Ya por la mañana, Edward se despertó porque se movía su cama, levantó los ojos y vio a la Caballera de fuego levantada delante suya. Se asustó y cogió el endredon porque no llevaba camiseta-¿Porque no has llamado a la puerta?
-Va, levántate y vístete... no hace falta que te tapes por no llevar camiseta, si fueras mujer lo entendería- dijo mientras se va al balcón y hizo caso omiso a lo que le dijo.
Él se levantó mientras que la miraba y se vistió. Ella llevaba una camiseta de cuello largo de color rojo con un pantalón oscuro, con el pelo recogido en una coleta alta y unos pendientes de aro dorados. Él se eligió una camiseta larga y fina de color verde con unos pantalones vaqueros.
Se fueron a una cafetería de starbucks para coger un café y fueron caminando hasta llegar a un lugar cerca de la costa, cerca del Opera House, estaban solos, menos por unos niños jugando con un frisbie muy atrás de ellos. Se sentaron en el césped y dijo Edward con algo de seriedad:
-¿Vas ha poderme contar ya lo que te pasó con ellos o sus planes? Sé que será algo no sé...
-Si te lo voy a contar, mientras que nos movemos.
^W^
Esta es mi historia en Ala Negra y de mi infancia.
Me llamo Danielle King y soy la hija de resorts King, una compañía de hoteles de Inglaterra. El viernes 13 de septiembre de 2019, un día soleado, estaba yo en mi casa con mis padres, yo tendría unos seis años. Mi madre se llamaba Elaine, tenía el pelo ondulado y oscuro. Llevaba como siempre un vestido que usaba por casa de color blanco. Y mi padre Jess, tenía el pelo corto y rubio. Llevaba una camisa fina y unos pantalones vaqueros. Ellos estaban jugando conmigo a las muñecas en el salón cuando pasó todo.
Alguien entró con un cuchillo y una pistola dentro de casa, me apuntó a mí, entonces mi padre se levantó y me tapó por delante y dijo:
-Déjala en paz- su voz suave y cálida sonaba grave en ese momento. Mi madre me protegía detrás de mi padre, atrapándome en un abrazo mientras que yo estaba asustada, no sabía quién era pero si sabía lo que tenía en la mano y eso no era nada bueno.
Entonces se escuchó el disparo y mi padre cayó al suelo mientras la sangre le manchaba la camisa. Mi madre me soltó y me pidió que me escondiera, que llamara al número que me aprendí ( el 999).
-¡Tu, sucio animal, como te atreves!-Y se abalanzó para pegarle, pero él fue más rápido. Le dió en el blanco con el cuchillo. Sus últimas palabras fueron susurros que llegaron en mis oídos mientras que estaba debajo de la mesa.
-Huye Danielle... Por favor.
El hombre miro una pulsera que tenía debajo de su abrigo el cual tocó con un dedo y salió un hombre virtual de ella.
-Señor, el trabajo esta hecho, pero ha habido un pequeño percance.
-¿Qué ha sucedido?- dijo con seriedad el hombre virtual.
-La niña estaba con ellos. ¿Qué hago con ella ?
-En la investigación de los King hablaba de los dotes impresionantes de la niña...mmm... Llévala al cuartel, podremos hacer de ella una gran asesina.
OwO
-Entonces.¿ Te raptaron porque el escondite era muy fácil y te llevaron a la sede no?- dijo Edward mientras iban caminando por el parque.
-Si, la verdad es que cogí el peor escondite y me taparon con una bolsa de tela en la cabeza. Además me llevaron a la segunda sede, no a la primera. Intenté escapar tantas veces que tengo la espalda llena de cicatrices por los latigazos de castigo y me pusieron las pulseras.
>>Aún sigo con la sed de venganza, tuve que matar por obligación, solo para que no me matarán a mí,...-Los ojos de ella se llenaron de lágrimas y se tapó la cara con las manos.-Pero me gané su confianza y creo que podré con ellos si tengo fuera ayuda.-Dijo apartando su última lágrima caída y siguió hablando.
-Hace un año se unieron a mí dos personas para salir de allí, están ahora preparándose para el siguiente ataque, que les toca por primera vez a ellos.
Antes de que diera un paso más, Edward,le cogió de la mano, y dijo:
-Aún no me has dicho el porque te llaman así.
-Mi primer asesinato fue el de Tatsu Kamura, en Tokio; el era un militaría y un director del museo más grande de Tokio. Me eligieron a mí por primera vez y lo maté con una de las espadas que guardaba, me la quedé para recordar el dolor que le hice pasar. De normal la llevo, pero como ves la tengo en otra parte.-Al final se levantó y le dijo Edward-No pares a Rick y Rey por favor, son los únicos que me pueden ayudar con las pulseras, te mandaré la dirección.
-Lo intentaré, creo que Connor no me lo dejara pasar.
Cuando esta de nuevo en el hotel, llama a la puerta de Connor.
-Tenemos que irnos Connor, me han dado otro soplo.
-¿A donde? Estoy cansado de moverme por todo el mundo...
-Nos vamos a Sao Paulo.
ESTÁS LEYENDO
Ala Negra
AcakEdward, un inspector de la Comisaría de Londres y su compañero Connor se adentraron en las escenas del crimen de una organización Mundial de asesinos conocida como Ala Negra. Una historia en la q la muerte y la sangre es un camino y la vida normal...