El poder de la luna [Truten]

Capítulo 4: Negaciones y consecuencias - Parte 1

"Te amo mucho..."

"Yo también te amo, Goten..." Trunks respondió, aun recuperando el aliento por la sesión que acababan de tener. Sintió como el cuerpo del castaño se relajó considerablemente, y al fijarse mejor notó que estaba profundamente dormido.

De la forma más delicada posible, acomodó al joven para recostarlo y taparlo con las sábanas. Se quedó mirándolo detenidamente por varios minutos. Goten estaba actuando distinto. No era malo precisamente, pero era un hecho que había algo distinto en él.

Después de depositar un beso en la frente del otro, partió a su baño privado para poder refrescarse y asearse antes de acostarse, cuando se fijó en su reflejo.

"Ay, mierda..."

Su cuello tenía aun más cicatrices que la vez anterior, pero lo realmente malo era que los cuellos de sus trajes habituales ya no serían capaces de esconder la evidencia. Él, como heredero de la Corporación, no podía aparecer en el trabajo luciendo las marcas que había dejado su pareja en una caliente noche de sexo... ¿Cómo haría para cubrir eso hasta que sanen?

Lanzó un suspiro agotado. Tendría que hablar con Goten y pedirle seriamente que sea más cuidadoso la próxima vez. Así, fue a recostarse junto a su pareja. Al volver a verlo durmiendo con su rostro relajado, no pudo evitar sonreír. Le era muy difícil estar molesto con él.

Trunks abrió los ojos con pereza al oír su despertador. Con esfuerzo, apagó la alarma mientras intentaba despertarse completamente. Estaba dispuesto a levantarse para comenzar el día, pero unos fuertes brazos que rodeaban su cintura impedían que se moviera.

"¿Goten?" El pelilila estaba confundido viendo al castaño aun dormido. Su pareja siempre se despertaba antes que él para irse temprano a su casa a trabajar en el campo familiar. Y más allá de eso... ¿¡Cómo podía seguir durmiendo después del estruendoso sonido de su despertador!? "Goten... Despierta..." Dijo suavemente mientras lo sacudía. Al no tener resultados, intentó moverlo con más fuerza cuando finalmente tuvo una reacción. El joven gimoteó un poco antes de abrir sus ojos oscuros.

"Hola, Trunks..." Soltó con una voz adormilada mientras se tallaba los ojos. "¿Qué hora es?"

"Como las 7.15..."

"¿¡Qué!?" Goten se levantó con urgencia de su cama para revisar su celular, que lo había dejado dentro de su bolso. "Mierda... Voy muy tarde..." Lamentó el castaño completamente frustrado.

"Tranquilo, no es tan tarde." Intentó animarlo, pero no parecía apaciguar el malestar de su pareja. "¿Quieres bañarte primero?"

Goten solo tomó la oferta y fue corriendo al baño de la habitación. Trunks, mientras escuchaba el agua correr desde afuera, optó por ir a escoger la ropa que usaría ese día. Sacó un par de prendas, cuando recordó su pequeño dilema.

¿Cómo iba a cubrir el desastre que tenía en el cuello?

Algo ofuscado, siguió buscando dentro de su closet hasta que encontró un beatle color café de cuello alto. No quería usar eso, era mucho más ceñido de lo que le apetecía y era verano... ¡Moriría de calor con esa cosa puesta...! Pero era eso, o exponerse a un ridículo en la compañía de su madre. Desganado, simplemente dejó sobre la cama la prenda para usarla ese día.

A los pocos minutos salió Goten con una toalla alrededor de su cintura.

"El baño es todo tuyo." Le anunció mientras acomodaba su ropa para ponérsela. Él trató también de demorarse lo menos posible, por lo que salió rápidamente hacia la habitación para encontrarse con Goten secando su cabello lo máximo posible con la toalla. Se comenzó a vestir y con alivio notó que al menos el beatle cubría bien su cuello. Comenzó a arreglar su cabello cuando el castaño ya parecía listo para irse.

"Ok, ya me voy. Nos vemos en-" Pero su anuncio se detuvo abruptamente, por lo que volteó a verlo y notó la expresión molesta en el rostro del menor.

"¿Pasó algo?"

"¿Por qué estás usando esa ropa?" Goten cuestionó con una voz dura y rasposa. Trunks se miró... ¿Qué malo tenía su ropa?

"¿Qué tiene de malo?" El castaño lanzó un gruñido al oír su pregunta, y luego se acercó a él. Notó que Goten tiraba del cuello del beatle, exponiendo parte de las marcas que había dejado. Trunks, algo molesto por recordar ese detalle, siguió hablando. "Sí, es tú culpa que me muera de calor hoy. Mira que masacrar mi cuello así..."

"No tienes que ocupar eso si no quieres..." Insistió Goten frunciendo el ceño y manteniendo esa voz grave muy poco usual en él. "De hecho, quítatelo ahora." Le ordenó sin reparos, ante lo que él lo quedó viendo totalmente incrédulo.

"No esperas que vaya a trabajar mostrándole esto a todo el mundo, ¿o sí?" El pelilila rebatió alzando la voz mientras indicaba la zona herida. Goten comenzó a abrir la boca, y todo indicaba que quería seguir discutiendo con él, pero finalmente no emitió ningún sonido. En su lugar, dejó caer sus hombros, apretó los labios y desvió la mirada.

"Haz lo que quieras." Susurró antes de salir rápidamente de la habitación. No tardó en escuchar el portazo de la puerta principal y sentir la innecesaria explosión de energía que tuvo que emitir Goten para comenzar a volar. Pero él no se podía mover... No entendía que había ocurrido.

"¿Trunks?" La voz de su madre lo sacó de sus pensamientos. Al ver hacia la puerta notó que también se encontraba Vegeta con ella. "¿Todo bien?" Preguntó ella con cuidado.

"Sí, no te preocupes." Le respondió por inercia. Sin embargo, su padre no lucía convencido.

"El show de tu noviecito no dice eso."

"No es de tu incumbencia, papá." Trunks advirtió con seriedad, ante lo que el hombre entrecerró los ojos y solo se retiró del lugar.

"¿En serio usarás eso hoy? ¿Acaso no viste el pronostico?" Bulma soltó algo burlesca mirando su chaleco, posiblemente para alivianar un poco el ambiente.

"Soy un adulto. Yo decido que vestir, ¿está claro?" Soltó perdiendo la paciencia, haciendo que su madre diera un salto. Al razonar lo que había hecho, comenzó a masajear su sien con una mano. "Lo siento, mamá. No debí hablarte así."

"No tienes que ir a la oficina si no te sientes bien, ¿sabes?" Le dijo Bulma con una sonrisa resignada. "De hecho... Puedes tomarte el día, para..." La mujer se detuvo para pensar sus palabras. "Para que hagas lo que quieras o necesites hacer."

"Gracias, pero no es necesario."

"De acuerdo, cariño."

Sabía que su pareja no estaba siendo razonable y que eventualmente lo entendería. Todo estaría bien.

--

Goten voló a toda velocidad hacia su casa para trabajar. Estaba molesto... No, estaba furioso...

"¡Debes hacer que nos respete! ¡Es nuestro compañero, no nos puede tratar así!"

El castaño lanzó un bufido irónico ante esa voz a la que se estaba comenzando a acostumbrar. Él podía sentirse pasado a llevar, entonces no le sorprendía realmente la molestia de la voz... Pero, ¿qué podría hacer? Ni siquiera entendía por qué de pronto le afectaba algo así.

Si debía ser honesto, Trunks se veía bastante atractivo con el beatle, aunque era ridículo usarlo en un día de verano.

"¡Es nuestro compañero! ¡No nos puede negar así!"

¿De qué rayos hablaba la voz? Trunks no lo había negado... Aunque... aunque ciertamente se sintiera así...

Terminó sacudiendo violentamente la cabeza, con el inútil intento de sacar esos pensamientos negativos.

"Déjame tranquilo..." Goten rogó en un susurro.

"¡Debes proteger nuestro orgullo!"

"Por favor, ya- ya detente..."

"¡Vamos, vuelve allá y dile que se comporte como corresponde!"

"¡CÁLLATEEEEEEEEE!" Vociferó descontrolado. Sin poder contenerse, comenzó a llorar...

Si esto seguía así, no solo perdería a Trunks, sino también su cordura.