El Omega Lee TaeMin tiene un caso horrible de fiebre infantil. Trabajar como recepcionista en una clínica de fertilidad solo empeora las cosas porque ve a Omegas embarazados día tras día. Es una agonía ver a esas parejas felices brillando de emoción, cuando las probabilidades de que él tenga un bebé son casi nulas. Nunca pudo pagar el procedimiento de inseminación artificial, y ningún Alfa lo dejará embarazado a la antigua usanza porque su hermano menor nació con un defecto de nacimiento. TaeMin se considera mercancía dañada.
El Alfa Choi MinHo es donante en la clínica de fertilidad donde trabaja TaeMin. El sexy recepcionista llama la atención de MinHo, y cuando TaeMin comparte su triste situación, MinHo se ofrece a ayudarlo dándole un bebé de la manera natural. MinHo no lo admite, pero está encantado con la idea de acostarse con el irresistible Omega. Sin embargo, MinHo deja en claro que no quiere tener nada que ver con el embarazo o el bebé después de que el trato esté hecho.