Su vida siempre había sido extrañada; su madre le había prohibido acercarse a los bosques, tenía prohibido interactuar con cualquier persona a menos que su madre le diera permiso de hacerlo y muchas cosas más, pero, sin lugar a dudas lo más extraño siempre había sido que tenía prohibido acercarse a su tía.
Ella jamás logró comprender hasta ahora, hoy 17 de Septiembre lo comprendía.
Y corrió, claro que corrió, tenía miedo y quería sobrevivir, no quería seguir en esa casa de locos, no quería volver a ver a esos seres nunca en su vida, pero claro, tres de ellos la ayudaron a huir. No querían que ella fuese parte de ese mundo.
Hachishakusama sonrió divertida al notar que Marinette corrió hacía el bosque, ya se imaginaba la cara de Slenderman al enterarse de que la menor huyó. Ella más que nadie sabía que la joven no estaba preparada para formar parte de ese mundo, tal vez más adelante sí, pero actualmente si ella se involucraba podría terminar mal.
Dejando de lado el hecho de que Marinette logró huir se teletransportó para buscar a Splendorman, claro que le diría sobre lo que acababa de ocurrir.
<<->>_<<->>_<<->>_<<->>
---No, no, no, no, NO, ¡AGH!---Marinette entro en desesperación al notar que estaba pasando por el mismo lugar por sexta vez. Las lágrimas comenzaban a asomarse por sus hermosos ojos, sus labios temblaban al igual que su cuerpo, su visión comenzaba a tornarse borrosa debido a las lágrimas formadas y su respiración estaba agitada. Cada segundo se hizo infinito, cada ruido en aquel bosque era un martirio para su cabeza que parecía que pronto estallaría, y de golpe todo se calmo...
Uno...
Dos...
Tres...
---¡¡CORRE!!---Escucho una voz a lo lejos.
Al escuchar esa voz el rostro de aquella joven comenzó a humedecerse con lágrimas que caían de aquellos hermosos ojos que la adolescente portaba.
En medio de aquel oscuro y tétrico bosque la joven freno de golpe y miró a la zona donde aquella voz se escuchó.
---¡¿Qué haces, niña?!, ¡CORRE!---Exclamó aquella voz masculina sonando algo molesto al ver que la joven no se movía de donde estaba. Él estaba a unos cuantos pasos de ella, y Marinette corrió, solo que no a donde todos se esperaban, ella corrió hasta donde aquella persona se encontraba y lo abrazó.
Los corazones alborotados de ambas personas que se abrazaban en aquel bosque podían incluso ser escuchados por quien estuviese cerca de aquella zona.
---Tienes que huir... aquí no es seguro para ti---Dijo el masculino mientras intentaba contener su propio instinto de él mismo encerrarla en un lugar donde nadie jamás la encuentre.
---Sería egoísta, te dejaría a ti y él puede hacerles daño por mi culpa---El tono de voz de la joven sonaba bastante quebrado, estaba a nada de largarse a llorar.
---Hay veces que hay que ser egoísta---Jeff separo con cuidado a la joven de sus brazos---Aquí derecho, a dos minutos, hay un portal, tienes que atravesarlo---Él no quería separase de ella y sus ojos miraban con un brillo de tristeza a la joven delante de él. Ella también lo miraba, su mirada reflejaba temor, anhelo y tristeza. Ambos estaban cercas de sus rostros, sus respiraciones se detuvieron en una fracción de segundos mientras continuaban mirándose, y Jeff finalmente acortó la distancia dejando un suave y tierno beso en la frente de la joven---Vete, vete antes de que me arrepienta---Se separo definitivamente de ella---¡VETE AHORA, NO VUELVAS NUNCA!---Exclamó al sentir que alguien se acercaba a ellos, Marinette lo vio por última vez.
---Te quiero---Dijo en un suave murmullo que Jeff escuchó y con una suave sonrisa triste y las lágrimas cayendo por sus ojos se fue corriendo mientras era seguida por su Kwami.
---Jeff...---Aquella voz a espalda de Jeff lo hizo darse vuelta.
<_>-<_>-<_>-<_>-<_>
Marinette sintiendo una gran culpa y un gran pesar en su interior corrió, y finalmente llegó a donde Jeff le dijo. Su cuerpo traspasó el portal y debido al cansancio tanto físico como mental su cuerpo colapso del otro lado del portal desmayandose al instante.
Algo suave la levanto de la hierva de aquel bosque y la llevó hasta casi la salida de este dejándola ahí y desaparenciendose entre la oscuridad.
Ella no merecía seguir sufriendo a manos de Slenderman. Ella merecía seguir con su madre, padre adoptivo y amigos. Ella merecía tener una vida normal.
ESTÁS LEYENDO
Marinette Es La Hija De Slenderman
FanfictionLos proxys siempre la vigilaban sin que ella se diera cuenta pero todo cambio al convertirse en Ladybug, haciendo relucir sus habilidades y poniéndose más atenta a lo que ocurría a su alrededor, haciendo que empezara a notar aquellos "detalles", en...