me recuerda… sepa que yo tampoco la he olvidado…

Elena: sin mencionar que… tendrás que decirle a ella y a su papá que tiene un nuevo hermanito… ya ni tan nuevo…

La sonrisa de Mía se transformó en un rostro preocupado mientras asentía…

Mía: cómo… cómo crees que lo tomen??

Elena: Paola bien… a pesar de su edad… sigue siendo una niña en su corazón…

Mía sonrió muy feliz… mientras la seguía escuchando…

Elena: y Miguel… (suspiro) pues… se va a enojar, no te puedo mentir…

Mía asintió un poco más seria…

Elena: … pero estoy segura de que… querrá mucho a su hijo… cómo… cómo se los vas a decir??

Mía: sabes…?? A pesar de tantos años que han pasado… nunca me he puesto a pensar en eso… yo… yo solo deseaba su regreso ansiosa… pero no tengo idea de cómo decirlo… además… Mike no sabe que tiene una hermana… solo sabe de su papá… no quiero que él también se enoje…

Elena: eso no pasará mi niña…

Mía sonrió viendo a Elena… a pesar de todo lo que había pasado… en esos años Elena se había convertido en una segunda madre para ella… y en la mejor abuela que Mike podría tener… ya que con su “tía” ahora madrastra… jamás podía contar… y menos desde que se había llevado a su papá a vivir a Londres…

Mía: gracias por ser tan comprensiva… yo… yo me sentí muy sola desde que supe de mi embarazo… y tú estuviste ahí en todo momento… a pesar de que… pues… el… el señor Alfonso nunca me quiso mucho…

Los ojos de Elena se llenaron de lágrimas… ya habían pasado 5 años y medio de la muerte de su esposo… y aún no dejaba de extrañarlo…

Mía: perdón… perdóname, yo no quise…

Elena: no… tranquila, no pasa nada… y, pues… (suspiro) tú sabes que desde su nacimiento… Mike se convirtió en la adoración de mi marido… aunque no haya durado mucho…

Mía: oh… Elena, lo siento tanto…

Mía se acercó para abrazarla… abrazo que ella correspondió con una sonrisa triste…