Violentrometro (A Mi Manera), Mordecai Heller x tú

Capítulo 10 | Acto forzado. | ✓

— No permitas que nadie abuse sexualmente de ti. Es tu cuerpo y se debe dar el consentimiento adecuado. NO dejes que nadie se aproveché de ti.

Mordecai era un individuo violento con problemas de ira y no le importaba si tenía que lastimar a su esposa para mostrarle quién tenía el control aquí. Mantuvo sus garras fijas en sus caderas y gruñó de frustración, iba a enseñarle una vez más a ser obediente. Ella era suya y tenía que hacer lo que él le dijera.

-"¡B-basta!"

A él no le importaba, no la estaba escuchando. Estaba demasiado enojado para escuchar sus gritos de ayuda, lo único que le importaba era asegurarse de tener control sobre ella nuevamente. Él gruñó de nuevo en respuesta y hundió más sus garras, sus intenciones quedaron bastante claras.

Las embestidas de Heller eran rápidas y brusquedas.

Mordecai todavía estaba furioso, la idea de perder el control sobre T/N era demasiado exasperante para él. Continuó a tal velocidad que no dejó de preocuparse por sus sentimientos. Cuando terminara probablemente se sentiría avergonzado, pero por ahora lo único en lo que podía pensar era en cómo hacer que ella escuchara.

Ella maulló fuertemente, sus garras se expandieron cuando al cabo de unos minutos el eyaculó en su interior.

Mordecai finalmente se apartó y la miró con disgusto y desdén, odiaba escuchar sus sonidos. No quería recordar este momento, nunca.

-"Eso es lo que te pasa por desobedecerme".

Ya no podía soportar estar cerca de ella, quería irse y no volver a verla nunca más. Pero al mismo tiempo, ésta era la mujer que amaba.

-"No puedo creer que me haya casado contigo..."
Estaba perdido en emociones conflictivas en este momento.

Ella estaba adolorida. Intentó moverse y de su intimidad comenzó a salir un poco de sangre.
El acto forzado había sido demasiado brutal para la hembra.

-"Maldita sea... Te dije que nunca confiaras en lo que quiere una mujer".

Aunque se odiaba a sí mismo por lo que le había hecho, su necesidad de mantener el control sobre ella era demasiado fuerte. No le importaba en absoluto si ella se sentía herida, sólo quería darle una lección por desobedecerlo.

Decidió salir de la habitación, demasiado disgustado consigo mismo para mirarla a los ojos en ese momento.

Lágrimas salieron de los ojos de la fémina.

-"Qué bueno que estás llorando, eso es lo que pasa cuando no quieres escuchar".

Al salir de la habitación sintió un poco de satisfacción por castigarla, pero la ira poco a poco fue reemplazada por vergüenza y culpa. ¿Qué había sido de él? ¿Era realmente así como iba a ser su relación a partir de ahora?

-"Estoy cansado de ti. ¿Lo sabías? No tengo ninguna razón para preocuparme por ti, solo eres una plaga que no puede comportarse. Será mejor que cuides tu tono de ahora en adelante, o si no... Te lo advierto."

Ella al intentar levantarse, cayó al suelo, sentía un dolor punzante e insoportable en sus caderas.

-"¿Ves en lo que te metiste? Tuviste que ser tan testarudo como para no escucharme".

Mordecai se giró para mirarla mientras caminaba hacia ella, estaba molesto por su debilidad en ese momento. Ella siempre fue tan fuerte y capaz, ¿por qué ahora no podía ser así?

-"Siempre has sido tan débil. Es tu culpa".

De repente estaba cansado de lidiar con ella y se sentía culpable de lastimarla, pero su necesidad de control era demasiado fuerte.