El poder de la luna [Truten]

Capítulo 9: Definiciones y distanciamientos

Trunks, Goku, Yamcha y Krillin veían a Vegeta y a Goten luchando casi como si su vida dependiera de ello, mientras Gohan se encontraba sentado en el suelo tratando de recuperarse de semejante golpe que le dio su hermano luego de que el pelilila tratara su herida.

"¿Desde cuándo Goten es tan... salvaje para entrenar?" Preguntó Krillin totalmente impresionado.

"Tal parece que lo aprendió de Vegeta." Goku señaló serenamente con su vista fija en el par que luchaba. Trunks, por su parte, estaba completamente hipnotizado viendo al Son menor. Había algo salvaje, sí, pero también la forma en como se movía, las piruetas que hacía... Tenían una gracia y elegancia única desde su punto de vista.

De repente, la lucha se detuvo mientras ambos se miraban con cautela tratando de recuperar el aliento. Se examinaron con la vista por varios segundos hasta que Vegeta hizo un movimiento rápido, apareciendo detrás del menor en un instante, sin darle tiempo de esquivar una avalancha de combos. En su lugar, Goten se dio vuelta para enfrentarlo e intentó protegerse poniendo sus brazos en forma de cruz frente a el. Podía notar que ambos estaban agotados, después de todo llevaban varios minutos luchando con un poder bestial. Sin embargo, era Goten quien parecía estar sufriendo más los efectos del cansancio.

Vegeta, sin explicación, detuvo su ataque.

"¿Agua?" Le preguntó a Goten pesadamente, ante lo que él asintió también respirando con dificultad. "Ok, vamos." Pero su ex pareja lo detuvo cuando Vegeta hizo el ademán de ir con él.

"No, no... Yo traeré agua para ambos. Tú puedes seguir entrenando." Le dijo dedicándole una sonrisa dulce. "¡Vuelvo en un momento!" Goten exclamó caminando rápido, casi dando saltitos, hacia la puerta del lugar.

"Al menos Goten está contento después de casi romperme la cabeza..." Masculló Gohan algo ofuscado.

"Puede que esto le sirva porque está liberando frustraciones peleando." Krillin propuso mientras miraba a los otros guerreros Z. Gohan lo quedó viendo con los ojos entrecerrados.

"Eso no me hace sentir mejor."

Goten volvió no mucho después con un gran botellón de agua que le entregó a Vegeta.

"Bulma dice que la comida está casi lista y debemos ir." El príncipe asintió con la cabeza para luego seguir tomando del botellón en lo que caminaba fuera de la sala de gravedad. El Son menor después se dirigió a ellos. "¿Vienen?" Los cinco asintieron y partieron junto a él fuera de la habitación hacia el patio de la casa, donde su madre había instalado mesas y sillas para servir su banquete.

Trunks se sentía insatisfecho... Quería llamar la atención de Goten, quería hablar con él, compartir con él... Pero parecía ser que el repentino interés de su ex pareja por las artes marciales había hecho que luchar contra su padre fuese un panorama más entretenido que pasar tiempo con él.

Al llegar al punto de reunión, la lesión que tenía Gohan no pasó desapercibida.

"¡Gohan! ¡¿Qué te pasó?!" Milk gritó corriendo hacia él luciendo muy preocupada.

"Goten le pateó el trasero." Vegeta aportó divertido, y vio como su bello castaño sonreía orgulloso.

"¡No es gracioso!" Los regañó la pelinegra. "Gohan podría tener una contusión."

"Tranquila, mamá... Estoy bien." Le aseguró su hijo mayor con una sonrisa.

"Parece que estuvo intenso el entrenamiento, ¿ah?" Bulma comentó, intentando calmar los ánimos para disfrutar de la velada.

Goten, al contrario de lo que había pensado cuando aceptó a regañadientes, se la estaba pasando bien en la reunión de la peliazul. El estrés que lo atormentó por más de dos meses se había apaciguado considerablemente con las jornadas junto a Vegeta. Era como si no tuviese que reprimirse, y eso era tan liberador. Además que como a la voz parecía agradarle el príncipe, no tenía esa tendencia explosiva cuando estaba con él, lo que también resultaba bastante tranquilizante.

Cuando terminó la ración de carne que tenía en su plato, se levantó de su asiento para ir por más a la parrilla que se encontraba encendida. Mientras elegía un corte, el aire caliente sobre su cara aparentemente le afectó sobremanera. Sintió como un fuerte mareo lo atacaba, por lo que sostuvo su cabeza y cerró los ojos en un inútil intento por reducir su malestar.

"¡Goten!" Escuchó de repente, para que luego sintiera como tironeaban su polera por la parte posterior del cuello. Cayó, sentándose pesadamente en el suelo, y cuando abrió los ojos notó que Vegeta estaba junto a él mirándolo con el ceño fruncido. Luego se fijó que el hombre aun sostenía su prenda con fuerza.

"Ten más cuidado." Dijo enojado soltándolo al fin de mala gana y luego se puso de pie para alejarse de ahí.

"¿Estás bien, Goten?" Volteó la cabeza hacia el origen de la voz, donde encontró a Trunks, junto a Milk y Gohan, mirándolo con preocupación.

"Sí, creo que solo fue un mareo. No es gran cosa." Explicó rápidamente, mientras sonreía con suavidad.

"Casi te desmayas sobre la parrilla." Habló Gohan, quien se notaba intranquilo. "Pudo haber sido grave si el señor Vegeta no hubiese reaccionado a tiempo."

Al oír esto, Goten volvió a mirar hacia la dirección del príncipe saiyajin mientras se ponía de pie.

"Definitivamente es un verdadero guerrero saiyajin."

"Sí que lo es..." Murmuró sonriendo.

"¿Dijiste algo, Goten?" Pero el joven no le respondió a Trunks. En su lugar, partió hacia donde se encontraba Vegeta sirviéndose un vaso con jugo.

"Señor Vegeta..." Le llamó la atención. El hombre lo miró aun molesto. "Quería agradecerte por-"

"No hagas estupideces otra vez." Vegeta lo regañó.

"Lo siento." A pesar de su disculpa, no podía parar de sonreír. El mayor lo miraba de forma extraña.

"Espero que no hayas heredado la mala costumbre de la madre de Kakaroto de tener que salvarte a cada rato..."

"¿La madre de...? ¿Hablas de mi abuela?" Goten preguntó bastante interesado, ya que nunca había escuchado sobre ellos.

"Sí. Si no hubiese sido por Bardock-"

"¿Quién?" Vegeta volteó los ojos antes de responder a su pregunta.

"Tu abuelo." El joven asintió para alentarlo a seguir con la historia. "Si no hubiese sido por él, ella habría vivido bastante menos de lo que alcanzó a vivir." Vegeta lo seguía mirando con algo de incomodidad. "Rayos, te pareces demasiado a ella..." Masculló.

"¿En serio?"

"Tal vez sea por el cabello, o porque eres híbrido, no lo sé... Pero te pareces demasiado, y es perturbador." Pronunció el hombre. "Ella -Gine, se llamaba- era una hembra extraña. Era sensible y generó un gran apego hacia Bardock y sus crías, muy similar a como lo hacen los humanos."

"Ah..." No sabía bien que responder ante esto... "Bueno, solo quería agradecerte."

"Sí, sí, como sea..." Vegeta murmuró antes de partir con su vaso a la mesa donde compartía el resto.