Capitulo 5.

487 39 9
                                    

Charles.

Al terminar la carrera, me apresuré a cambiarme, no quería estar más tiempo aquí, me fui a mi carro para irme al hotel y buscar un vuelo a Mónaco, sabía que Carlos iba insistir, y no lo quería escuchar, las acciones valen más que mil palabras, no quería escuchar mas mentiras, fingió también el amarme.

Llegue a mi habitación, me puse a buscar vuelos a Mónaco, pero para mí maldita suerte no había solo hasta media noche, tenía que irme a otro lado, de aquí a la hora de mi vuelo, ir con Pierre no era buena opción, es donde seguramente Carlos me iría a buscar después de ver que no estaba en la habitación. 

Estaba haciendo mi maleta cuando escuche que abrían la puerta, estaba muriéndome por dentro.

– Ángel, ¿Dónde vas? – pregunto al ver maleta.

– Me voy de aquí, no quiero estar más donde sé que sobro. –  exprese con tristeza.

– Claro que no, ángel tu eres lo más importe para mí. – se acercó, pero en ese instante me aleje de él.

– No digas más mentiras, sé que nunca me amaste, que solo era uno más para ti y yo como tonto amándote, te di tanto de mi.... –  intentaba no llorar frente a él, eso era imposible.

– Charles, no te estoy mintiendo, solo escúchame...... por favor ángel. – lo mire a los ojos, esos ojos que tanto amo y que pensé que solo me miraban a mí.

– No, Carlos ya no quiero escucharte, ya no quiero verte, ya no quiero seguir amándote. –  solo quería que esto acabara.

– Mi ángel yo te amo. – tomo una de mis manos. – Lo hago desde los más profundo de mi alma. – Carlos estaba llorando.

– Pero yo ya no quiero que me ames, toda esta estúpida historia de amor se acabó. – me solté de su agarre, tomé mi maleta, me encaminé hacia a la puerta, iba a tomar la manija, pero unos brazos me rodearon.

– Por favor ángel no me dejes. – dijo.

Tenía que irme, escucharlo me hacía sentirme más miserable.

– Carlos, suéltame. – quite como pude sus brazos, pero lo que hizo fue ponerse de rodillas frente a mí, dispuesto a suplicar para que no lo dejara, no podía más, quería abrazarlo decirle que me iba quedar con él.

– Ángel, no te vayas. – verlo así me partió más el corazón.

No podía quitar de mi mente la escena que vi esta mañana, todo lo que viví en mis anteriores relaciones, ya no quería sufrir más, siempre era lo mismo daba demasiado esperando lo mismo, pero siempre recibía migajas, yo perdonaba y lo siguiente que sucedía era estar derramando aún más lágrimas.

– Ya no quiero estar más contigo…. – salí de la habitación con el corazón destruido.

Esto lo hago por mí, solo por mí, pensé.

Me fui al elevador, iba bajando en él, hasta que en el siguiente piso me encontré a Max.

Al verme Max pregunto qué era lo que me pasaba.

No pude más, solté en llanto.

Max me llevo a su habitación, me preparo un té, ya que estaba más relajado le explique porque lloraba, Max me aconsejo que escuchara a Carlos, pero él no podía y pareció entenderlo.

Max.

Sergio salió de la habitación, ni siquiera me dejo contestar, él había roto conmigo por no decirle la verdad, pero sobre todo por ser un miedoso por no tener el valor de decirle a mi padre que estaba enamorado de Sergio.

🥀 PRICKED 🥀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora