Clases de Bienvenida

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Siempre se había preguntado cómo Lou había logrado ganarse tanta devoción y fanatismo entre los muñecos que constantemente insultaba y humillada. Al verlo bailar, sus dudas quedaron claras.

Había olvidado lo increíblemente cautivante que era Lou; entre todas sus peleas y amargas conversaciones, había olvidado que era atractivo que sabía cómo moverse con tal elegancia que solo podías centrar tu atención en él. Sus pasos, su coordinación y su energía dejaban a cualquiera sin aliento... Incluso sintío como el pecho se le aceleraba cuando lo veía sonreír en el escenario y guiñar un ojo en su dirección. Ox sintío que se atragantaba, antes de entornar su ojo con vergüenza.

No... No debío ser para él, es solo el efecto que Lou provocaba: Encantaba la gente y la hacía sentir especial, incluso en un escenario lleno de espectadores. Podía ver a los Premiums igual de hipnotizados como él por el espectáculo. Seguro que Lou también lo notaba desde arriba, y es lo que hacía ensanchar su ego para seguirlos deslumbrando con su canto y su baile-

−Amigo, se te van a entrar las moscas...

Uglydog lo ayuda a volver en sí. Cierto, estaba tan absorto en Lou que no se fijo cuando la presentación termino y la clase de bienvenida comenzó, por lo que debería estar tomando notas en lugar de solo admirar a Lou embobado: Tenía que aprender de él para dar clases con su mismo nivel de extravagancia y carisma:

−Y con los entrenamientos que aprenderán aquí, ¡Sus dueños no querrán JÁMAS dejarlos ir!-exclamo en una última pirueta que concluyo con explosiones de humo e increíbles fuegos artificiales.

Ser dramatico y explotar cosas. Anotado. 

Uglydog a lado suyo silbó:−Lo sigue haciendo increíble. Casi te hace querer olvidar que fue el maniaco racista que intento condenarnos-

¡Chstt! ¡No lo digas tan alto! − Chisto Ox al can en el asiento de alado. Los Premiums estaban a unas filas más delante de ellos, debían cuidar su tono: − Aunque es cierto... Nunca había visto estas clases suyas-

−¿Nunca? Pensé que estudiaste aquí antes ¿Sus clases no eran igual de presumidas?

Ox río−¡No de esta forma! Aún era un presumido, pero... Era más serio y estricto, daba algo de miedo ¡Ja, solo se soltaba cuando entrenábamos a solas en!−Se frena a si mismo. El can volteándose a verlo confundido ante el extraño silencio− Bueno... Era diferente. Ese el punto.

−Aja−Uglydog lo vio removerse incómodo. Inmediato cambio de tema−Bueno, te toca aprender a hacer lo mismo ¿no? ¡A tu propia manera! Podrías inventarte algunos saltos y bailes ¡Podemos hasta practicarlo juntos! Será pan comido

Ox sonrió entusiasmado −Es cierto... Podríamos planear una rutina con Mandy, ¡Y a tí lanzarte por los aires!

−¡No gracias! ¡S-si hay que lanzar a alguien que sea a ti!− Reclamo el can paniqueado, y Ox no contuvo una risotada que salió más alto de lo que pretendía. Miradas del salón se dirigieron hacia ellos, y tanto Ox como Uglydog esquivaron sus miradas a los alrededores...

Es entonces que Ox se percata de la ausencia de una muñeca− Por cierto, ¿Dónde está Mandy? No la veo por ninguna parte

Uglydog se irge tenso− Oh si... Malas noticias. Unos robots nos avisaron que habían unos disturbios en el portal, y le toco ir a revisar-

− QUE!!− Exclamo angustiado, y esta vez escuchó más de un "CHIST" en la sala. Ox, volvió a bajar su tono, pese al pánico−Disturbios, tan pronto... ¿¡Y Mandy está manejándolos sola!?

− ¡No pude ir con ella! Tuve que quedarme a vigilar al dictador bailarín, mientras tú estabas con sus dobles-

−C-claro, claro... P-pero es un riesgo dejar que esos disturbios crezcan y comiencen a llamar la atención ¿Crees que puedas ir a ayudarla?

Líderes en pruebaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora