Spider-Man: Hora de aparearse

Capítulo 16: Hora de aparearse con... las mutantes y una mafiosa

Con el prota cachondo de esta historia...

Vemos como este terminaba de beber su agüita para recuperarse, luego de empezar el día haciendo el delicioso con Yelena.

Se relajo en su sofá para pensar las cosas.

Peter R: Ufff, empezamos bastante bien el día, ahora dos Black Widow estuvieron satisfechas conmigo.

(Yo: A).

Peter R: Me imagino la cara que ha de tener Peter PG a todo lo que estoy haciendo jajaja.

(Yo: Tranquilos gente, Peter PG sigue vivo. Solo sigue encerrado dentro de su mente. Pero, él si es testigo de todo lo que está haciendo Peter R).

Peter R: Pero, ahora, ¿Quién puede seguir? Digo, no estaba entre mis planes comenzar el día con Yelena, pero, de todas formas, lo disfrute. ¿Pero, ahora quién puede ser?

Mientras Peter R, pensaba y pensaba quién sería la siguiente en pasar por la Spider-Conda, al fin fue iluminado y se decidió quien seguiría.

Peter R: Bien, es hora de visitar a las mutantes de la mansión X. Pero, antes, debo de llevar algo de mi empresa para eso.

Se tomo una ducha, luego se cambió, se puso su anillo, recito las palabras correctas para abrir un portal hacia su oficina y ahora sí, lo paso para buscar lo que necesitaba en su oficina.

Entro a su habitación secreta, y ahí encontró lo que estaba buscando. Pero, al ver que aún no estaba terminado, se puso a terminarlo.

...

En otro lado...

Oliva se había despertado y se cambió, mientras que organizaba el lugar, aunque sentía que los eructos le empezaban a seguir dando, cosa que ya no le parecía normal.

Pero justo, en ese momento, alguien abre la puerta de aquella, y ella al voltear ve que en realidad son Ana y Francine.

Olivia: Hasta que por fin aparecen, las estuve esperando a que me dijeran algo..., ¿por qué están caminando así?

Ana: No creerás lo que te diremos.

Olivia: ¿A qué se refieren? ¿Qué pasó?

Francine: Pues, digamos que si descubrimos información que puede que te interese sobre Spider-Man, como su identidad verdadera.

Olivia: ¿En serio?, excelente. Pero, eso no responde el, ¿por qué están así?

Ana y Francine se miraron y un leve sonrojo se puso en sus caras. Pero debían si o si a Olivia, ya que luego debían de decirle que les cree que unas pastillas anticonceptivas.

Ana (levemente sonrojada): Pues... nosotras... al descubrir su identidad, vimos como este... - se aclara la garganta – tenía relaciones s3xu4les con sus 3 compañeras arácnidas y con la oficial Watanabe.

Olivia: ...

Francine (levemente sonrojada): Y pues... también... con nosotras lo hizo.

Ana (levemente sonrojada): Y esa es la razón por la... hemos estado caminando así...

Olivia: ¿Ustedes... se dejaron... dejaron que ese sujeto se aproveche de ustedes?! ­– con un tono de voz molesta e indignada les dijo -.

Ana: Juro que intentamos separarnos de él... pero...

Francine: Había algo que nos hacía que... siguiéramos y cayéremos rendidas al impulso.

Olivia quería criticarlas, pero en si noto que ella paso por eso mismo. Y no podía verse algo hipócrita.