AFTER: en mil pedazos.

𝗟𝗮 𝗲𝗻𝗲𝗿𝗴𝗶́𝗮 𝗾𝘂𝗲 𝗺𝘂𝗲𝘃𝗲 𝗲𝗹 𝗺𝘂𝗻𝗱𝗼.

—Entonces, ¿esposo? —Murmuró Isaac con burla encendiendo el carro y dándole arranque—.

—Si.. —Solté un suspiro pesado ante el recuerdo de las palabras anteriores de Daryl—.

—¿Por qué no luces contenta? —Preguntó Isaac prestándole mucha más atención a mi rostro— Pensé que ustedes eran pareja. —Dedujo— Oh, espera. —Hizo una pausa— ¿Eres de esas chicas a las que les aterra el matrimonio?

—¿Qué? —Lo voltee a ver totalmente incrédula ante sus palabras— No, yo amo a Daryl. —Asegure— En serio lo hago. Pero.. Isaac, ¿sabes cuanto tiempo espere para que ese hombre me tomara en cuenta como su pareja? —Bufé— Mucho, créeme, de echo, creo que lo sigo haciendo, ni siquiera me ha pedido la mano o noviazgo, él se salto esa parte y fue directo al "soy tú esposo". Quedé como estúpida en ese momento.

—¿Por qué? —Preguntó—.

—¿Por qué? —Repetí— Dormí al lado del hombre que mató a mi hijo.. —Murmuré— Fui cercana a él, me deje abrazar por él y no lo mate.. ¿por qué no lo hice? —Me pregunté— Por pensar que el imbécil había cambiado.. porque dentro de mi aún está esa pequeña parte en la que creo que todos pueden tener una segunda oportunidad... —Suspire— Esa parte ahora ya no está, me equivoqué y no merezco el perdón de nadie, no merezco el perdón de Daryl, no merezco.. nada de él, ni esas palabras tan.. lindas como un simple " te amo", no merezco nada de nadie. —Solté un suspiro pesado viendo la moto de Daryl colocarse a nuestro lado— ¿Sabes qué es lo peor? —Murmuré en un hilo de voz— Que me gusto.. estar ahí, con él y su maldita compañia, me gusto.

Solté un grito ahogado ante el movimiento brusco echo por Isaac ante mis últimas palabras.

—¡Mierda! —Grite— ¿¡Estás loco!?

—¿¡Te sentiste bien con Negan!? —Grito con duda ignorando mi pregunta— Espera, ¿durmieron juntos?, ¿cuando él te dejo su habitación no te dejo una a ti?

—No. —Le respondí— Él dormía a mi lado todas las malditas noches, compartíamos baño y una vez llegue a afeitar.. —Murmuré recordando la escena— ¡Oh! —Recorde— Me abrazaba.. me abrazaba mucho, más cuando dormíamos. —Hice una pausa— Por mi cabeza paso la posibilidad de besarlo... muchas veces, casi lo hago, el último día que estuve en el Santuario, el día en el que me di cuenta que él solo jugaba con mi mente. No lo hice, no podía caer más bajo, no podía traicionar de manera imperdonable a Daryl, no más de lo que ya he echo...

Isaac no volvió a decir una palabra, apostaría todo lo que fuera que en este momento está procesando toda la mierda que le dije, estaba buscando las palabras correctas para decirme lo estúpida que llegue a ser.

Le di una pequeña sonrisa a Daryl en cuanto recibí una mirada por su parte, él solo me dió un asentimiento de cabeza antes de volver a colocarse por detrás del carro en el que Isaac se encargaba de llevarnos hacia el puesto de avanzada, donde estaban las armas y las personas del Reino. Carol entre esas personas. Probablemente se convierta en una reina o algo así, para nadie es un secreto que el Rey Ezequiel está interesado en ella, esa mierda es completamente adorable.

—Bueno.. —Murmuró Isaac después de un rato de analizar todo— El miedo es el pase directo a nuestro mayores errores.

—No tenía miedo.. —Murmuré totalmente segura— Si lo tuve cuando vi la muerte muy cerca.

—Él estuvo ahí. —Se encogió de hombros— Siempre estuvo ahí, te ayudó y te mantuvo protegida, justo cuando tenías miedo.

Fruncí el ceño ante sus palabras, tenía razón, tenía toda la maldita razón.